Te necesito Saga Necesidad #1 #wattys2023

Capítulo 43 (editado)

Katherine

- Tenemos que hablar.

Siempre me ha parecido una de las peores frases del mundo y siempre, ya sea al decirla o al escucharla, significaba problemas, el fin de algo. Algo que yo no quería que nos sucediera a nosotros jamás. Sin embargo, parece que acaba de llegar ese momento.

Noto cómo su espalda se tensa un poco más al escuchar mi voz, antes de relajarse y comenzar a girar hacia mí. En cuanto lo hace puedo ver cómo sus intensos ojos recaen sobre mí con tanta fuerza, que me pone nerviosa.

Ninguno de los dos parece estar preparado para ser el primero en hablar, lo que crea un extraño silencio que jamás hemos tenido entre nosotros, ni siquiera cuando acabábamos de conocernos. Dicho silencio no era incómodo, pero sí implacable y resultaba desgarrador ver adónde estaba llegando nuestra relación. Pasan pocos minutos más y el silencio inunda el enorme salón, apenas amueblado, por lo visto lleva poco tiempo aquí.

Me permito dar una pequeña mirada a mi alrededor y compruebo que el piso no está mal. Tiene una amplitud más que decente y la iluminación es buena, pero el lugar se siente frío, muy lejos de la calidez que siento siempre proveniente de Jay.

Algo en su gesto se suaviza en el instante en que me ve, sin embargo, soy consciente de que ese cambio no significa que todo entre nosotros esté bien. Al contrario, ese pequeño gesto tan solo empeora toda esta maldita situación y me deja con más dudas si cabe.

- Dime que todo esto no es verdad, que lo que cuenta la prensa no es cierto. Dime que no has sido capaz de abandonarme mientras me encontraba entre la vida y la muerte -le lanzo una pregunta tras otra sin darle tregua alguna. Quiero que me conteste, quiero que sea honesto conmigo, como lo ha sido desde el comienzo de nuestro contrato y, si ya no me quiere, quiero que me lo diga a la cara. Aunque con ello me parta el corazón-. Dime que... - voy a continuar con la batería de preguntas que había preparado en el camino hasta su apartamento, pero en ese preciso momento algo en Jay reacciona y la molestia que destila su mirada, me detiene en seco.

- ¿Qué? ¿Qué quieres que te diga? ¡Maldita sea...! -explota contra mí y por primera vez desde hace tiempo las lágrimas comienzan a brotar de mis ojos. Jayden jamás me había gritado. Sí, hemos discutido como cualquier pareja, ambos tenemos un carácter fuerte, pero jamás me había gritado de este modo.

- ¿Que qué quiero? ¡Maldita sea!, quiero que me digas que no te vas a casar con ella... -estallo esta vez yo al ver su reacción.

Jay no reacciona ante mi última petición, al menos no como yo esperaba. No niega el asunto de la boda y tan solo se acerca a mí con una firmeza pasmosa antes de hablar.

- Debemos parar todo esto, no podemos estar juntos por más tiempo -escupe de pronto y me deja aturdida. Me está dejando. Jay me está dejando. Y las malditas lágrimas no dejan de salir sin control alguno. No puedo creérmelo. Todo esto no tenía el menor sentido, lo mirases por donde lo mirases.

- ¿Qué demonios estás diciendo? Tú me quieres -digo segura de mis palabras, a pesar del dolor que siento en mi pecho.

- Pero debemos terminar... -suelta sin pestañear, mirando a cualquier parte menos a mí. De modo que me quedo en silencio, mirando el suelo bajo nuestros pies, porque no tengo la más remota idea de qué decir. Aprovechando mi silencio, Jayden no duda en continuar con lo que sea que quiera decir-: Cuando me encontraste, tú no lo sabías, pero ya estaba destrozado. De alguna manera tú lograste soldar los pedazos. De alguna manera encontré la forma de perderme en ti. -Jay se detiene así mismo por un momento, llamando de nuevo mi atención. En cuanto lo miro, alcanzo a ver cómo se moja los labios, clara señal de que se encuentra nervioso-. Sé que suena terriblemente egoísta, pero te pido que me dejes estar cerca de ti. No me saques de tu vida. Déjame permanecer en tu mundo, porque no soy nada sin ti.