Pov's Emma
Mi cabeza duele.
Respiro hondo antes de tratar de abrir mis ojos, se sienten pesados, después de unos instantes logro abrirlos y pestañeo un par de veces para acostumbrarme a la luz del sol que se cuela por la ventana de mi habit... Espera un momento ¡Esta no es mi habitación! ¡Jodidamente no lo es! Me siento de golpe y me mareo. Volteo hacia todos lados tratando de identificar la habitación en la que estoy, y que al parecer es de hombre, entre todas esas cosas logro ver mi teléfono en una mesita de noche en la que también esta un portarretratos con una foto de... ¿Dylan? ¿Estoy en la habitación de Dylan?
¡Oh, mierda! ¡Estoy en la habitación de Dylan! Veo la hora y son las 09:21am, y en ese momento cuando bajo la vista me doy cuenta que no llevo puesto mi vestido, sino una playera, al menos todavía conservo mi ropa interior, esperen... Sí, todavía la conservo.
Me duele la garganta, siento la boca seca y tengo unas incontrolables ganas de ir al baño. Escucho una puerta abrirse y veo a Dylan entrar.
–Oh, ya despertaste,— Dice viéndome, literal estoy que me lanzo sobre él, y no para besarlo necesariamente. — Te traje esto, pero primero supongo que quieres ir al baño.
Me lanza un short junto a una camisa qué sé que son de Daisy, y en sus manos lleva una bandeja con un jugo y una taza de cereal. Tomo la ropa y corro hasta el baño de su habitación y le paso seguro, me veo en el espejo y ¡Dios santo! Fácilmente podrían confundirme con la llorona o algún otro espanto, tengo todo el maquillaje corrido, los ojos y los labios hinchados, mi cabello parece un nido de pájaros y me siento sudorosa hasta la madre.
Me meto a la ducha y siento el agua caer sobre mi, me aseo y me pongo la ropa de Daisy. Me miro en el espejo y ahora por lo menos si estoy presentable así que salgo del cuarto, no veo a Dylan por ningún lado, me doy cuenta que junto a a la cama a un par de sandalias y me las pongo. Me como el cereal y el jugo que se encuentran el la mesita de noche, y de nuevo veo a Dylan entrando.
Me aclaro la garganta y por fin me dispongo a hablar.
–¿Que demonios paso anoche?
–Oh sí, Dylan, gracias por la comida y la ropa eres tan amable — hace un tonto intento de imitar mi voz a lo que yo resoplo – Buenos días para ti también, Emma.
–¿Podrías responder a mi pregunta, por favor? — Le pregunto de nuevo, el voltea los ojos y se sienta a en la orilla de la cama.
–Te quedaste dormida en mi auto, iba a llevarte a la habitación de Daisy pero estaba trancada y no quería despertar a Diana, luego te fuiste corriendo al baño, empezaste a vomitar y decir incoherencias, te llenaste el vestido y lo zapatos así que te tuve que cambiar. Luego caíste como una piedra en mi cama. —Explica, y solo puedo pensar en una cosa...
–¡¿Me viste semi desnuda?! — chillo horrorizada y con los ojos abiertos de par en par.
–Eh, yo... Pues... Ehh, ¿si? —Se rasca la nuca nervioso, salto sobre él y empiezo a darle manotazos en los brazos y estomago.
–¡Jodido imbécil, me viste en ropa interior! ¡Eres un idiota pervertido! ¡No te soporto! — le reclamo.
–¿¡Que querías que hiciera, eh!? ¿Dejarte ahí tirada con la ropa llena de vomito? Deja de pegarme, Emma, basta — Hago caso omiso y sigo dándole manotazos con rabia. — ¡Emma, ya basta! — sostiene mis muñecas y me hace girar hasta que mi espalda esta contra el colchón, escucho su respiración agitada, no puedo pegarla pero puedo seguir insultándolo y eso es lo que hago.
–¡Eres un imbécil! ¡Idiota! ¡Estúpido! ¡Te odi...! — sus labios se estrellan contra los mios callándome, me resisto un poco pero al final termino respondiendo al beso.
–Solo callate, ¿si? —Gruñe contra mis labios.
Succiona y muerde mi labio inferior logrando que suspire, mete su lengua en mi boca haciendo que toda mi coherencia se vaya al carajo, suelta mis muñecas lentamente, pongo mis manos en su cuello y el pone las suyas en mi cintura. Este no es un beso de amor y me encargo de hacérselo saber.
–Te odio — Susurro contra sus labios.
–Que bien entonces, porque el sentimiento es mutuo. — teniendo eso en claro, vuelve a besarme, me besa hasta dejarme sin aire, de una forma inexplicable. Porque así es lo nuestro: Inexplicable. Todo un desastre de hormonas y odio, pero al final siempre terminamos igual, besándonos como unos locos.
Cuando ya creo que a sido suficiente me separó de él, los dos tenemos la respiración entre cortada, sus ojos están dilatados, sus mejillas sonrojada y sus labios inflamado y bastante rosados por el beso. Y creo que yo estoy igual, mis labios duelen, y siento la cara caliente.
–Yo... Creo que ya me voy, nos vemos. — Me levanto y salgo de su cuarto, encontrándome con Daisy en el pasillo, la cual me ve sorprendida. — Después te explico — es todo lo que le digo antes de salir de su casa mas rápido que el Rayo McQueen.
Pienso en Dylan y lo primero que me viene a la mente es: Lo odio...
❤
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G-lou, estos dos están locos...
En fin, cuentenme que les pareció el capítulo. Espero que lo hayan disfrutado.
Voten★
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Besos y abrazos
♠Av's♠
Pd: Yaki Yaki, si ves esto quiero que sepas que te amodoro y el capitulo va dedicado a ti🍃✌
