Vals de Máscaras (JeonJungKook)

13

-Parece que tienes que regresar a casa –le dijo a Violeta

-Solo será por poco tiempo

-Espero que tengas un viaje cómodo y seguro

-Gracias

Sonrió amable por una última vez y tomó el camino a la sala.

-aj, ella está atacándome –se quejó Violeta en voz baja

-¿Por desearte un buen viaje?

-No me desea un buen viaje, me desea un buen viaje

-No entiendo cuál es la diferencia

-Que desea que muera en mi viaje

-Violeta, no digas tonterías

-Te lo juro. Tan solo date cuenta cómo me mira y cómo sonrió

-Ya basta. Ya vete

Rodó los ojos y salió de la casa, subió a su auto y por fin se fue.

Cuervo y Charlotte fueron a la ciudad, mientras a mí me dejaban en mi oficina trabajando.

Después de un buen rato, dejé mi oficina y decidí por salir a caminar un momento al jardín.

Mientras caminaba, a lo lejos vi a Charlotte sentada en una de las bancas, con una libreta grande en las manos, un lápiz y el cabello cayéndole, por un lado, cubriendo su cara.

Me acerqué a ella en silencio y me senté a su lado.

-¿Siempre es costumbre tuya asustar a las personas? –preguntó sin dejar de mirar lo que hacía en su libreta

-¿Te asustaste?

-No, pero no dudo que esa fuera tu intención –dejó de hacer lo que hacía y me miró

-En realidad, solo no quería interrumpirte

Suspiró y cerró la libreta.

-¿Por qué le pediste a Cuervo que te acompañara a la ciudad?

-mmm... papá piensa que Carter va a tomar represalias contra nosotros y por eso me pidió que saliera a todos lados acompañada

-¿Por qué no contratar a alguien de seguridad?

-Bueno, paso todo el día, todos los días en la casa, solo salgo de vez en cuando a la ciudad. No quiero a alguien siguiéndome por toda la casa

-Pero, sería mejor que tuvieras a alguien profesional cuidándote

-No, estoy bien así

-¿Tan malo es ese Carter?

-No lo sé... siempre fue el amigo de papá y pensábamos conocerlo, pero después de esto... ya no sé qué creer sobre él

Supongo que era algo difícil para la familia, no sé qué tan amigos hayan sido, pero al parecer le tenían bastante aprecio.

-... ¿Qué estabas haciendo? –quise cambiar de tema para que se olvidara un poco de ese problema

-Estaba dibujando –sonrió levemente

-¿Dibujas?

-Claro que sí, soy restauradora, debo saber dibujar para hacer un buen trabajo

-Sí, seguro. Seguro dibujas puros monitos de palitos

-No, no lo hago

-Muéstrame el dibujo

-No

-¿Por qué no?

-¿Para qué quieres verlo?