Velztek(Borrador)

《Capítulo 4》Recuerdo y continuación

Mi nombre es ******, soy un chico sencillo como cualquiera, a mi edad de 18 años puedo decir que las cosas me van bien, a mis padres les va bien, a mis amigos les va bien  y en general no tengo problemas.

Hoy en especial podría decir que me encuentro realmente bien, hoy sin exagerar podría ser el mejor día de mi vida, recién fue mi cumpleaños y la chica que me gustaba me invito a comer Cómo regalo y eso no es todo pues luego de comer se me declaro, ella a mi.

Fue una sorpresa cuando comenzó a tartamudear mientras su rostro se sonrojada y justo al momento de pedirme ser su novio no supe que decir más que, si...Si quiero.

Ella se puso muy contenta por mi respuesta y yo aun mas siendo que la llevó queriendo desde hace 5 años, aunque por otro lado me siento un poco mal conmigo mismo, no por haber hecho algo sino por no hacerlo, me hubiera gustado ser yo el que ser declarará pero ya que, si todo funciona con ella aún puedo proponerte matrimonio en un par de años.

Al terminar de comer y charlar por un rato la acompañe a su casa en la que fui recibido por sus padres que no dejaban de mirarme como esperando mi respuesta, se pusieron felices al ver que había dicho que si; poco después mis padres también me llamaron preguntando lo mismo.

¿Acaso soy el único que no lo sabía?

Hable un poco con mis suegros y me despedi para poder regresar a casa, ya estaba tranquilo y feliz por este cumpleaños, hoy en especial las calles se ven en su mayoría animadas.

Luces por todos lados anunciando el nuevo año que se aproxima, ¿Mencione que cumplo años el 31 de diciembre a media noche?
 
Generalmente todo suele estar tranquilo en esta ciudad, aunque hoy era la excepción por el año nuevo, hoy en especial algo diferente al ruido de las calles llamó mi atención, un ruido algo preocupante al otro lado de un callejón se escuchaba levemente entre los fuegos artificiales de la noche; pensé en irme a casa pero ese ruido me tenia intrigado y preocupado, al final sin nada que perder decidí acercarme para ver que ocurría.

Al caminar por el callejón y acercarme al ruido pude observar como del otro lado del callejón y sobre otra calle los ruidos que se escuchaban provenían de una pequeña niña y un perro, la niña se encontraba asustada y con sus ojos llorosos ante aquel perro que la había acorralado en medio de la calle; dicho perro era un lobo siberiano, raza de perro similar a un lobo, solo que este era de color blanco, no paraba de gruñir y ladrar a la pequeña que solo temblaba sin saber que hacer, la pequeña tenía alrededor de 5 a 6 años y se encontraba sola con el perro sin nadie alrededor, literalmente aquella calle se encontraba vacía y sin ni una luz, el único ruido era el causado por los llantos de la niña y los ladridos del perro que se tapaban ante los fuegos artificiales que se escuchaban a lo lejos eh iluminaban el cielo.

Al ver la situación no me dio de otra que correr a ponerme entre la niña y el perro, estaba sintiendo algo de adrenalina mientras me usaba a mi para que el perro no la lastimara fue al momento de la niña llorar tras un grito que el perro se dispuso a atacar, su mirada era peligrosa, realmente buscaba lastimarnos y no fue broma cuando este se lanzo a mordernos, cosa que evite poniendo mi brazo al frente de mi, gran error; el perro había mordido mi brazo con fuerza causándome mucho dolor mientras un líquido rojo manchaba la boca del perro y brotaba de mi brazo, estaba sangrando, el mordisco había sido muy profundo y no se si fue la adrenalina pero en cierto momento no sentía el dolor.

-ojalá esta cosa no tenga rabia, jaja

Ante mis palabras la niña sólo me miro aún asustada mientras comenzaba a correr en otra dirección lejos del perro que aun me mordía el brazo, supongo que ya estará mejor aunque quizás debería seguirla para que no se pierda, pensé mientras la veía alejarse aún más, el perro no quería soltarme así que yo debía quitármelo o me podría desangrar.