Hoy no estaba de buen humor.
En la mañana mi coche no prendió y mi secretaria no apareció. Que cabe decir ahora es mi ex novia.
Típico: la encontré hace un par de semanas en la cama con otro. Aún no lo supero y no porque la haya querido, sino, porque con quien estaba era mi hermano.
Soy dueño de una empresa de tecnología, que en su tiempo llegó ser de mi padre adoptivo.
Mis padres murieron cundo yo nací, así que me quedé con él. No tengo nada propio, como si pudiera ser peor.
Me llamo Armando Casas. Sí, lo sé, mi padre tenía un sentido del humor un poco retorcido. Cuando estaba en la primaria todos preguntaban: ¿Armas casas?, ¿eres albañil?
Ahora voy hacia una cafetería a engatusar a otro cliente (es una mujer) con mis encantos.
Lo único que puedo hacer para ganármelos. Porque no tengo nada para hacer lo contrario. Ni quiero.