Esta vez, Law fue el primero en despertarse. (TN) dormía tranquilamente a su lado, acurrucada como si fuera una bolita. El pelinegro estaba tumbado de lado, observándola fijamente mientras respiraba de forma pausada y profunda. Tenía ganas de acariciarle, pero no quería despertarla. Suspiró. Había sido la mejor noche de su vida. No se arrepentía para nada de haber esperado tanto tiempo para hacer esto. Podría haberse acostado con cualquiera de las chicas que pedían hablar con él, pero estaba seguro de que esto era mil veces mejor. ¿Qué hubiera tenido de interesante tener sexo con una desconocida? ¿Y lo que había disfrutado observando todas y cada una de la expresiones de (TN)? ¿Al escuchar como ella gemía su nombre? Estaba completamente seguro de que no hubiera sido para nada lo mismo.
Se movió para tumbarse bocarriba. No quería salir de aquella tienda de campaña. Sabía que a la hora de desayunar tendría que aguantar los estúpidos comentarios de sus compañeros. Escuchó como la chica empezaba a moverse a su lado. Giró ligeramente la cabeza para mirarla. Estaba ronroneando y frotándose los ojos. Cuando sus miradas se encontraron, Law vio que las mejillas de la chica se sonrojaron y enseguida hundió la cara en el colchón.
—¿Qué se supone que haces? —preguntó el pelinegro, extrañado.
—Ayer me viste desnuda e hicimos marranadas...—le pareció escuchar a Law.
—No pareció molestarte mientras lo hacíamos —comentó él, frunciendo el ceño.
—¿Eh? No me molesta —le corrigió ella, mientras giraba la cara para mirarle—. Solo me da un poco de vergüenza.
—Está bien, pero no tienes que tener vergüenza. No hicimos nada malo, solo pasarlo bien —dijo Law. (TN) se incorporó hasta sentarse.
—Estuviste dentro de mí...—murmuró, mirándole fijamente. Law puso una mano en su cabeza y le empujó con cuidado hacia abajo para que qué dejara de mirarle. Primero, porque no quería que le viera sonrojado. Segundo, ¿qué hacía poniendo esa cara mientras decía esas palabras? ¿Acaso le estaba provocando? (TN) dio un gritó de repente.
—¿Qué pasa? —preguntó el ojigris.
—¡Hay sangre en las sábanas! —exclamó, alarmada.
—Ah, sí. Las chicas suelen sangrar la primera vez —explicó él, tranquilamente. Ella le dirigió una mirada de reproche por no habérselo contado antes. Law chasqueó la lengua.
—¿Las pondrás en la lavadora de la caravana de Cora-san y Doffy? —preguntó ella.
—¡Ni hablar! —contestó, nervioso. ¿Y si se los encontraba dentro mientras las ponía a lavar? No quería hablar sobre ese tema con nadie—. Me desharé de ellas. ¿De qué te ríes?
—Es que me hace gracia cuando te pones nervioso —contestó ella entre risas. Law gruñó apartando la mirada. No le gustaba que se rieran de él. Pocos segundos después, notó un beso en la mejilla—. No te enfades. Venga, vamos a recoger las cosas. Aún queda un rato antes de desayunar.
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Donquixote Circus «Law x Lectora»
Fanfiction(TN) es una adolescente que se busca la vida en la calle. No recuerda nada de su pasado y, debido a una extraña habilidad que posee, ha sido repudiada por todos los que ha conocido. Un día recibe una propuesta, unirse al Donquixote Circus, donde en...