Capítulo 19. Amor mío

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Después de lo ocurrido Eren se quedó dormido en mi hombro así que decidí recostarlo en la cama para que descansará y le dí la cena al pulgoso de heichou y quedé un rato leyendo un libro, no podía dormir por lo recién ocurrido, Eren se miraba tan vulnerable y lindo me dieron ganas de..... ¡Levi Ackerman en que carajos piensas!

Di un suspiro cansado de mi mismo y mis tonterías y decidí irme a la cama ya que estaba seguro que no podría seguir leyendo y ponerle atención a la lectura.

Me coloqué la pijama y me recosté junto a Eren tomando las cobijas para cubrirme, quedé viendo al techo unos segundos y voltee a ver a Eren que se encontraba de espaldas, lo abracé por atrás algo nervioso ya que se podría despertar pero ese hecho no me detuvo, lo rodee de forma protectiva y olí un poco su piel dando un beso en su nuca y repartí otro y otro más en esa área, no podía detenerme, lamí la zona delicadamente saboreando su hermosa piel color canela y dí un último beso en su hombro deteniendome, me mordí el labio inferior dejando mis tramposos actos y decidí solamente abrazarlo para quedarme profundamente dormido...

Me coloqué la pijama y me recosté junto a Eren tomando las cobijas para cubrirme, quedé viendo al techo unos segundos y voltee a ver a Eren que se encontraba de espaldas, lo abracé por atrás algo nervioso ya que se podría despertar pero ese hecho ...

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°°°°

Desperté al sentir frío y abrí los ojos dándome cuenta que el mocoso ya no se encontraba conmigo, me moleste un poco por eso y decidí levantarme para desayunar y dar de comer a Eren.

Me bañé y vestí colocandome ropa cómoda; unos shorts negros, camisa de una banda que me quedaba colosal y mis pantuflas "ciertamente cómodo" y fui hacia la cocina buscando a Eren en el sillón frente al televisor pero me sorprendió el verlo en la cocina preparando el desayuno, me acerqué a él por detrás y me quedé observando lo que preparaba sin que él se diera cuenta.

Una malévola mueca se formó en mi rostro pensando en lo que estaba apunto de hacer, abrí mis brazos para “atacarlo por detras” y abrí la boca preparado para soltar un “boo”

- ni se te ocurra Levi Ackerman - dijo antes de que lo asustara sin siquiera verme

- ¡¿Cómo carajos supiste que era yo?! - ¿acaso era adivino el muy maldito?

- no lo sé - dijo y continúo con su labor, se encontraba algo distante y eso me preocupo además ¿cómo  supo que era yo? Mi Eren no podría saberlo "¿Quién eres y qué has hecho con mi Eren?"

Me aleje de detrás suyo y me senté en las sillas del comedor viéndolo atentamente desde allí.

- ¿Desde cuándo cocinas? - pregunté dándome cuenta que no tenía ni idea de ese nuevo dato

- siempre eh podido - dijo cortante

- ¡¿Me hiciste cocinar todo este maldito tiempo?! - dije ofendido levantándome de la silla abruptamente.

Los psicópatas también se enamoranDonde viven las historias. Descúbrelo ahora