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Sonrió un poco.

-De todos modos, necesito hablar con Oliver, necesito explicárselo, disculparme. Por lo menos, quiero que seamos amigos, es una persona muy especial para mí y no quiero perderlo

-...Lo entiendo

Todo esto, me recordó a mi sueño. En ese sueño me sentía tranquilo y alegre, quiero saber si me sentiría de la misma manera ahora.

Solté su mano y me recosté sobre sus piernas, dejando las mías colgando al no caber por completo en la silla y en el banco del piano.

-¿Qué haces? -preguntó sonriendo

-Solo quiero intentar una cosa

Cerré los ojos y me relajé.

-¿Puedes tocar una canción?

-...Okey, si eso quieres

Levantó la tapa del piano y comenzó a tocar una canción. 

La sensación de paz regresó a mi pecho, la música, su tranquilidad me contagiaban. Lo que sentí anoche, el pánico momentáneo que me invadió al ver a Charlotte ir detrás de Oliver, ahora eran como algo lejano. Algo de hace años.

Charlotte

Dos días han pasado desde que Oliver vino, todos los días le dejo un mensaje de que hable conmigo, pero nunca me contesta. Sólo lo llamaba una vez y le mandaba un mensaje al día. No quería molestarlo por ser tan persistente, pero tampoco quería que pensará que no me importa.

Quiero también que pase un tiempo y él se calme un poco, así sí me escuchara con atención.

Mientras trabajaba en mi estudio, uno de los obreros que trabajaban arreglando la casa, llamó a mi puerta.

-Encontramos esto en uno de los pisos de la biblioteca -me mostró la caja de sus manos

Era una caja de madera oscura barnizada pero ya desgastada. Tenía una franja verde con flores y ramas doradas al rededor, con un seguro dorado al frente.

Me puse unos guantes y la tomé de sus manos.

-¿Sólo encontraron esto? -llevé la caja con cuidado a la mesa y la dejé sobre una tela blanca

-Sí, estaba en un pequeño espacio el en suelo, cerca de la puerta

-Entiendo. Vayan con cuidado desde ahora y llámeme de inmediato si encuentran algo más

-Entiendo

-Gracias

El hombre se fue cerrando la puerta.

La caja era bonita y seguro que fue una hermosura cuando era nueva.

Me puse un cubre bocas y con cuidado quite el pequeño seguro para poder abrir la tapita que estaba algo atorada por la oxidación de las bisagras, pero al final pude abrirla sin dañarla.

El interior estaba forrado con terciopelo rojo.

Esto era emocionante, había cartas, papeles, un reloj de bolsillo y fotos.

Me quite los guantes y el cubre bocas y salí corriendo en busca de Jungkook, quería que él los viera conmigo.

Llamé a la puerta de su oficina y esperé hasta que me dejará pasar.

-Que linda sorpresa -sonrió al verme y yo sonreí como idiota -¿Qué sucede?

-Los obreros encontraron una caja en el piso de la biblioteca y quiero que veas el interior conmigo ¿Puedes?

-Claro que puedo

Se levantó de su silla y tomó mi mano para ir los dos juntos.

-Hay cartas, fotos, más papeles y un hermoso reloj de bolsillo -estaba emocionada y no me apenaba demostrarlo

Justo en la puerta del estudio se detuvo y me miró.

-¿Qué? -pregunté

-Te vez linda emocionada -pellizco con suavidad mi mejilla

-Vamos, vamos

Entramos y le di a Jungkook un par de guantes y un cubre bocas.

Tomamos los papeles con cuidado y los dejamos sobre otro mantel blanco.

-Increíble -dijo admirando las cosas

Mis ojos fueron en especial a una foto. Una de una pareja.

La tomé con cuidado y la acerqué a mí.

Oh madre mía.

-J-Jungkook

-¿M?

Giré la foto y dejé que él la mirara. Sus ojos fueron a los míos, a la foto y de regreso a los míos.

-Pero...

Miré detrás de la foto.

So Doo Hwan & Lucy Ee

6 junio de 1870

-Es Lucy y So Doo Hwan -dije

Ambos nos miramos.

La foto, era en el jardín de esta casa. Lucy llevaba un vestido rojo y Doo Hwan un traje claro, no se podía notar por lo amarillento del papel, pero creo que era blanco.

La mano de Lucy estaba en el brazo de Doo Hwan quien a su vez sostenía la mano de Lucy. Los dos sonreían, los dos se veían felices, enamorados, jóvenes y... ellos dos éramos Jungkook y yo.

-Esto no puede ser, es una broma de mal gusto -dije dejando la foto sobre la tela

-Es... imposible -la tomó él -somos nosotros... hace 150 años

Miré las demás fotos. Con personas que no conocía.

-Esta es la caja que Jin Hun guardaba celosamente y la que desapareció cuando él murió -dije -la que mencionó la señora Casto

-Pero ¿Cómo puede ser? Somos nosotros -me mostró la foto -nosotros no tenemos más de 150 años

Tomé una de las cartas y la saqué del sobre que ya estaba abierto.

La hoja estaba amarillenta y las letras un poco corridas por la humedad a la que fueron expuestas, pero aun así se podía leer lo que decían. Detrás del sobre, solo estaba escrito el nombre de Lucy en letra cursiva.

23 de Abril de 1870

Papá y yo llegamos seguros a los puertos, espero que tú te encuentres bien. Sólo quería que supieras que regresamos en tres días, que serán los tres días más largos de mi existencia. Tres días en los que no podré verte, ni abrazarte, ni besarte, pero las ansias de verte son lo que me mantienen trabajando duro para terminar lo más pronto posible.

Te amo con todo mi corazón.

Doo Hwan

Vals de Máscaras (JeonJungKook)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora