No es tan fácil ser amigo de Shi Qing Xuan 🤷 (Tian Guan CI Fu)

5 Embriagado hasta caer.

Un extraño rumor se había esparcido en la Capital Celestial, el maestro Ming Yi estaba de regreso. Por lo tanto cuando He Xuan regresó, la mirada de varios Oficiales estaba posada en en él.

- Ming Yi cuanto tiempo.

- Señor de la Tierra, un gusto saludarle.

Maestro Ming Yi esto, Maestro lo otro.
He Xuan nunca había tenido tanta atención. Tarde se le hacía para ir a la fuente por Shi Qing Xuan, ¿Pero por qué tanta urgencia? Realmente no era una cita, ¿O sí?

Como pudo, se desembarazo de aquéllas atenciones y logró una retirada elegante, la sutil huida hacia atrás, en medio de una plática.

Ming Yi, digo, He Xuan se recargó en un árbol en espera de Shi Qing Xuan.

- Ming Xiong, Ming Xiong, ya estoy aquí, - dijo Shi Qing Xuan corriendo hasta tomarse del brazo a He Xuan.

- ¿Esperas que te llevé vestido así? - la joven devastación estaba arrepintiendose aún más.

Shi Qing Xuan llevaba un vestido blanco con bordados de flores en colores suaves, el cabello recogido en dos chongos simétricos adornados con lindas peinetas de oro y cuentas de colores en los oídos. La piel era tan blanca y tersa y los labios tan rojos y suaves y las mejillas tenían tan lindo color rosado que maquillarse no era necesario.

- ¡Por supuesto! - dijo Shi Qing Xuan mirando a su alrededor, como si alguien pudiera estar espiando, - si alguien nos ve creerá que soy una oficial menor. Le pedí a una amiga que me prestará este atuendo, también me peine igual a ella. Si mi hermano se da cuenta de que bajé al reino mortal y envía a sus sirvientes a buscarme, no sospechara de un par de novios, ¿No lo crees así?

He Xuan levantó las cejas, - haz lo que quieras, - respondio algo impaciente, aún cuando aquello tenía tenía sentido estaba seguro de que algo estaba mal con esa salida.

Shi Qing Xuan sonrió aún mas y beso de manera fugas la mejilla de su acompañante, - ¡Eres el mejor Ming Xiong!

- No hagas eso, no somos novios verdaderos.

- Pero si no nos vemos cariñosos, no nos van a creer.

He Xuan sonrió con una extraña expresion, « creo que encontrarme contigo será mi perdición. » Más resignado que de acuerdo, tomó a su acompañante por la cintura cruzando media Capital hasta las orillas, - ¿Estás listo? Si te sueltas usa tu abanico para evitar caer.

- Pero yo no sé usar... ¡Aaaah¡

He Xuan no lo dejó terminar y arrojando su pala por delante, salto a ella y la utilizó como si fuese una espada voladora, para bajar al reino mortal.

Cuando los pies de Qing Xuan tocaron el suelo sus ojos brillaban como dos estrellas luminosas y ,contrario a lo que se hubiera esperado de un chico, Shi Qing Xuan corrió hasta un pequeño grupo de flores que crecían silvestres.

El Oficial impostor recorrió el valle con la mirada. El tiempo pasa y modifica todo a su alrededor, pero hay lugares que parecieran ser perdonados por el paso de los años, ese valle era uno de esos.

Shi Qing Xuan seguia entretenido con las flores, el joven fantasma se sentó por un lado, no prestando atención al Oficial, sino recorriendo cada esquina y cada rincón de aquel bello lugar. Los senderos y arboledas estaban llenos de recuerdos de su infancia.

- ¿Como me veo? - preguntó el maestro, que ahora llevaba una corona de flores sobre sus cabellos.

He Xuan no dijo nada, un recuerdo llegó a él, uno hermoso y a su vez doloroso. Sonrió asintiendo con aprobación y de manera suave tomo la mano de Shi Qing Xuan y lo condujo hasta la carretera.