Después de seis meses de haber terminado su larga relación, Lynn decide que quiere ayudar a Cedrik a cumplir su deseo más grande en el mundo, aun si no es a su lado. Por otro lado, Cedrik acepta con la ilusión de que Lynn se dará cuenta que con la ú...
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Sentí como mi estómago se revolvía gracias al nerviosismo que sentía en mi interior tras haber presionado el botón de enviar. Lo había hecho. Mi solicitud de empleo había sido enviada tras muchas semanas de trabajo.
-Se ha ido.-Comentó Dallas quien parecía incluso más nervioso que yo.
Asentí.
-Vaya mierda, quiero llorar ahora.-Murmuré.
-Los robots no lloran-dijo con el ceño fruncido, ganándose un empujón de mi parte que lo hizo quejar.
-¿Qué haces aquí, Dallas? Te dije que yo te avisaría cuando lo enviara.
-Oye, es nuestro hijo, Lynn.-Señaló con indignación.-Y si alguien tenía que estar presente en cuanto lo enviaras, debía de ser yo.-Se señaló a sí mismo. Rodé los ojos.-Además, tenía que venir a decirte que el plan de intercambio ya está terminado.
-¿Qué?.-Había salido sin emoción alguna ¿Iba a irse ya?
-Así es, boba.-Asintió.-Me iré a Seattle dentro una semana.-Parecía emocionado.
Yo por mi parte no podía demostrarlo con una sinceridad al cien por ciento. Dallas había sido demasiado constante en mi vida en estos días haciendo que el distanciamiento entre Sed y yo no fuese tan difícil. Además de que me había distraído por las tardes con él ya que estar con Dave me recordaba mucho al hecho de que Annie estaba en el hospital y también me había distraído de sentirme como una mierda por estar tan distante de Cedrik en estos días. Era algo increíble que fuera a irse en solo un par de días, pero no podía demostrar ser una mala amiga, de verdad estaba feliz por él, pero no era algo que esperaba escuchar tan pronto. Incluso había olvidado el hecho de que él tarde o temprano iba a irse de aquí.
-Aunque no lo admitas, cosa sin sentimientos, sé que vas a extrañarme y más te vale que vayas al aeropuerto a despedirte de mi, porque sino me sentiré muy indignado contigo.-Amenazó.
Rodé los ojos y me quejé al sentir como me apachurraba en sus brazos mientras fingía llorar.
-Dallas...-Me quejé.-Suéltame.-Exigí peleando contra su fuerza, pero parecía que me sujetaba con aún más fuerza solo para molestarme.-Es mucho contacto físico, invades mi espacio personal.
Dallas me soltó justo en el momento en el que hacía fuerza para alejarme por lo que terminé cayendo de culo en el suelo. Rodé los ojos al escuchar como se burlaba de mi. Bien, tal vez no iba a extrañarlo tanto.
-¿De qué me perdí?.-Ese era Cedrik quien recién venía llegando del trabajo.
-¡He Cedrik!.-Dallas se acercó a él para saludarlo.-Amigo, le estaba comentando a tu horrible novia que me iré en un par de días. Así que tú también estás invitado a ir al aeropuerto a despedirte de mi. Invité a Lynn porque sabía que si iba ella a fuercita tenías que ir tú, no es tanto porque ella me agrade.-Murmuró haciendo reír a Cedrik.
