Atlanta, Georgia
04:12PMEsperó a que Lissa terminara de meter algunas cosas en su casillero para después irse a su casa, con el celular en la mano volvió a mirar si tenía algún mensaje nuevo, lo había; pero no de la persona esperada. Soltó un suspiro después de guardarlo en el bolsillo trasero del pantalón y se cruzó de brazos mientras se recargaba en los casilleros vecinos.
—¿Nada?— le preguntó la chica y cerró la puerta, ambas se pusieron en marcha a la salida. Sin mirar a su amiga, negó con la cabeza. —Tranquila, de seguro no es nada tuyo, tú no le hiciste nada. Además Noah te dijo que no hablaba con nadie.— prosiguió intentando darle ánimos pero fue en vano.
—Desde el domingo no me ha mandado nada.— respondió y sintió como el sol le impactó en el rostro, quiso cubrirse con la mano y entonces miró de nuevo a su compañera. —Ya no quiero hablar de eso. Sí él quiere hablar entonces lo va a hacer, ya no está por mi parte.— se encogió de hombros y Lissa solamente asintió.
—Nos vemos mañana. Todo se va a arreglar.— le tocó el brazo y seguido le dejó un beso en la mejilla, la castaña le intentó sonreír y luego de despedirse ambas se fueron con caminos diferentes.
El celular vibró e inmediatamente lo sacó de su antiguo lugar con algo de esperanza en su mirada, miró como la pantalla se iba apagando; se había quedado sin batería. Comenzó a maldecir repetidamente y ahora decidió guardarlo en la mochila. Soltó un suspiro pesado dejando escuchar todo su enojo en él. Se pasó una mano por el cabello y esta vez sintió un vacío en el estómago mientras que en su garganta se comenzaba a hacer un nudo.
Algo la detuvo, sintió el impacto de una mano contra su muñeca derecha mientras la estiraba y giraba al mismo tiempo, dudó entre soltar un golpe o no, lamentablemente su cuerpo no reaccionó al instante. Alzó la mirada y se tranquilizó cuando vio al sujeto, éste intentó sonreírle pero ella como respuesta se soltó de su agarre, apretó los labios y se pasó ambas manos por la cara.
—¿Por qué?— formuló tratando de mantener la calma y luego se puso un mechón detrás de la oreja. —Dos días Finn. Dos jodidos putos días. Y ahora, sólo decides venir de la nada y sonreír como si nada hubiera pasado, por favor.— continuó y el mencionado dio un paso más hacia ella. —Te odio, te odio mucho.— cerró los ojos y bajó la cabeza.
—No me odias. No digas eso.— le respondió y ella sintió como uno de los latidos se hacía más presente que los demás, su voz sonaba tan bien. —Lo siento mucho, pero puedo explicarte.— continuó, la castaña le miró la playera para luego tomarlo de ahí y empujarlo pero sin soltarlo. Se miraron a los ojos y segundos después ella lo atrajo hacia sí.
—Si vuelves a hacer esto, juro que...— comenzó a hablarle en el oído mientras lo abrazaba y antes de que pudiera continuar con su amenaza, Finn la separó de él poniéndole ambas manos en el rostro y mirándola fijamente.
—No va a volver a pasar Han.— contestó y la castaña le puso las manos en los brazos, se pasó la lengua levemente por los labios y seguido asintió. Él bajó una de las manos para entrelazarla con la de ella y con la otra aún en su mejilla; le ayudó a impulsarse para dejar un beso en la frente de la chica.
—¿Quieres ir a casa?— le preguntó mientras sumergía su rostro en el cuello del rizado y lo abrazaba rodeandole la cintura con los brazos. —No hay nadie, Ian y mamá se fueron a hacer las comprar y eso.— volvieron a separarse para esta vez comenzar a caminar.
—¿Y qué vamos o quieres hacer?— cuestionó sin mirarla y al sentir que ella sí lo hacía comenzó a tratar de no reírse. —Ellos podrían llegar en cualquier momento Hannia.— completó y las mejillas de la chica comenzaron a ponerse rojizas.
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➴❛❛𝐅𝐀𝐊𝐄 𝐇𝐀𝐓𝐄❜❜; 𝐅.𝐖
Teen Fiction✑fake hate | @hatingWolfhard con 55 mil seguidores en instagram siendo la cuenta más apoyada respecto al odio hacia Finn Wolfhard. @hatingWolfhard te ha enviado un mensaje. @finnwolfhardofficial ha respondido a tu odio. no se permiten copias y/o...