-Me gustas mucho Steve... Y me vuelve loca verte junto a otras chicas... -Expresó Nat sus sentimientos, observando que el Cap se había quedado congelado frente a ella, lo cuál simplemente la hizo avergonzarse y arrepentirse de inmediato.
-Natasha jamás diría algo así... -Se rió él con una sonrisa encantadora, haciendo que ella arrugara la frente, totalmente descolocada.
El rubio bajó su mirada sobre si mismo, observando que se encontraba semi desnudo en una habitación que no era la suya, con una sexy pelirroja que se encontraba sentada a horcajadas sobre su regazo... Rogers comenzó a recorrer su cuerpo menudo a detalle hasta llegar a sus orbes esmeraldas que comenzaban a verlo con confusión y un toque de preocupación.
Nat estuvo a punto de hablar temiendo que el golpe ennsu cabeza de verdad le hubiese afectado cuando sintió las manos de él apretar sus mejillas como si fuese una niñita pequeña...
-¿Qué haces? -Le preguntó desconcertada por su actitud, sintiendo los dedos de Rogers estirar sus mejillas con suavidad, jugando con ellas.
-¿Eres real? ¿Esto es real? -Le preguntó el Cap soltando sus mejillas y bajando hasta su cabello para ahora jugar con los risos de sus puntas.
-¿Te sientes bien, Steve?... -Le dijo ella tocando su frente pero el Cap apartó su mano para jugar con sus dedos y observarlos a detalle como si fuese la cosa más extraña que hubiese visto. Al parecer el golpe lo tenía aún confundido...
-Steve... Me asustas... Y si... Creo que esto es muy real... -Le dijo Nat con tono inseguro, pero el rubio estaba concentrado, estudiándola con sus lindos orbes azules que la hipnotizaban.
El soldado soltó sus manos pequeñas para llevar las de él al cuello de Nat y acariciar su piel con sus pulgares para luego deslizarlas lentamente sobre la delgada tela de su playera hasta posarlas sobre sus senos y levantarlos un poquito...
-¿Steve, que haces? -Pronunció en un susurro ahogado y erótico cuando sintió las manos del tonto americano descender y apretar sus senos sin ninguna vergüenza... Provocando que diera un respingo sobre su lugar, acompañado de un jadeo de sopresa...
-Mentira, esto no es real... -Le dijo el Cap quitando rápido sus manos de los senos de la chica frente a él...
Nat no podía creer que Rogers creyera que nada de eso estaba pasando y que además le hubiese apretado los pechos para asegurarse... ¿Quién demonios hacía eso?
-¿De qué hablas? -Rió ahora la pelirroja con nerviosismo, sintiendo como sus mejillas comenzaban arder acalorada... Si Steve seguía bromeando ahora si le daría un tiro en el trasero...
-Si fueses real... Bueno, si fueses la verdadera Natasha ya me habrías dado una paliza... Debo estar soñando, quizá por el golpe aún no despierto... Si, eso debe ser... -Se dijo Rogers así mismo, frunciendo el ceño y desviando la mirada para ver todo lo que lo rodeaba dentro de la habitación de la rusa.
En ese justo momento Nat vió una oportunidad y la tomó... No por nada era la mejor espía en todo Shield capacitada en control mental... Aunque quiza era a ella a quien le estaban tomando el pelo, nuevamente.
-Tal vez tengas razón y sólo sea un producto de tu imaginación... -Le dijo la espía con inocencia... Subiendo su mano para acariciar su cabello rubio con cariño para así llamar su atención.
-Mis sueños contigo nunca duran toda la noche... -Le dijo él encongiendose de hombros...
Nat no pudo evitar reír al escuchar las palabras del soldado.. Aquéllo significaba que el americano soñaba con ella...
-¿Y dime que has soñado? -Le preguntó curiosa.
-Pues ya sabes... -Le dijo él, subiendo sus manos para acariciar sus suaves mejillas aún sonrojadas.