El hombre fue rodeado por un suave brillo, sus hombros se desplomaron como si toda la energía abandonara su cuerpo. Un momento después, la luz desapareció.
Lancelot: Vuelve con el Ejercito Negro.
Soldado Negro: S... si... vol.... Volveré.
Cuando Lancelot alejo la mano de los ojos del hombre, este salió aturdido y tambaleándose de la celda. Pasó junto a mí sin pestañear. Parecía como si jamás en su vida me hubiera visto.
(Lancelot ha borrado su memoria usando magia.)
Los pasos pesados del soldado se perdieron en la distancia. Cuando dejamos de oírlos, Lancelot dejó escapar un profundo suspiro. Su rostro parecía mostrar una expresión de soledad.
(Pero eso no tiene sentido.)
(Nunca le he visto mostrar emoción alguna. Y de todos modos, ¿por qué esta triste por el soldado?)
Por mi mente pasaban todo tipo de preguntas, y entonces nuestros ojos se encontraron.
(Uh-ho! ¡Me ha visto!)
Lancelot: ¿Alicia? ¿Cómo has llegado aquí?
Hazel: Um... puedo explicarlo....
El sonido de sus pasos mientras se acercaba me distrajo.
Hazel: No era mi intención espiar, yo solo...
Retrocedí hacia la pared, pero él seguía avanzando.
Lancelot: ¿Por qué has venido?
Hazel: Porque, yo...
Una mancha roja llamo mi atención.
(¿Eso es sangre?)
La sangre goteaba de la mano que Lancelot tenía apoyada en la pared de piedra.
(¿Cuándo ha sido herido?)
................... Flashback .........................
Lancelot: Genial, ahora la alfombra se ha echado a perder. Que alguien limpie este antiestético desastre.
.....................................
La realidad me golpeo como un relámpago. No parecía posible, pero las evidencias se encontraban justo delante de mí.
Hazel: ¿Antes te has cortado tu propia mano? ¿Por qué?
Lancelot se negó a contestar.
Hazel: ¿Y porque has borrado su memoria?
Mis preguntas permanecieron flotando en la oscuridad, sin obtener ninguna respuesta.
(Casi parece que él...)
(Ha salvado la vida de ese soldado.)
La sangre continuaba cayendo al suelo, debajo de su mano.
(La sangre no va a detenerse, necesita que alguien se lo mire.)
Empecé a alargar mi brazo para coger su mano pero unas frías y duras palabras me detuvieron.
Lancelot: No te muevas.
En un instante su espada estaba desenvainada y contra mi cuello.
Hazel: ¿Qué...?
Lancelot: Muévete y cortare esa preciosa cabeza que tienes.
Hazel: ¿Rey Lancelot?
Lancelot: La magia no funciona contigo, ¿verdad?
Una pizca de diversión se reflejó en sus ojos.
Lancelot: Pero tus recuerdos desaparecerán igualmente si pierdes tu cabeza.
Hazel: Quieres que olvide lo que acabo de ver.
Lancelot permaneció en silencio una vez más.
Hazel: Porque has salvado a ese soldado enemigo.
Lancelot: Silencio.
En el aire se notaba la tensión. Mi boca se secó como el frio y afilado acero que estaba justo delante de mí garganta.
Lancelot: No hagas acusaciones ridículas. A no ser que quieras que te mate.
Hubo un cambio casi imperceptible en sus ojos. Nunca muestra ninguna emoción en sus ojos, sin embargo, me pareció ver un destello de algo en ellos.
(No puedo echarme atrás ahora.)
Hazel: Si eso es lo que quieres, hazlo.
Después de una larga y pesada pausa, Lancelot bajo su espada.
Lancelot: Vuelve a tu habitación. Antes de que cambie de idea.
Se giró para marcharse y sus ojos volvían de nuevo a ser como el hielo.
Hazel: Vale. Pero acepta esto, al menos.
Saque mi propio pañuelo y lo presione suavemente contra el dorso de su mano ensangrentada.
(No es suficiente para que funcione como vendaje, pero por ahora servirá.)
La sangre se filtró rápidamente a través del pañuelo, tiñendo la tela blanca de rojo.
Lancelot: ¿Por qué tocarías algo que te da miedo?
Hazel: ¿Qué quieres decir?
Lancelot: Tus manos están temblando.
Tenía razón. Mi mano temblaba ligeramente mientras la sostenía contra la suya.
Hazel: ¿Me culpas por estar temblando? Acabo de ver cómo le has borrado los recuerdos a alguien y una espada ha estado presionada contra mi cuello.
Lancelot: Si, ¿y?
Hazel: Necesitabas ayuda. Parece realmente doloroso.
Lancelot: Yo no...
(No es solo la herida.)
Hazel: Tu rostro... parece que sientes mucho dolor.
El alejo mi mano de un manotazo.
Lancelot: Déjame.
El pañuelo teñido de rojo, fue arrojado al suelo. Me giré y corrí escaleras arriba, dejándolo con su soledad. Una cosa se quedó grabada en mi memoria, más que su fría espada o el pañuelo teñido de sangre. Lo que no iba a poder olvidar era la tristeza que había en su rostro.
Próximo capitulo
Una vez que los guardias dejaron mi puerta.
Me dirigí directamente a la enfermería.
Y allí fue donde descubrí un secreto.
"Los poderes mágicos no son ilimitados."
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Ikemen Revolution en español [ruta Lancelot Kingsley]
Romance"Si intentas detenerme, no te mostraré piedad, Alicia". Como el Rey que comanda el Ejército Rojo, los seguidores de Lancelot juran su lealtad a su formidable liderazgo. Tiene tremendos poderes mágicos y aboga por un gobierno dictatorial, pero a vece...