28. Buscador estrella

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JAMES

Estábamos dándole una paliza a Ravenclaw.

En el partido Ravenclaw contra Hufflepuff, Ravenclaw había ganado sin problema alguno.

Tal y como nosotros lo estábamos haciendo ahora.

Íbamos noventa a treinta, realmente estaba confiado. Solo tenía que atrapar la snitch como siempre y ganaríamos la copa de Quidditch.

Pasaron varios minutos para que lograra ver la snitch. Un reflejo dorado me cegó por escasos segundos, rápidamente ubiqué la snitch a un lado de los aros.

Inmediatamente, con la escoba me acerqué lo más rápido que pude.

Claro que al moverme yo, fue como decirle al otro buscador "Hey, ¡mirame! Si me sigues te guiaré a la snitch" Y si, apenas me moví y el buscador de Ravenclaw me siguió.

Ni siquiera sabía su nombre, Ravenclaw cambia su buscador cada año. Lo único que sabía de este chico rubio era que se apellidaba Cooper, y eso porque lo decía su capa.

En algún momento, me alcanzó y voló a la misma rapidez que yo. Me incliné hacia delante, ganando rapidez. Poco a poco lo fui rebasando.

El chico no hizo nada para detenerme, sólo intentó ir más rápido. Al menos jugaba limpio.

Más rápido de lo que imaginaba, me acerqué a la snitch. Estiré mi brazo para tomarla, mis dedos rozaban las pequeñas alitas de la snitch pero escuché una bludger acercarse y quité mi brazo y la la bludger pasó por ahí tan rápido que apenas la vi.

Perdí un poco de tiempo, pero me recuperé rápidamente. Claro que atrapé la snitch.

Gryffindor ganó la copa de Quidditch.

(...)

-Ve eso, Lily.-dije emocionado señalando la vitrina de trofeos.

-Ajá.-dijo viendo otro lado.

-Lily, ¿Sigues enojada?-ella me miró con el ceño fruncido.

-Saltaste por la ventana sólo por un beso.

-¿Te he dicho que te ves aun más linda cuando estas enojada?-dije besándole la mejilla.

-Jaaames.-resongó.

-Liiily.

-¿Por que haces tantas estupideces?

-Te recuerdo que tu me retaste.

-No lo decía enserio.-dijo haciendo puchero.

-Ay, Lily.-la abracé y ella hundió su cabeza en mi pecho.-Sabía que habría una escoba abajo de la ventana.

-Pero yo no.

-No soy taaaan idiota.

-Me asusté.-dijo sacando su cabeza de mi pecho y levantándola para verme.

-Tranquila, tienes James para muchísimos años más.

-¿Cuantos?

-Los que quieras.

-¿Y si los quiero todos?

-Te daré todos, entonces.-y la besé, y lo disfruté mientras duró.

-¡Potter! ¡Evans!-nos regañó la profesora McGonagall. Lily inmediatamente me aventó, dejándose a si misma fuera de mi alcance.-Me parece estupendo que se quieran, pero tengan respeto por sus compañeras.

Detrás de una columna, habían un par de niñas de primer grado. Ambas nos miraban a Lily y a mi. Les guiñe un ojo y ellas soltaron risitas.

-¿Potter, me estas escuchando?-me llamó la atención la profesora McGonagall.

-Claro que si, profesora. Y me disculpo. Pero con todo el respeto que merecen usted y mis compañeras, me permito decirle que...la culpa es de Lily.

-¿Que?

-Potter, no estoy para bromas.

-No es ninguna broma, profesora. Lily lleva mucho tiempo aguantando las ganas de besarme. Debe entender que soy inevitablemente irresistible.

Lily abrió la boca con indignación. McGonagall rio.

-No sé como lo hacen, pero forman la pareja perfecta. Los estaré vigilando.

McGonagall caminó al final del pasillo y Lily comenzó a caminar al lado contrario.

-Hey, hey, hey.-le tomé el brazo.-Era broma.

-Ni creas que no vi como les guiñaste el ojo a esas niñas.-dijo apuntándome con su dedo. Solté una sonora carcajada.

-Anda, sólo ven a ver.

Le enseñé la placa que decía James Potter, Buscador.

-Felicidades, te la ganaste.-me dijo sincera.

-¿Te das cuenta? Esta es como mi huella en Hogwarts.

-Has dejado muchas huellas, junto con Sirius.-comentó.

-Algún día mis hijos verán esto y se sentirán orgullosos de mi, ya verás.

-O tal vez sean mejores que tu y se reirán de ti.

-Soy mejor buscador que tu, no estas en posición de decir eso.

-Pero mis hijos lo estarán.

-¿Estas asumiendo que tendremos hijos?

-¿Que? No, yo no dije..

-Si, di lo hiciste.

- No lo decía en ese sentido

-Oh, pero lo hiciste.

-Ay, cállate James.-rei.-¿No nos están esperando en Hogsmeade?

-¿Por que no vamos a celebrar al Bosque Prohibido?

-Por eso, es prohibido.

-Como si nunca hubieras ido.

-Oye, hoy me estas molestando más de lo normal.

-Es mi forma de demostrarte mi amor. Llevo años haciéndolo, creí que lo sabrías.-ella sonrió.

-Vamos a Hogsmeade, anda.-tomó mi mano y caminamos hacía la salida del castillo.

-Tu sólo quieres ir por tus ranas de chocolate.

-Son detalles, James.

Caminamos en silencio por un rato, luego ella habló.

-¿Te das cuenta de que ese fue el último partido de quidditch?

Era cierto, no lo había pensado. Faltaban menos de dos meses y saldríamos de Hogwarts. Merlín, de verdad no lo había pensado. Será difícil.

-Fue un buen partido.

-Si, me enorgulleces.

-Menos mal, creí que preferirías a Jane.

-Ya superalo.

-Sigo sin creer que me ganara.

-Ella es rápida, pero no es buena esquivando bludgers.

-Ya decía yo. No podía haber alguien mejor.

Sin Enamorarse Donde viven las historias. Descúbrelo ahora