【Ｗｉｃｋｅｄ Ｇａｍｅ】 ᴰᵉᵏᵘᵏᵃᵗˢᵘ ᵀᵒᵈᵒᴵⁿᵃ

Conflicto

— Vamos Katsuki, sé que puedes hacerlo mejor, abre más la boca — con fuerza, el alfa apretó la cansada mandíbula del rubio introduciendo con lentitud su miembro — No me vengas con quejas cuando hace algunas semanas me chupabas la polla con tanto esmero por unas cuantas monedas.

Gruesas y pesadas lágrimas seguían mojando aquel pálido rostro, no quería, simplemente lo odiaba.

Fue el momento en que se dio cuenta en que tan absurda era su vida, se dedicaba a entregarse por unas cuantas monedas.

Se sentía enfermo y sucio, ese no era el ejemplo que quería darle a su pequeño hermano, tampoco quería decepcionar a su madre trabajando de manera tan baja.

— Levanta la mirada — el rubio obedeció y miró con detenimiento la sádica sonrisa del pelirrojo — Y creías que a alguien del estatus de Izuku iba a importarle un omega como tú? No te equivoques Bakugou, Izuku va a contraer matrimonio con Uraraka y mi hijo terminará votando a tu hermano tal y como yo lo hice con su madre, ustedes no son más que escoria que solo sirve para entregar su trasero y rogar por monedas.

Las palabras del hombre en cierto modo no lograban dañarle, por un lado confiaba plenamente en Shouto, sabía que el va en serio con su hermano. Sin embargo, en algo tenía razón, Izuku nunca iba a fijar su mirada en él.

Un omega ejemplar debe saber de música y poesía, canto y pintura, arte y cocina; totalmente lo contrario a él. Los omegas de alta calidad son delicados, con rostros angelicales y cuerpos delirantes.

Cómo podría él tomar el lugar de un omega fino? No encontraba una lógica respuesta a su incógnita.

Los pesados pensamientos lo hacían perderse en el espacio, dejarse hacer como un muñeco de trapo.

— Vamos, sube — palmeo su regazo en cuanto se acomo sobre la cama — Ven rápido, antes de que se me acabe la paciencia.

Todo sucedió tan rápido, pequeñas hileras de sangre corrían desde su boca y se perdían en su niveo pecho, mordía sus labios con el objeto de no gritar de dolor.

Estaba doliendo y mucho, para nada se sentia bien que aquel hombre lo haya penetrado con tanta fuerza y brusquedad.

— Apesar de ser una zorra estás tan apretado — jadeaba en su oreja causándole una sensación de escalofríos — Si no fueras un omega recesivo ahora mismo te estaría follando tan duro para que tuvieras a mis hijos.

Los gritos no se hicieron esperar cuando mordió sin descaro uno de los pezones del omega, tan fuerte que aquel pálido rosa se convirtió en un morado rojizo.

Izuku Midoriya

Me quedé al menos diez minutos fuera de aquella habitación escuchando los fuertes alaridos de Katsuki. Ochako había huido enojada en busca de ayuda para Katsuki.

Y yo simplemente me quedé plasmado en el mismo lugar, sus gritos taladraban mis oídos y su aroma erizaba mi piel.

Quería hacerlo, quería entrar a esa habitación y golpear con tantas fuerzas que Enji Todoroki sabría lo que es desear la muerte en un momento.

Quería tomar a Katsuki entre mis brazos y decirle que todo iba a salir bien y darle un beso en la frente pala calmarlo.

Sin embargo, mi tontedad me hacía pegar los pies en el piso.

No sólo perjudicaría mi imagen al proteger a un omega como Katsuki, si no lo perjudicaría a él, Enji Todoroki es un hombre peligroso que simplemente odia perder.