Pov Lauren
- ¿dónde esta ese bastardo? - fue lo primero que le pregunte a Dinah cuando llegué a la comisaría.
- hola, lo tienen en el cuarto de interrogación - dijo suspirando, se notaba un poco cansada, pero mi ira no había dejado que me diera cuenta.
- lo siento ¿estas bien? - le pregunte sentándome en una de las sillas del corredor.
- la verdad no, ayer pasé en vela pensando que mi hijo ya iba a nacer - dijo con una mini sonrisa - y hoy me llama Austin, hoy que pensaba dormir todo el día - dijo girando los ojos.
- todo saldrá bien - le dije dándole caricias a su espalda.
- lo mismo te digo - dijo con una sonrisa tranquilizadora. Ella ha sido mi confidente estos últimos días.
- hola Lauren - me dijo Gerald.
- hola comandante - le dije y le di mi mano, el la estrecho sonriendo - ¿cómo van con el imbécil allá adentro? - pregunte sin mostrar mi ira.
- mal, no va a hablar hasta que tenga un abogado, hemos hecho todo lo permitido, pero nada - me dijo suspirando.
- ahora ni es permitido golpear a los investigados - dije apretando los dientes.
- en casos como este si que me estresa, pero en los casos más leves no me molesta, de hecho me quitan un peso de encima, algunos oficiales abusan de su poder - dijo suspirando, además la corrupción sigue a la orden del día.
- yo puedo ayudar, a mi me va a decir todo y sé cuando miente - dijo Dinah desde atrás, ella se había mantenido en silencio.
- hola ¿usted conoce al chico? - le pregunto el comandante con cautela.
- hola, si, es primo de mi esposa - dijo Dinah mordiéndose un labio.
- ¿usted sabia todo lo que hizo el chico? - le pregunto Gerald viéndola detenidamente.