No es tan fácil ser amigo de Shi Qing Xuan 🤷 (Tian Guan CI Fu)

15 El hombre más rico de la capital celestial.

He Xuan solo podía ver a Shi Qing Xuan ir y venir de un lado a otro de la habitación, la habitación de su maestro Ming Yi.

Ciertamente estaba disfrutando de la colorida gama de expresiones de ese torpe maestro, que buscaba una solución a su desastre.

¿Se cansaría algún día de mirarlo?

El joven Dios estaba preocupado, su hermano se encontraba convaleciente a causa del veneno y ahora tenía que resolver aquel dilema. Hablaba tratando de dar alguna idea pero He Xuan solo lo observaba en silencio.

- Ming Xiong has prestado atención a alguna de mis palabras.

« Solo te he prestado atención a ti, » Sí, - respondió el Rey Demonio sentado de piernas cruzadas desde la cama.

- ¿Qué opinas? - Pregunto Shi Qing Xuan deslizándose en la cama junto a He Xuan.

- No creo que alguna funcione, - le dijo enderezandose y pasando tiernamente la mano en la cintura del maestro halando hacia él.

- Ming Yi no quiero que te destierren por mi culpa.

- Eso no debería preocuparte.

El joven fantasma no se preocupaba por el destino de Shi Qing Xuan, sí algo no salía bien simplemente se lo llevaría tan lejos que nadie los encontraría.

- Pero me preocupas. También me preocupa que me destierren. Tú dijiste que me puedo convertir en un alma vengativa. ¿Que pasará con mi hermano si pasa eso?, Soy su única familia.

- Eso no va a pasar, «podrían desmembrarte parte por parte y aún así no encontrarían ni pizca de venganza en ese cuerpo tuyo,» encontraremos una solución, - respondió He Xuan acariciándole la cabeza.

Shi Qing Xuan se acurrucó aún más en ese cuerpo helado, dejándose querer y procurando un poco de calor a su amigo.

- !Lo tengo¡ le pediré al Maestro de la Lluvia que haga llover sobre el mo, mo..

- Mausoleo, - interrumpió el fantasma.

- Sí, mausoleo y asunto arreglado.

- Estás seguro de que ese maestro nos querrá ayudar.

- Por supuesto que sí.

He Xuan no estaba seguro, molestar a otro Oficial por los problemas que él había causado no era lo que tenía en mente. Repentinamente Shi Qing Xuan se levantó de la cama, tapando uno de sus oídos. El Rey Demonio estiró el brazo para pillarlo de nuevo, necesitaba más de ese joven.

- Dice Ling Wen que pases a su oficina para activar tu cuenta bancaria y también por tu contraseña para la red de comunicación, - le dijo y saco su abanico para refrescarse un poco.

- Bien voy ahora mismo, - He Xuan se puso de pie y le quitó el abanico, - este es un instrumento para canalizar tu fuerza no un artículo de lujo.

Shi Qing Xuan trato de quitarle su instrumento espiritual pero ¿Que podía hacer contra ese hombre físicamente más alto más fuerte? - Regresamelo, iré con el maestro de la Lluvia.

- No, tú no puedes ir a ningún lado sin mí. Vamos con Ling Wen.

- Ah. - Respondió desanimado.

*****

- ¡Maestro Ming Yi bien venido!

- ¡Como está usted su Señoría!

- ¡Bien venido maestro!

De repente todo el mundo era sumamente amable con el Joven He Xuan. Shi Qing Xuan sonreía feliz por toda la atención que le prestaban a su mejor amigo.

- Oh! Maestro, permítame un momento. Enseguida está mi superior con usted, - dijo uno de los Oficiales menores.

- ¡Maestro Ming Yi! - Ling Wen entró sonriente a la sala principal aliviada de que ese hombre no trajera consigo su dispositivo espiritual. ¿Pero quién necesitaba un dispositivo espiritual si tenía a un Dios tan destructivo como el Maestro del Viento?, Ling Wen miró un poco desconcertada a Shi Qing Xuan pero enseguida se recompuso. - ¡Pequeño Shi! que gusto saludarlos a ambos.

- ¡Su señoría Ling Wen! el gusto es mío. Por cierto no veo a Su Ling, - dijo el Dios del Viento estirando el cuello tanto como una Garza. Esa Oficial menor siempre había sido muy amable con él, podría decirse que eran amigos. Bueno eso le hubiera gustado, pero Shi Wu Du la había intimidado para que se alejara de él.

- Fue enviada de regreso, - le dijo Ling Wen de manera indiferente.

Con el gesto que adornó el bello rostro de Shi Qing Xuan era obvio que aquellas palabras le habían hecho sentir mal. Esa oficial menor era quién le había prestado los ropas el día que se escapó con Ming Yi. Muy probablemente la Diosa de la sabiduría la había enviado de regreso a la tierra a causa de su propio hermano. El Dios del viento se lamento por eso pero no dijo nada más. El Rey Demonio se dio cuenta de su tristeza y lo guardo para preguntarle el motivo después.

- Oficial Ming por favor, venga conmigo necesito activar su cuenta.

el maestro de la tierra camino tras la diosa de la sabiduría dejando al pequeño maestro del viento en la sala principal.

- El estado de cuenta es privado, solo usted y el encargado de su cuenta, en este caso yo, conocemos su saldo.

Ling Wen le mostró el estado de cuenta. Sí el cheque de préstamo le había parecido excesivo y el de Hua Cheng demasiado obsceno, ese estado de cuenta era el Rey de la indecencia.

- Oh! Eso, esos son muchos méritos, - dijo Shi Qing Xuan asomándose por un lado de He Xuan.

El Rey Demonio estaba tan impresionado con la exorbitante cantidad de aquella cuenta que no había notado la presencia del revoltosos Dios.

- Es incluso más que lo que tiene mí ge' en su cuenta, - mencionó con inocente tranquilidad. Su voz tenía tal sonoridad que cualquier persona que estuviera en aquella sala había logrado captar ese dato.

Nadie dijo nada, pero la red de telecomunicación estuvo saturada por un breve momento.
Ling Wen miró disgustada a Shi Qing Xuan lamentando no poder decir nada a su persona. Antes, tenía un Wu Du para protegerlo, ahora se había adicionado un Yi para doblemente protegerlo. Ese joven se estaba haciendo intocable.

- Oficial Ming Yi, el siguiente movimiento es algo que debemos hacer en privado. Imagino que en un futuro usted desee darle a alguien la contraseña, pero por políticas necesito que solo usted y yo sepamos la contraseña de su línea personal de telecomunicación.

He Xuan se inclinó y le dijo algo al oído a Shi Qing Xuan quién se escusó de inmediato y salió a la carrera del recinto.

Ling Wen haciéndose de la vista gorda con lo que acababa de suceder le pasó papel y tinta.

« ¿Será verdad que estos dos chicos son una pareja?»

- Por favor escriba su contraseña. Debe ser simple y fácil de recordar. Algo que no se le olvide nunca.

He Xuan deslizó el pincel sobre el papel y se lo entregó a la oficial. Ling Wen tomó el papel y tras leerlo se quedó en blanco.

En el papel se podía leer lo siguiente: Xuan.

He Xuan habían optado por su propio nombre, solo que en la capital Celestial ese nombre solo le pertenecía a una persona.

Al final de el día Ming Yi era el más rico en la capital y Ling Wen confirmó que entre Ming Yi y Shi Qing Xuan había una relación más allá de la mera amistad.

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Hola, una disculpa. Lo intenté pero no lo logré, por favor no se decepcionen.

Agradezco su amor para este proyecto. Gracias por su voto, sus hermosos comentarios y sus lecturas.

Espero que disfrutes leyendo tanto como yo disfruto escribiendo.

Con amor LiliKT.