Estoy en mi cuarto con Mel preparándonos para la fiesta.
-¿Encontraste la invitación en la taquilla?
-Espera... ¿Tengo taquilla?
Como veréis soy inteligente no, lo siguiente. No se me da muy bien escuchar las cosas que tengan que ver con el insti. También soy de las que se enteran de todo gracias a los cotilleos.
-Si... ¿Cómo te enteraste si no?
Me da que va a tener una de esas reacciones que tienen las niñas pequeñas cuando las regalas un juguete que desean mucho (y que a los 2 segundos se la sopla).
-Me ha invitado Aaron- digo intentando sonar despreocupada. La veradad es que parece que me estoy dejando engatusar por él, pero no es así. Llamarme mala persona pero me estoy aprovechando. ¿Nunca habéis oido el dicho "si la vida te da limones, haz limonada"? Pues es lo que estoy haciendo, aprobechar las pocas oportunidades que me da esta vida de mierda. Si alguien, quienquiera (menos un pederasta, asesino...) me ofrece transporte para una fiesta, obvio que digo que sí.
-¿¿¿Cómooooo??? -luego da un gritito agudísimo y da saltitos como una tonta.
¿Qué os dije?
-Heyy, relajate. No es para tanto...
-¿Qué no es para tanto? ¿Qué no es para tanto? Es Aaron. Si que es para tanto, incluso para más- dice sentándose en mi cama y agarrando uno de mis cojines.
-Solo me va a hacer de chofer.
-No creo que te valla a dejar sola.
-Pues si no me deja sola yo le dejaré sin otras cosas.
-Alaaaa- dice riendo-. Te tienes que poner guapa...
-No me voy a poner guapa para ese.
-No lo digo por él, lo digo porque va a ser tu primera fiesta aquí y tienes que destacar -dice haciendo como si un foco de escenario la apuntara.
La veradad es que no se que ponerme. Se que voy a llevar el biquini debajo y que hará calor así que llevaré un pantalón corto y una camiseta corta y como no mis comodísimas Vans. Pero que camiseta o que pantalón, ni idea.
-¿Tienes vestidos?
Ha dicho la palabra prohibida. Yo odio los vestidos excepto el que me ha regalado Cas. Los odio porque están hechos para "Barbies" y porque las chicas que los llevan a esas fiestas suelen ser las facilonas y algunas un poco putas. A parte de que los chicos son tontos y te lo levantan para verte las bragas, guarros. Pero eso sí, me quedan de puta madre.
-Preferiría ponerme otra cosa la verdad.
-Vale... ¿Qué tal esto? Adoro este modelito. Ya me lo dejarás- dice guiñandome un ojo-. Con pintalabios rojo estarías perfecta.
La verdad no está mal el que ha elegido. Consta de un pantalón vaquero corto clarito y una camiseta que me llega hasta el ombligo gris con un rectángulo gigante rosa en el centro con unas palmeras en el que pone summer days y es de esas que tienen unos aguleros enormes para las axilas, que dejan al descubierto mi biquini.
Yo adoro parte del estilo hipster, me encantan las camisetas hasta el ombligo, las gafas de pasta y los pantalones altos hasta, también, el ombilogo. No me digáis que a vosotros no.
-Si este mola.
-Guay. Yo me pondré esto.
De su armario saca una camiseta ajustada roja carmín de tirantes hasta el ombligo, como la mía; una falda del mismo color recta, de las que se suben hasta el ombigo y corta y unos tacones negros. En mi opinión un poco puta, pero he de admitir que la queda muy bien y la pega con su tono de piel.
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PlayBoy, ¡deja de acosarme!
RandomYo: Cabezota, malhumorada, infantil, divertida, de pocas relaciones, guapa,me gustan todo tipo de deportes, diferente... y la nueva en un horrible y especial internado. Me reencontraré con mi descerebrado y sobrepotector hermano. Haré nuevos y locos...