Vamos a ver qué pasó subió o no, será como todos los hombres...Al lado la canción amiga mia del grupo chileno "Los prisioneros"
Antes de que ella pudiera decir algo Alejandro abrió la puerta de su auto y la invitó a bajar -vamos te dejo en tu departamento, es muy tarde para que andes sola aunque sea en tu edificio- y la tomó de la mano.
Erika se sentía muy bien junto a él, aunque un poco defraudada también, ya que pensaba que él no era como todos, finalmente resultó ser igual, aunque en esos momentos poco le importaba quería que este momento no acabase, no recordaba haberlo pasado tan bien hace mucho tiempo.
Llegaron al departamento de ella, cuando se disponía a abrir la puerta Alejandro la tomó de la cintura y la giró para quedar frente a ella, ese mínimo contacto hizo que Erika se pusiera tensa y aguantara la respiración. Alejandro, lo notó, era muy perceptivo, así que la soltó y le dijo – gracias, lo pasé muy bien contigo, hace tiempo que no disfrutaba tanto bailando, es que a Claudia no le gusta mucho, explico arrepentido de haberlo dicho.
-Yo también lo pasé muy bien, quien lo iba a pensar, que después de haber terminado mi relación empezaríamos a ser amigos. Alejandro acarició su mejilla y luego tomó la cara de Erika entre sus manos.
-Linda, claro que somos amigos, cuenta conmigo para lo que quieras. Eres una gran persona, así que no tienes por qué estar triste. Erika se asombró, no pensó que se notara tanto su pena- haber regálame una sonrisa-. Erika no lo pensó dos veces y obsequió una de sus más deslumbrantes sonrisas. Alejandro la miraba embobado, qué hermosa era y qué tentación, el estúpido de Esteban se perdió una gran mujer.
Los dos se miraban fijamente, sumidos en sus pensamientos, pero él rompió el hechizo primero, besó la frente de Erika y se despidió excusándose por la hora, recordándole su cita para cenar en la semana.
Ella permaneció unos segundos más con los ojos cerrados, apoyada en la puerta sin abrir, sentía que todo había sido un sueño, era tan irreal que no lo entendía, tenía sentimientos encontrados, por un lado le hubiese gustado que entrara o la besara y por otro estaba feliz al comprobar que él no era como todos, pero tampoco era suyo. Entró a su departamento y fue directamente a su dormitorio. Encendió la radio para escuchar su música para dormir, ya que fueron tantas las emociones de esa noche que estaba segura que le constaría mucho conciliar el sueño. Pensaba en Alejandro y en Esteban, tan diferentes eran el uno del otro, como agua y aceite, sin embargo los dos le atraían y los dos estaban comprometidos, aunque a uno le daba lo mismo ser infiel y el otro moriría antes de pensar en otra mujer. ¡Qué extraños son los hombres!, pero quien dijo que eran fáciles de entender, ella pensaba que sólo querían sexo y ahora resulta que también se pueden tener como amigos y nada más…
…Ojalá no tuviera tanta mala suerte… ¿por qué me tienen que atraer los hombres prohibidos? Por qué Alejandro es tan bueno (en todo el sentido de la palabra). Mejor no pensar en nada más y dejar que las cosas sigan su curso, si él me quiere como amiga, amiga seré, entre eso y nada, prefiero eso.
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Pasó la semana y todo iba mejor que nunca en su vida, sentía que al no saber nada de su ex se sacó un peso de encima. El trabajo estaba excelente, hablaba constantemente con sus amigas, incluso había llamado a su madre de la cual se había distanciado en el último tiempo, ya que siempre reprochaba su vida un poco libertina y con muchos excesos.
El día viernes en la mañana recibió una llamada que la alegró mucho, Alejandro le recordaba que hoy la esperaba en su departamento, le entregó la dirección y esperaba que fuera puntual ya que la cena la prepararían entre los tres, besos y colgó. Entre los tres, ojalá sólo hubiésemos estado los dos, pensó, pero qué más daba era eso o nada y ella ya había tomado su decisión.
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Mi mejor amigo...
RomanceCuál es el límite entre la amistad y el amor, pueden un hombre y una mujer ser sólo amigos. Erika siempre pensó que esa amistad no existe, pero la vida le demostrará otra cosa...¿o no?