[AU]Para una mujer de ciencia como Lena Luthor el hilo rojo es un mito. Pero.... ¿puede un encuentro cercano del tercer tipo cambiar su parecer?/[El crédito de la imagen no es mío]/[Los personajes de Supergirl le pertenecen a DC Comics y The CW]/[La...
1. Aviso: Algunos capítulos tendrán diálogos entre comillas y cursiva puesto que son escenas del pasado (flashback) o llamadas telefónicas. Y en este capitulo se suma además frases con el mismo formato mencionado para dar cuenta de la particular forma en la que Kara se comunica con Lena.
2. La narración se dará como si una cámara siguiese a los personajes, tomando en gran parte de los capitulo el plano de Lena Luthor siendo más adelante turnado con otros personajes.
3. Los días detallados en la bitácora no necesariamente son consecutivos, pueden incluir semanas ya que son recopiladas como un todo.
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Kara se iba acostumbrando a la vida en el búnker. Era cálido, tenía un aire a cabaña pero ricamente amueblado y equipado con la última tecnología.
Aunque lo que más le gustaba era poder dormir con Lena. Sabía que debía dar pasos pequeños con ella, pero había encontrado la manera de acercarse y una era cuidando su sueño en las noches.
La morena apreciaba poder dormir de corrido sin sueños ni sobresaltos.
También la había convencido para desayunar sólo ellas dos a la mañana, y se quedó con la taza que tenía la letra de su nombre. Esas ocasiones las aprovechaba para acomodarse el top o la remera mostrando su bien trabajado cuerpo.
A la rubia no se le pasaba por alto que Lena no le quitaba la mirada de encima y que si se sentía atraída.
Así que alimentaba aquella ventaja cada vez que podía. Como invitarla a entrenar con ella y con Sam.
Es que al sentirse aburrida y comentárselo a la joven Luthor, ésta había abierto un gimnasio que estaba abandonado en una habitación bastante alejada del resto.
Desempolvando pesas y máquinas varias le dio la clave de acceso a Kara, permitiéndole entrar unas cuantas horas en la tarde.
Empezó haciéndolo sola pero no le gustaba mucho la sensación que eso le dejaba. Así que sabiendo de la mutación genética de su futura cuñada, la incentivó a entrenar en pos de proteger a Alex.
La latina aceptó inmediatamente y ahora veía los primeros resultados en sus brazos y muslos.
Satisfecha con lo logrado la Joven Danvers extendió su invitación a Lena y a Alex.
Su hermana se unió de inmediato pero eligió a Arias como su preparadora física.
Mientras que la joven Luthor pareció renuente hasta el día que Kara se iba poniendo una remera entallada mientras tomaba su café. Su abdomen se veía en todo su esplendor y Lena pasaba a la cocina por su capuchino.
Tuvo que llevar sus dos manos a los bolsillos para controlar todas las sensaciones que ese espectáculo visual le provocaban. Mas la sonrisa pícara se pintó en sus labios y terminó cediendo al ofrecimiento de entrenar junto a la rubia.
