XXX.- ¿Destino O Casualidad? Segunda Parte

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El grito de Valentina había alertado y asustado a todos los a su alrededor, Isis en un acto de reflejo puro se alejó de Daniel y busco calmar a su amiga, sin embargo, V-mon se le había adelantado, quien sostenía los hombros de la chica buscando calmarla.

 -- Valentina… -- V-mon le hablaba para hacerla reaccionar -- Valentina, estoy aqui… no te asustes -- mientras hablaba la chica parecía calmarse.
 -- Vale… -- Isis decía el nombre de su amiga al mismo tiempo que se arrodillaba a su lado.
 -- ¿Que sucede Valentina? -- V-mon buscaba que la chica lo mirara.
  -- Ma… mama -- fue lo único que comentó la chica de pelo castaño.

Isis al oír la respuesta volteo su cabeza sobre su hombro para mirar a Daniel que se acercaba a ellas, en una rápida mirada los dos habían compartidos el mismo pensamiento, su compañera había tenido una pesadilla.

 -- Vale no te preocupes -- Isis decía mientras volteaba nuevamente para mirarla -- tu mama se encuentra bien --
  -- ¿Me lo… prometes? -- preguntaba un tanto nerviosa la chica.
 -- ¡Totalmente! -- el responsable de responderle había sido el mismo V-mon.
 -- V-mon… -- Daniel había hablado al digimon azulado -- por favor, lleva a Valentina al río a que se limpie el rostro, así también podrá tranquilizarse un poco --
  -- De acuerdo -- al pequeño digimon azulado le pareció buena idea -- vamos Valentina... -- dijo ofreciéndole su mano.

La chica con algo de nerviosismo, tomó la mano de V-mon para luego ponerse de pie y salir de la cueva, en dirección al río, dejando al resto atrás.

  -- Extraña mucho a su familia -- comentó libremente Daniel viendo como Valentina y V-mon salían.
 -- No la culpo -- Isis agregó -- cualquiera en su situación tendría pesadillas y miedos tan intensos --
 -- Si, tienes razon --
 -- ¿Acaso tienes miedo Isis? -- se escuchó la voz de Guilmon, causando que ambos voltearan a verlo.
 -- Guilmon… -- La chica dijo notando los ojos de preocupación del digimon rojizo -- no te mentiré, si tengo miedo a veces --
 -- ¿De mi también? -- Guilmon pregunto más preocupado que antes acercándose al mismo tiempo a la chica.
 -- No, no Guilmon -- la chica dijo tiernamente acariciando el rostro de su compañero -- nunca le tendría miedo a un ser tan gentil y amable como tu -- terminó diciendo con una sonrisa.
 -- Eso me alegra -- el digimon rojizo dijo olvidando toda su preocupación.

Daniel al ver tan conmovedora escena volteo a la entrada de la cueva, viendo como Agumon y Gabumon seguían durmiendo como si nada de lo reciente hubiese sucedido, cosa que sólo provocó que este se rascara la cabeza, mientras caminaba a hacia ellos.

  -- Hey, despierten -- dijo el chico ya están sobre ellos.

Lentamente ambos digimon abrieron sus ojos, solo para luego sentarse en su sitio mientras miraban a Daniel algo confundidos y aún adormecidos.

 -- ¿Ya está el desayuno? -- pregunto Agumon con total inocencia.
 -- ¿Solo piensas en comer? -- Daniel ignoró la pregunta.
 -- Y a veces en dormir -- respondió para luego volver a recostarse y en ese lugar estirarse un poco.
 -- ¿Pasó algo durante la noche? -- pregunto esta vez Gabumon.
  -- Si… -- el Tamer respondió seriamente -- nos invadieron y ahora Isis y Valentina están secuestradas -- comentó sarcásticamente.

Aquella frase, causó que los dos digimon saltarán de su lugar e inquietamente se movieran de un lado a otro buscando alguna pista de lo que supuestamente sucedió, provocando aún más la molestia de Daniel.

 -- ¿Que están haciendo? -- el joven preguntó cruzándose de brazos seriamente.
 -- ¡Tenemos que salvar a las chicas! -- Agumon gritaba con miedo.
 -- De seguro tienen miedo, debemos idear un plan y buscar recursos -- Gabumon pensaba en voz alta -- pero primero debemos encontrar a Guilmon y V-mon --
  -- Calmense… -- la voz de Daniel se hizo fuerte y autoritaria -- las chicas están bien -- dijo señalando al fondo de la cueva.

Ambos digimon detuvieron su actuar y centraron su atención al interior de la cueva, viendo como Isis y Guilmon los miraban desconcertados, solo para después tanto Agumon como Gabumon voltearan a ver a Daniel quien le devolvía la mirada con seriedad y frialdad.

 -- Y… ¿Valentina? ¿se encuentra bien? -- Gabumon hizo la pregunta más lógica del momento.
 -- Si… se encuentra en el río con V-mon -- respondió Daniel.
 -- Entonces… ¿ya vamos a desayunar? -- Agumon preguntó con su típica calma.

Daniel solamente se limitó a soltar un suspiro donde reflejaba toda su molestia interior. Justo en ese instante Valentina llegaba al río acompañada de V-mon, el cual no le soltaba de su mano.

 -- Cuidado… -- dijo el digimon azulado a su Tamer.
 -- Si, gracias -- la chica le respondió con gratitud.

Finalmente soltando la mano de su compañero, la chica se arrodilló y metió sus manos al agua, sobresaltandose levemente debido a que está encontraba fría, después de eso, con cuidado recogió agua con sus manos y la llevó a su rostro, a la vez que pensaba y recordaba la pesadilla que había tenido, solo para generar un sentimiento de angustia en su interior, debido a que extrañaba demasiado a su madre y sabiendo que está sin ella, estaría totalmente sola. Debido a la emoción, Valentina no pudo evitar llorar, solo para que al momento siguiente, sintiera la mano de V-mon en su hombro.

 -- No te preocupes -- dijo la chica poniendo su mano sobre la de V-mon -- estoy bien -- al voltear su rostro, noto como su digimon en ningún momento la estaba mirando, sino que concentrado mantenía su vista al frente.
 -- No… te muevas -- V-mon hablo levemente, casi llegando a un susurro.

Valentina no pudo evitarlo y giró su cabeza hacia adelante, solo viendo como del otro lado del río y escondido entre los árboles, una persona o digimon los miraba fijamente.

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