KIRISHIMA Y KIEV V

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(Día 14: mañana)

No puedo hacerlo.

¿Por qué?

Kaminari, eres mi mejor amigo y no sabes lo mucho que te aprecio, pero no puedo arriesgar mi vida haciendo eso.

Veenga, ¡si tú eres muy cercano a Kiev!

Primero, no soy para nada cercano a Kiev... bueno, un poco rectifiqué debido a la expresión de "mentiroso" de Kaminari─. Y segundo, no pienso preguntarle si puedes unirte a su banda, no me apetece morir tan joven.

¿Morir?

¿No le conoces? Estoy seguro de que amenazará con matarme.

Bueno... pero no lo hará.

Oye, ¿por qué narices quieres unirte a ellos?

Pues....

No me digas que... Espera, no me lo puedo creer.

¿El qué?

¡¿Tu romance imposible se ha cumplido?!

Wahh. ¡Kirishima baja la voz!

Eso es que tengo razón.

Me emocioné y empecé a sonar como una colegiala obsesionada con su boyband favorita.

Puede... Pero no se lo cuentes a nadie.

¿Ni siquiera a Sero?

Ni siquiera a él.

Está bien, te lo prometo.

Oye, te toca.

¿El qué?

Contarme tu historia, el otro día dijiste que me lo contarías.

La verdad es que no tengo nada que contar.

Te gusta alguien de aquí, ¿cierto?

No.

¡"Bro", te acabo de confiar mi mayor secreto!

Te estoy diciendo que no tengo nada que contarte, te lo juro.

No te creo.

Mira, anoche me lo encontré por los pasillos, y como le había causado una herida decidí llevarle al servicio para desinfectarla, punto.

¿En serio? ¿Sólo eso?

¡Sí!

Sí tú lo dices... murmuró Kaminari desilusionado.

¿Qué tal anoche? Ya sabes... con Dublín.

Bien, supongo. Nos reunimos en una de las cápsulas del tercer piso.

¿Lo habéis...?

¿Eh? ¡No! Pero casi...

Que rápido crecen... pronto veré a una gran familia feliz repleta de adorables niños con el carácter de Dublín.

Tú vas por el mismo camino, Kirishima.

No lo creo...

Después de un rato de charla, volvimos al trabajo. Cómo siempre, Kiev nos vigilaba personalmente a mí y a mi clase, no podía mirarle a la cara, no después de haber contactado a la policía.

Pasadas tres duras y largas horas, todos dejaron la sala en la que estábamos trabajando, yo iba a hacer lo mismo, pero me quedé el último, ya que comprendí la razón por la que Kiev aún seguía ahí.

Shitty hair.

Dime... respondí sin alterarme por el apodo, ya me había acostumbrado.

Buen trabajo.

¿Me halagas por hacerte el trabajo sucio?

No vayas por ahí.

Kiev, ¿por qué haces esto?

Porque... porque es necesario.

¿En serio? ¿Para quién? ¿Para ti y tus compañeros con antecedentes?

No, y no todos ellos tienen antecedentes...

No, tienes razón, son gente que se ha visto forzada a colaborar en tu maldito plan, pues que sepas que les has destrozado la vida le dije acercándome a su rostro y mirándole amenazante.

Kirishima...

Lisboa, estoy seguro de que tú le metiste en esto, y tú le has jodido completamente las posibilidades de tener una vida normal. En el caso de que escapéis con el dinero, va a tener que estar huyendo de todo el maldito mundo, lo más probable es que tenga que huir del país, de su familia... y sé que ya tenías planeado eso de antemano, lo que lo hace más ruin y repugnante.

Cogí la toalla que llevaba para el sudor, me la colgué del hombro y me fui, sin darle oportunidad a contestar.

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Mierda.

Estaba hasta las narices de que él me rechazara, sé que es lo más lógico, pero pensé que él entendería mis intenciones. Que me entendía.

Lo peor: que cada vez que se hacía el duro me encendía, me interesaba mucho más en ese bastardo...

¿Es esto posible? Yo nunca... me he enamorado antes... ¿Es así como se puto siente? Pues cuando no es recíproco... duele.

紙の家 // kami no ie // - BakushimaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora