V.- Primera Noche, Primera Parte

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La noche ya se había marcado y cuatro personas se encontraban reunidas en lo que parecía ser una cabaña ella de madera, hasta que un ser de apariencia reptil amarillo ingresaba por la puerta.

 -- Esperamos que esto les pueda ayudar – dijo el reptil amarillo.
 -- ¿Oh? No te preocupes – respondió un chico en su interior, viéndose como el mayor del grupo – tu y tu grupo han sido muy amables, gracias, Agumon –
 -- Buenas noches – dijo Agumon saliendo del a cabaña dejando al grupo solo.
 -- Buenas noches – respondió el grupo al unísono.

Después de aquella despedida, el grupo guardó silencio hasta que finalmente, uno de los integrantes rompió el hielo.

 -- Bien ahí que repasar los puntos y la información que ya tenemos – dijo el líder del grupo, mientras movía un poco sus cabellos rubios – hasta donde sabemos, este no es nuestro mundo, y es un lugar llamado digimundo… --
 -- Además de que por donde sabemos no somos los únicos – comenzó a añadir un chico cuyos cabellos oscuros contrastan con algunos de color blanco – como dijo Klaus cuando nos encontramos con el – continuaba diciendo mientras sacaba de sus bolsillos un extraño dispositivo – esta cosa nos indica cuántos de nosotros ahí aquí –
 -- Sin mencionar, además, que curiosamente, cuando abrimos los ojos en este lugar, lo primeros que vimos fue a estos seres – dijo el tercero cuyos ojos amarillos llaman demasiado la atención, a la vez que señalaba a un grupo de criaturas que dormían acurrucados entre ellos en una esquina de la caballa.

Una de aquellas criaturas tenía la forma similar a un caballo de mar, solo que era de un color verdoso y parecía tener dos pequeñas alas, el otro poseía una forma similar a una nube que poseía un rostro un tanto extraño, el tercero tenía una figura similar a un balón de dolor dorado junto con lo que parecía ser dos cuchillos en cada lado de su cabeza y el último con una forma similar a un insecto de seis patas de un color morado y de un solo ojo. Todos ellos dormían plácidamente, mientras el grupo principal, los continuaba observando.

 -- Además de que todos provenimos de diferentes lugares y, aun así, podemos conversar sin dificultad – agrego el más joven del grupo.
 -- Bueno…  lo mejor que podemos hacer, es que mañana busquemos al resto de las personas que se encuentran aquí, al parecer son en total trece, por lo que no debe ser difícil, por ahora, solo podemos dormir y recuperar fuerzas – decía Klau mientras se ponía de pie con algo de dificultad ya que la cabaña era demasiado baja para el – Ryu, ven conmigo por favor – decía mientras miraba al chico de cabello oscuro y blanco para luego salir de la cabaña.

Ambos salieron dejaron la cabaña y se alejaron un poco para no ser escuchados en su conversación privada.

 -- ¿Qué sucede Klau? – preguntaba Ryu un tanto preocupado.
 -- Ahí algo que me inquieta… -- decía mientras sacaba el dispositivo de su bolsillo y se lo enseñaba que a Ryu.

Klau ponía el mapa y le enseño tres puntos en azules que se veían en la pantalla, Ryu se acercó un momento y luego de mirarlo unos instantes de dio cuenta a lo que se refería el rubio.

 -- Tres puntos – dijo algo serio.
 -- Exacto… y nosotros somos cuatro, en otras palabras, puede que quizás Hyun-Woo o Jack, nos están ocultando información, la pregunta seria cual y porque… --

Ambos jóvenes se miraron un segundo, sabiendo que dicha circunstancia no podía ser favorable, pero el momento se vio interrumpido cuando una intensa explosión se escuchó cerca de donde se encontraban ellos.

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