глава 18

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Artemi Kuznetsov

Pasaba mi mano delicadamente por sus cabellos era tan suave, tan liso y tan largo, miraba sus ojos cerrados y podía apreciar aquellas pestañas largas y arqueadas.
Pase mi mano por su rostro suave contando las escasas y claras pecas que poseía desparramadas por sus pómulos.
Pase mis dedos delineando suavemente sus rojisos labios, aquellos labios gruesos que eran mi droga, como toda ella.
Pase mis dedos por su fino cuello para luego pasarlos por su espalda rozando la sueve tela de su sexy pijama negro.
Pase mis dedos por su espalda y luego por la curva de su cintura hasta llegar a su trasero... lo apreté suavemente, gemi, deliciosos...redondo y e increíblemente apetecible deseaba pasar mi lengua por el y subir por todo su cuerpo mientras la empotraba en la cama, y la hacía mía una y otra vez.
Lentamente la libere de mi posesivo abrazo y con mucho cuidado de no despertarla me levanté de cama, cajaro necesitaba una ducha helada no fría, la maldita erección dolía como el infierno.
Antes de entrar me detuve a admirarla nuevamente parecía mas pequeña de lo que era en esa inmensa cama, quién iba a decir que era tan suertudo para que esa ñina me perteneciera para siempre.
Suspire enamorado, me giré y entre a la ducha, tal como dije una buena ducha fría era lo que necesitaba y no porque me gustara bañarme así.
En una semana sería su cumpleaños número 18 y tenía un sin fin de regalos en mente para darle, joyas, viajes, vestidos, zapatos, un auto..pero sabía que nada de eso le importaba apenas si me aceptaba unos pendientes de oro blanco con un pequeño diamente, esta chica era mas de gusto simples y por eso la amaba era sencilla y humilde.
Lo que si sabía que no podía fallar era una cena a la luz de las velas..si bien no teníamos familia como para invitar sin contar a mi hermano y al suyo, deseaba por lo menos que nuestra familia empezara con nosotros y quien sabe dos o tres hijos o hijas o más, una familia inmensa, la idea me emocionaba.
Seque mi cuerpo y como hacía todas las mañanas desde que llegamos era invertigar donde carajo estaba esa rata, porque eso parecía una rata escondida o quizás había muerto si la suerte estaba de mi lado... porque todo el amor y cariño que le tenía iba muriendo lentamente dando lugar al odio, odio puro y quería cuanto antes deshacerme de él para poder tener mi vida tranquila con Galina, si bien tuvimos paz por varios meses la sola idea de que estuviera ahí afuera esperando entre las sombras hacía que mi miedo creciera porque si tenía miedo no en sí por Anzor sino en lo que era capaz de hacer para robarme a mi chica.
Una pista..una pista necesitaba para dar con él, pero como era de esperar nada...no tenía más que esperar que solo viniera acá ya que no podía atacar primero lo único que me quedaba era esperar que el diera el primer golpe porque también sabía que cuerdo Anzor no estaba, ya no poseía el uso de la razón y la necesidad por Galina segundo tras segundo, minutos tras minuto, día tras día, semanas y meses provocaban en él, el mismo efecto que tenía un adicto en abstinencia, si Galina para mi era una droga, para él era demasiado y sabía que tarde o temprano, iba a venir desesperado por aunque sea un poco de ella.
Y para ese momento iba a estar preparado, preparado para hacer lo posible para terminar con este circo.
Solo...tenía que esperar.
Veía las agujas del reloj, del reloj que estaba colgado en la oficina y de la nada unas imágenes se me vinieron de golpe..
Anzor...
Galina...
Anzor llevándose a Galina lejos mío...
Galina llorando desesperada por librarse de su agarre, gritando mi nombre...
Yo inmóvil en el suelo rodeado de sangre, viendo como todo se volvía negro y la perdia para siempre...desperté.
Mi respiración era agitada y estaba temblando, mis manos y cuerpo temblaban, toque mi rostro y las lágrimas salían por ellos.
Me había dormido en el asiento y mi cuello dolía muchísimo pero aún esas imágenes se repetían en mi mente..y aquel.. tic...tac...tic..tac...ese ruido era desesperante..tic..tac..tic...tac en un intento por no escucharlo tape mis oídos fuertemente pero podía seguir escuchando, cada vez más y más fuerte..tic..tac..TIC..TAC.. Sin poder soportarlo me levanté velozmente y desorientado de mi silla, corrí hacía la pared para arrancar ese maldito reloj de un tirón y estrellarlo fuertemente contra el piso, podía ver como en cámara lenta todos los pedasos volaban por todo el lugar, sentía que el aire me faltaba, sentía que las paredes se componían haciendo el cuarto más pequeño, comencé a sudar frío, sentía que mi cabeza iba a explotar, las imágenes de Anzor llevando a Galina lejos mío se hacían presentes... el miedo y el pánico me invadían quitandome el aire, golpee fuertemente mi cabeza con mis manos para sacar aquellos pensamientos pero seguían ahí, tiraba de mi cabello y arañaba mis brazos en un intento desesperado por volver a la realidad, porque sabía que no era real, que había sido un maldito sueño aunque no lo haya parecido.
Entonces vi como si un Ángel entrara por la puerta, vi..como una luz, esa luz se acercaba a mí, podía oir una voz angelical llamandome.
- Artemi...Artemi!!.- repetía, cuando sentí unas pequeñas manos en mi rostro es cuando pude enfocar un poco la vista y mirar al precioso Ángel que estaba frente mío..era Galina mi hermoso Ángel..sonreí como pude mientras ella pasaba desesperadamente las manos por mi rostro.
- te..te..t..te amo.- le dije como pude mientras los espasmos en mi cuerpo se calmaban antes sus toques, sentí la paz volver y me sentí en calma..solo ella podría traerme de vuelta durante un ataque de pánico hace rato no me daban y necesitaba de un sedante para poder volver a la realidad y asi dejar de lastimarme pero ella con solo su toque me saco de ese infierno.
- Artemi...por favor...necesito que respires..si??- se tranquilizó en cuanto logré hablar asenti y con mucho esfuerzo pudo llevantarme y llevarme nuestra habitación, me dejo en la cama y se sento a mi lado.- todo va a estar mejor...solo respira conmigo.- asenti mirandola y ambos respiramos juntos.- muy bien..una vez más.- tomo mi manos y las llevo a sus labios, suspire..- muy bien..ahora voy a traerte un poco de agua si??..- trató de irse pero no la deje..
- no..solo..solo te necesito conmigo..- le dije mirándola a los ojos.
-pero Artemi..voy y vue.- la interrumpi.
- por favor..- asintió y se sentó nuevamente, me corrí para que pudiera acostarse en la cama cosa que hiso, apoye mi rostro en pecho y me dediqué a escuchar como su corazón latía y lentamente me dormí junto a sus caricias..

💀Los mellizos Kuznetsov💀⚫Donde viven las historias. Descúbrelo ahora