He's in the rain [Changlix]

La conversación con final...

Al día siguiente, durante el descanso, Minho se nos une. Es extraño porque suele pasarlos con Changbin, Jisoo y otros amigos de su clase, pero nos hace ilusión a los cinco. Normalmente nos aburrimos como ostras y lo único que nos divierte es ver cómo Hyunjin se pone nervioso cada vez que Jeongin le habla.

Ahora la diversión aumenta porque el que parece que se pone nervioso es Jisung. Le gusta, eso lo tengo claro. Creo que soy el único que lo sabe. No obstante, él nunca había reaccionado de esa manera en su presencia.

Le doy un codazo y cuando me mira levanto las cejas, preguntándole qué es lo que sucede.

—Felix, ¿no tienes que tomarte la medicación?

Estoy mucho mejor, pero mi tía me ha recomendado que me siga tomando las pastillas durante dos días más, por si acaso.

—Sí, ahora vengo.

No me molesto en preguntarle a Jisung si viene, porque sé que me ha dicho eso para que podamos hablar a solas. La pastilla me la puedo tomar cuando termine el descanso, así que solo es una excusa.

—Venga, empieza —le digo con una sonrisa cuando subimos las escaleras.

—Últimamente no deja de mandarme mensajes —responde—. Desde hace varios días. Me pregunta cómo estoy, qué estoy haciendo... Todo normal, exceptuando el hecho de que nunca hemos sido tan cercanos. Pero anoche la conversación... Bueno, se me nos fue un poco de las manos.

—¿A qué te refieres?

—Ya sabes... —Empieza a sonrojarse y entonces me tapo la boca con la mano para no reírme—. ¡Felix! ¡No seas tan cruel!

Al final termino por reírme.

—¿Me estás diciendo que tuvisteis una conversación con un final...?

—¡Cállate! —exclama dándome un empujón.

Se me saltan las lágrimas y empieza a dolerme la barriga de tanto reír. Jisung parece molesto, pero eso solo lo hace más divertido.

—No voy a contarte nada nunca más.

—Oye, que es broma —digo cuando consigo controlarme—, es que me ha hecho gracia. ¿Entonces no quieres estar cerca suya después de eso?

—Sí, sí quiero. Vamos a quedar mañana. Es solo que me da un poco de vergüenza.

—Mañana íbamos a quedar con los chicos para ir a casa de Chris —respondo poniendo cara de molestia.

—Podemos ir el domingo. El lunes es fiesta.

Sonrío y le doy palmaditas en la espalda.

—Ay, que has ligado.

Llegamos a clase y voy a mi pupitre para coger la pastilla y el agua.

—¿Y tú qué? ¿Qué tal con Changbin?

Ahora es mi turno de ruborizarme.

—Bien. No pasó nada. Cuando me desperté a la hora de la cena ya se había ido.

Omito que me vio en ropa interior o que me puse a llorar y a decir estupideces, por ejemplo. No es necesario ser tan específico.

Me tomo la medicación y salimos.

Cuando llegamos con los demás, veo que Jeongin está sentado en el suelo y con la espalda apoyada en el banco de piedra en el que Hyunjin está sentado con las piernas abiertas para dejarle espacio al pequeño. Tiene las manos en su cara y se están riendo mientras hacen tonterías. La verdad es que son muy tiernos y espero que se digan lo que sienten de una vez.

Minho está hablando con Seungmin y con Chan, y nos acercamos a ellos pese a que yo preferiría irme con los otros dos por mucho que les cortara el rollo. No me apetece estar cerca de Chan cuando no me ha dirigido casi la palabra en todo el día.

—Tienen algo raro —dice Minho.

—No seas exagerado —interviene Seungmin—. Solo querían estar juntos durante un rato.

Jisung y yo nos sentamos en el suelo y cerramos el círculo que han formado. Minho aparta la vista de Seungmin, mira a Jisung y le dedica una sonrisita que casi me hace gritar hasta a mí ahora que sé lo que ha pasado entre ellos. Le está recordando con un solo gesto el día anterior.

Jisung se ruboriza hasta las orejas.

—¿De qué habláis?

—De Changbin y Jisoo —dice Seungmin con un suspiro—. Minho dice que pasa algo en esa relación.

—Es que pasa algo —dice, volviendo al tema de antes—. Jisoo se ha sentado con Lisa durante las clases, así que Changbin ha vuelto conmigo. No se han hablado prácticamente nada, y ahora de repente se están pegando el lote durante todo el descanso. ¿Entendéis por qué tenía que irme de allí? Menos mal que siempre estáis dispuestos a acogerme. No sé qué haría sin vosotros.

Chan levanta la cabeza y me mira. Sabe que esas palabras están afectándome y suspira.

—¿Qué tal el examen de inglés? —le pregunta, intentando cambiar de tema.

—Estupendo. Me vino muy bien que me ayudaras después de clase. No necesité estudiar más y pude olvidarme del último examen durante el resto del día. Ahora soy libre toda la semana que viene.

¿Último examen? Changbin me dijo que iba bien en clase, pero inglés siempre le ha costado...

—¿Cómo le ha ido a Changbin hyung? —pregunta Seungmin.

—No demasiado bien. Me ha dicho que ha fallado en bastantes preguntas, pero no le he visto muy preocupado.

—Podría haber venido ayer y estudiar con nosotros —dice Chan.

Empiezo a sentirme mal por haberlo retenido en mi casa y haber hecho que estuviera pendiente de mí toda la tarde. Si suspende será por mi culpa.

—Me ha dicho que estuvo ocupado, no sé en qué, y que estudió un poco, pero que tenía cosas que hacer más importantes que un examen de inglés.

Seungmin, Chan y Minho se quedan un rato hablando mientras Jisung y yo observamos a Jeongin y a Hyunjin. Ahora el mayor es el que tiene la espalda contra el banco y Jeongin se ha apoyado contra su pecho. Están hablando, pero ya no se están riendo.

—Parece que están manteniendo una conversación más seria.

—¿Crees que Hyunjin...? —pregunta Jisung.

—No, dudo que le esté diciendo nada a Innie sobre eso.

Nos quedamos callados un rato hasta que Chan habla.

—¿Sigue en pie lo de mañana?

—¿Podría ser el domingo? —pregunta Jisung.

No me pierdo la mirada que le echa Minho. Nunca había pensado que esta pareja podría hacerse real, pero me encanta la idea. Son perfectos el uno para el otro y me apetece levantarme y ponerme a dar saltitos, pero me contengo.

—Mi familia no vuelve hasta el martes, así que sí.

—¿Qué vais a hacer? —pregunta Minho.

—Vamos a dormir en mi casa, ¿quieres venirte?

—Si os da igual, sí. Me gustaría.

—¿Y Changbin hyung? —pregunta Seungmin.

Chan me mira y yo me encojo disimuladamente de hombros. Es la primera vez en meses que estoy aceptando por mi propia iniciativa estar en la misma casa que Changbin. Mi amigo me sonríe.

—¿Puedes encargarte de decírselo a Woojin y a Changbin? —le pregunta a Minho, y este asiente.

—¿Estarás bien? —dice Jisung en voz baja.

—Eso espero.

Pero yo no puedo olvidarme de que, en algún lugar de este instituto,  Changbin y Jisoo están pegados el uno al otro.