Reencuentro

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(Narra Kev)

- ¿Por qué ten pensativo? - Edel tomo mi hombro. Sentí que sobresalté - ¿Sigues soñando con esa chica? - se sentó al lado de mi.

Sacudí un poco mi cabeza y regrese en mi.

- Si, pero es extraño - pensé por un momento en el sueño de anoche.

Ahora no solo estaba con ella, también con otro chico que se parecía a ella y dos niños, jugábamos en un jardín con un pequeño dragón negro... ¿Un dragón?

- Por alguna razón siento que son tan reales estos sueños - dije después de soltar un enorme suspiro - pero a la vez dudo que lo sea, parecieran como si fueran de un mundo de fantasía - agache la cabeza.

- Tal vez sean efectos secundarios del juego, recuerda que sigue en prueba.

- No creo que sea eso... Cada vez que veo a esa chica en mi sueño, siento que mi corazón se acelera y me pongo feliz, se que son buenos sueños, pero cuando despierto desaparece ese sentimiento y me lleno de una infinita tristeza...

- Insisto en que debes decirle a Oberon y aceptar a Emi...

- No confío en él y ella no me agrada - dije de mala gana.

- Entiendo, entiendo - dijo poniéndose de pie - vamos a cazar algo - me lanzó un arco - necesitas distraerte.

- Está bien - me puse de pie y camine junto a él sobre las ramas de aquel enorme árbol.

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(Narra Tanji)

Arami tenía razón en comenzar desde temprano, nos conectamos a las 6:00 AM y ya llevamos casi la mitad del camino recorrido y aún no es medio día en el mundo real. A este paso probablemente lleguemos al anochecer.

Todos ellos tienen técnicas de espada muy buenas, parecen ser un buen equipo a pesar de que se nota la división de grupos, además de que se coordinan bastante bien, en algunas situaciones sentí como si yo estuviera sobrando aquí.

- Nunca habíamos avanzado tanto en un día - dijo Suriel bastante animado mientras veía sus puntos de combate.

- Eso es porque nos estamos acoplando a ellos - Uriel señalo a Arami y su grupo - es obvio que ellos lleven un muy bien ritmo, después de dedicarse por dos años completos a esto.

Solté un suspiro, ellos de verdad eran muy buenos, comencé a caminar sin darme cuenta.

- ¿Sucede algo? - Arami me alcanzó y pregunto detrás de mi.

- Te gustaría volver a ese mundo? - pregunté sin pensar.

Voltee a ver a Arami, parecía estar sorprendida por mi pregunta.

- Lo siento - me apresuré a disculpar.

- No lo sé - termino respondiendo - no fue fácil vivir en ese mundo... Al principio - note que dejó salir una media sonrisa y volteó a ver a su grupo - puedo decir que ahí conocí a personas extraordinarias, personas a las que les pude confiar mi vida, ellos ahora son mis mejores amigos y consejeros - ahora volteó al cielo - ahí me enamore, ahí conocí al amor de mi vida y tuve una familia - note que una pequeña lágrima se deslizó por su blanca mejilla - incluso pensé en la posibilidad de tener una vida en ese mundo - ahora me miró sonriente - tal vez era un juego muy arriesgado, pero... No todo fue tan malo - me sorprendió bastante su respuesta.

Uno pensaría que los supervivientes de ese juego sentirían cierto rencor hacia ese mundo y a su creador, pero... Era más que obvio que ella sentía aprendió por ese mundo.

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