❝𝐃𝐎𝐆𝐆𝐘❞ ➻ 𝐇𝐎𝐏𝐄𝐆𝐀

Dieciséis

Yoongi sacó a todas las personas que se encontraban cerca del perímetro de su casa husmeando su privacidad, incluso a los policías que solo querían brindarle ayuda en lo que fuese necesario, pero el sabía perfectamente que si procedían con una investigación les llevaría meses e incluso años solo para que al final le dijeran que Hoseok y los demás habían muerto, no desperdiciara algo que no tiene, no perdería su tiempo yendo de un juzgado a otro, cada segundo que pasa es una tortura al no saber que le pueden estar haciendo ahora a Hoseok.

—Yoongi, estoy en casa. —dijo Taehyung con un tono preocupado al ver a Yoongi sentado en el suelo con la mirada perdida.

—Quiero que vallas con BamBam, no puedes quedarte aquí, además esta más cerca de la universidad. —dijo Yoongi con una voz muy áspera y para nada dulce.

—¿Qué pasara contigo hasta entonces? —hizo una nueva pregunta mientras tomaba lugar en el suelo enfrente de Yoongi.

—Yo buscare cualquier forma de salvarlos a todos, pero no quiero que te hagan daño a ti. —dijo para por fin mirar a Taehyung. —Ya perdí a Hoseok y a Jimin, no quiero que tu seas el siguiente. —continuó con sinceridad.

—Me preocupa que algo pueda pasarte, estas metiéndote en terrenos que prometiste nunca más volver a pisar.

—Esta ves sera por una buena razón, prometí nunca más lastimar a alguien inocente, pero ellos no tienen ni siquiera alma.

—¿Por qué no hablas con Kai? —comentó Taehyung con inseguridad, sabía los problemas que Yoongi y el comandante Kai habían tenido, pero ahora el podría ser una buena ayuda para Yoongi.

—¿Después de los problemas que le cause crees que quiera hablar conmigo?

Yoongi miró fijamente a Taehyung quien al sentir la pesadez de sus ojos clavados en él no dudo en verlo de la misma manera, sin sentirse intimidado o arrepentido por su propuesta.

Taehyung más que nadie sabía a la perfección sobre la vida de vándalo que Yoongi había llevado durante toda su adolecía, era bastante común que su madre recibiera llamadas a mitad de la madruga solo para que fueran por Yoongi a la celda de separo. El comandante Kai era el que siempre sufría por las fechorías que Yoongi hacía junto a su viejo amigo Jackson, fue hasta la universidad después del fallecimiento de su madre donde Yoongi dejó esa vida para dedicarse completamente a él y a Jimin y aunque esto causó molestia en Jackson nada le hizo cambiar de opinión.

Yoongi fue el primero en apartar la mirada de la de Taehyung, se sentía frustrado y no podía hacer nada para que ese sentimiento lo abandonara y lo dejase más tranquilo, las ideas no fluían con claridad en su cabeza, todo estaba obscuro en su camino, Hoseok era la luz que le dejaba ver su sendero y ahora solo le quedaba volver a cargar solo los problemas sobre su hombro. Sintió una fuerza moderada envolver su cuerpo haciéndole sentir seguro y apoyado, Taehyung le susurro suavemente su agradecimiento agregando que todo estará bien y que siempre estará allí para apoyarlo sin importar el día, la hora o el tiempo, por que más que amigos son hermanos y de eso se trata aquel lazo que crearon.

—Ire con BamBam, pero eso no quiere decir que deje de venir a verte para saber como estas.

—Ni siquiera estaré aquí, no podre descansar hasta encontrarlos a salvo. Pero en cambió, quiero que tu termines el último semestre que te queda y que te gradúes, prometo que estaré en la ceremonia. —dijo con una pequeña sonrisa acariciando suavemente el cabello de Taehyung.

—Se que lo cumplirás. —respondió Taehyung aferrándose con más fuerza a Yoongi.

Yoongi infló su pecho poco a poco para después dejar ir un suspiro.