Epílogo

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Una vez más, como desde hace semanas, golpeo la puerta de la habitación de Chris.

Espero una respuesta.

Pero ni siquiera me dice que me vaya, solo hay silencio.

Me preocupa...

Hoy tome la decisión de entrar, la señora Yenny me dijo que era lo mejor.

Pero no quise hacerlo, no quería invadir tanto la privacidad de mi bebé.

Pero ahora me parece lo mejor.

Saco las llaves de mi bolsillo y abro la puerta.

Observo la habitación y no hay nadie.

Observo más detenidamente.

Hay un papel en la mesa de noche junto a sus lentes.

Lo abro y corroboro que se trata de una carta.

"Richard:

Por favor, lo primero que te pediré es que no me odies, lo segundo será que leas toda la carta.

Primero quisiera que sepas que todo esto está consumiendome, ya no puedo más.

Todo es oscuro para mi, y la única luz son tú, Erick y mi madre.

Principalmente tú...

Te amo tanto...

Que justamente por eso tomé ésta decisión.

Es lo mejor, para ambos.

No me odies, no sufras, vive.

Me hubiera encantado cumplir nuestros sueños, pero no todo es color rosa, estos últimos meses, más bien todo se ve en blanco y negro.

Me siento vacío, roto, sin nada que ofrecer.

Me siento tan solo una carga para todos.

Sé que dijiste que podría, pero no pude...

Te amo, espero me entiendas y hagas lo que te pido.

Sé feliz, que donde quiera que yo esté, te seguiré amando y estaré feliz por ti.

Gracias por todo Richard Camacho, gracias por enseñarme lo mejor de éste mundo.

El amor.

Y me despido con todo el amor que siento por ti.

-Chris"

La puerta del baño está cerrada, corro e intento abrirla y descubro que la aseguró.

Saco las llaves nuevamente e intento abrirla.

Mis manos tiemblan, mi corazón late desenfrenado y millones de lagrimas corren por mis mejillas.

Logro abrir la puerta y lo veo.

Corro hacía él y me arrodillo al lado de la tina.

Lo saco de ahí y una corriente recorre mi cuerpo.

Está helado, trato de sacarle el pulso, pero no hay...

Él ya no está.

Me dejó.

—Bebé... —Susúrro aferrándome a su cuerpo.

Suelto un sollozo y esa horrible sensación de una parte ausente se instala en mi cuerpo.

Algo me falta... Y es él.

Anorexia ||OreoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora