twenty-one

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Una mochila color rosa metálico fue alzada del suelo para ser colocada en la espalda, por fin había terminado el colegio, pero Jeon aún no quería llegar a casa, sentía que era muy temprano

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Una mochila color rosa metálico fue alzada del suelo para ser colocada en la espalda, por fin había terminado el colegio, pero Jeon aún no quería llegar a casa, sentía que era muy temprano.

Hoy era apenas miércoles y su hermano se había quedado en la casa de uno de sus compañeros para terminar el proyecto, dormiría allá supuestamente.

—¿Nos vamos?

Habló su amiga la más bajita, ellas dos vivían bastante cerca así que solían irse juntas después de clases. Iban a pasos lentos, muy lentos, a decir verdad, una por cansancio y otra porque simplemente no le apetecía correr.

—¿Jeon Suni?

Ambas se detuvieron al escuchar esa voz, no sabía de quién era exactamente pero no era de nadie bueno con ese tono molesto en su voz.

Su amiga se mantuvo en su posición y Jeon giró sobre sus talones en un acto repentino.

—Te he dicho que no quiero problemas contigo.

Repitió Jeon al notar que aquella chica era del último grado, era problemática y lo menos que quería ahora era meterse en problemas.

—Lo sé, pero no te quiero a ti.

—¿Entonces? No molestes. —se giró de nuevo volviendo a retomar el rumbo.

Sus pisadas se escucharon en todo el pasillo que estaba silencioso, no fue porque estuviera vacío, era porque todos los alumnos se habían callado repentinamente al ver una próxima pelea.

—Quiero a Park JiMin, ¿Te suena?

Jeon se detuvo al escuchar el nombre de su amigo en boca de la chica problemática, no sabía cómo había llegado su nombre a sus manos, pero sabía que no era bueno.

Su amiga se detuvo después que ella buscándola con la mirada, ella también conocía ese nombre.

—Es tan jodidamente guapo, ¿Te molestaría si me lo cojo? Es tan caliente y...

El rostro de Jeon se desfiguró al escuchar eso, solo era más grande que ella por dos años, pero no le daba derecho a expresarse de esa manera con aquel chico.

No quería seguir escuchando esas palabras fuera de lugar, así fue como en un reflejo Jeon termino estrellando su puño en la mejilla de aquel chica.

—No hables así de él.

Concluyó con la intensión de salir corriendo, pero no salió como esperaba, le tomó de la mochila y la jaló hacia atrás logrando tirarla al suelo.

—¡Nadie me golpea! ¡Maldita sea!

—Entonces no pienses meterte con él. —ni aún en el suelo dejo de defender el nombre del rubio recibiendo un golpe de parte de ella.

—¿Ese hombre? No sé porque se fija en ti, sería bueno en la cama, con ese cuerpo y esa cara.

Cansada tomó su muñeca y jaló de esta hasta lograr tirarla al suelo a su lado.

—¡¡Deja de hablar de esa manera de JiMin!!

Su cara se tornó roja debido a la furia que tenía, sintió sus mejillas húmedas por las pequeñas lágrimas que resbalaban que no sabía de dónde provenían, tal vez eran las emociones acumuladas haciendo un mal juego.

—¡Te dije que no me tocarás, maldita llorona! —sin previo aviso tomó en un puño el largo cabello de Jeon bastante molesta.

Por primera vez, Jeon estaba en una pelea real, con golpes y pequeñas gotitas de sudor.

Sin saber de dónde sacó el coraje de golpearle, ambas se encontraban en el piso rodando.

Pero era inútil, por mucho que quisiera defenderse jamás lo había hecho antes, quedó en el suelo y la mayor en un descuido de Jeon terminó de pie.

Jamás creyó estar algún día tirada en el suelo después de haber peleado con otra persona.

Ella alzó su mano antes de darle una bofetada como Jeon lo había hecho minutos atrás.

No cerró sus ojos por alguna razón a pesar del dolor, ardió aún más gracias a sus anillos de plata a juego con sus aretes.

—Espero aprendas, llorona.

Jeon se levantó con dificultad bastante adolorida antes de dirigirse a la mayor.

—No me arrepiento de nada.

Con las poca fuerza que tenía tomó su mochila para salir corriendo junto a todos los estudiantes, el director estaba por llegar.

Olvidó por completo a su amiga, olvidó todo en realidad, solo ansiaba llegar a casa y llorar aún más.

Se sentía mal por no poder haberse defendido como hubiera querido, pero la falta de inexperiencia en ese ámbito le volvía frágil.

Y también el no poder limpiar de alguna manera el nombre del rubio quien solo le había dado mucho cariño, como amigo y pareja.

Y también el no poder limpiar de alguna manera el nombre del rubio quien solo le había dado mucho cariño, como amigo y pareja

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Corregido finalmente.

A Boy Stranger «PJM; BTS»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora