Lily Harper || Shawn Mendes.

5. Ya no me digas bebé.

Alisto a Lily para dormir y me acuesto a su lado en la cama con el libro en manos, y entonces ella emocionada comenzó a leer.

-¿Que son baobabs mamá? - pregunta luego de unos intentos para decir bien la palabra.

-Son unos árboles muy grandes - le explico.

-¿Y el corderito como se los comerá? - la confusión es clara en su rostro, río un poco.

-Continúa leyendo y lo sabrás - acaricio su cabello.

-Ay Principito que ocurrencias tienes - se ríe viendo el dibujo de los elefantes unos sobre otros encima del asteroide y río con ella.

Sigue leyendo y de vez en cuando le ayudo con palabras difíciles, hasta que terminó con el capítulo y soltó un gran bostezo.

-¿Estás cansada? - asiente cerrando el libro y bostezando de nuevo - Buenas noches cariño.

Beso su frente y ella se estira para besar la mía, luego pega su frente con la mía y sonríe.

-Te amo Mami - sonrío enormemente, no importa cuantas veces la haya escuchado decirme esas tres palabras para mí siempre serán tan especiales como si fuera la primera vez que la escucho decirlas.

-Yo te amo aún más - beso su mejilla - Ahora si, a la cama que mañana tienes clase.

-Mañana es sábado mamá - me recuerda.

-Oh es cierto, pero igual, hay que dormir - luego de que Robert me dijera lo ocurrido intenté mantener el tema tan lejos de mi mente como me fuera posible, tanto así que me he olvidado que mañana es sábado, o sea el día del concierto.

-Buenas noches - me lanza un besa desde la cama cuando estoy apunto de salir de la habitación, respondo del mismo modo y cierro la puerta dejandola entre abierta.

Voy a mi habitación, entro al baño y pongo la bañera a llenarse. Un buen y relajante baño me vendría bien luego de la noticia que me dió Robert. Cuando la bañera está lista y de una temperatura agradable me desvisto y me meto en esta dejando que el agua relaje todos y cada unos de mis músculos.

Cierro los ojos y recuesto mi cabeza  contra el mármol de la tina y cierro mis ojos dejando que los pensamientos lleguen a mi mente pero de alguna manera sin ser totalmente claros.

Sigo sin entender porque ir al único lugar al que frecuento y preguntarle por mi a los camareros, es muy confuso pensé que luego de este tiempo se había olvidado de mí, al menos yo lo intenté pero nunca lo logré; más que todo porque tengo a su minime llamándome "mami" y siguiendome a todos lados.

Los primeros meses de mi embarazo lo extrañé más que a nada, me sentía sola aunque había sido yo quien lo alejó. Al instante que supe de Lily hice lo que fuera para terminar mi relación con él, su carrera apenas comenzaba y no iba a ser tan egoísta de echarle a perder su sueño por un pequeño error pero en realidad lo que más miedo me daba era decirle y que me forzara o me dijera que me practicara un aborto; estoy a favor del aborto pero simplemente no me puedo ver a mi deshaciendome de mi bebé, creo que esto se dio de este modo porque tuve a mi familia apoyandome siempre, sabía que podía con la responsabilidad de tener a mi nena y lo más importante aunque llegó en un momento totalmente inesperado siempre la he querido y recuerdo que cuando era una niña veía a mi hermana cuidar a Liam y soñaba con que algún día yo también tendría a mi bebé.

Y claro que tenía miedo, tenía mucho miedo porque apenas estaba a la mitad de mi secundaria y tenía solo 15 años pero nunca por nada del mundo cambiaría todo lo que ha ocurrido hasta este momento, talvez si fue doloroso no tenerlo a él en los meses más difíciles pero era feliz cuando lo veía en fotos haciendo lo que amaba y por lo que tanto luchó.

(...)

-¡Mami despierta! - la siento brincar en la cama y me cubro mas con la sábana.

-Mamá está cansada, Lily - me quejo cuando sigue brincando.

-Pero ya es tarde - se lanza sobre mi y reímos.

-Está bien, está bien, ya estoy despierta - la abrazo.

-Buenos días Mami - besa mi mejilla y se hace un huevito en mi pecho.

-Buenos días bebé - peino su cabello hacia atrás, arruga su nariz.

-Ya no quiero que me digas bebé, mamá - wow, sabía que algún día lo diría pero jamás pensé que se sentiría de este modo. Siento como si mi corazón se hundiera.

-¿Pero por que? - pregunto desilusionada.

-Porque ya no soy una bebé, soy una niña y tengo cinco - hace el número con su mano frente a mi rostro, la tomó y beso su pequeña palma.

-Pero eres mi bebé, siempre lo serás hasta cuando tengas 59 años - confirmo, ríe y se tapa la boca con las manos.

-Ya estarás muy vieja - se ríe.

-Pues tu también - le saco la lengua.

-Qué madura - entrecierra los ojos y yo suelto una carcajada.

-¿En qué momento creciste tanto mi bebé? - la abrazo contra mi pecho.

-¡Mamá! - me regaña.

-Está bien - ruedo los ojos - mi niña.

Luego de un rato más nos levantamos y nos alistamos para comenzar con nuestro día, normalmente los sábados por la mañana vamos al jardín trasero a ejercitar un poco pero hoy está haciendo un frío que te cagas así que comenzamos el día comiendo nuestro desayuno, cuando terminamos le pongo un gorro lila con un pompon y un sueter ya que mi madre la quiere llevar con ella al centro comercial y la verdad que es mejor así yo adelanto unos trabajos de la universidad para poder ir tranquila al concierto, si, iremos.

-Te portas bien ¿eh Lily? - le digo cuando termino de abrochar su sueter.

-Sí, mami - besa mi mejilla y va corriendo detrás de mi madre.

Limpio la mesa y lavo los platos y lo que usamos para desayunar, y posteriormente subo a mi habitación. Alistó las cosas que necesitaremos para más tarde y me pongo a hacer los mil y un proyectos que tengo para esta semana, definitivamente las ultimas semanas del cuatrimestre te matan.

Las cosas de aquí en adelante de ponen buenas juju.

Espero que les haya gustado el Cap. ❤️