T R E I N T A Y D O S

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--No me coge las llamadas--dije nerviosa dando vueltas por la sala.

Habia llamado a mi tio James demasiadas veces ya. No contestaba. Intente llamar a Scarlet, pero tampoco contestaba.

--Deberias relajarte--la miré entrecerrando los ojos.

--Rose, ahora mismo tengo muchas cosas que cuestionarme, y el relajarme no es una opción.

Me senté a su lado y noté que se tensó en el lugar.

--¿Que te pasa?--me miró sorprendida--estas rara conmigo.

--Aria, a veces eres muy gilipollas.

Ahora era yo la que la miraba sorprendida.

--Te recuerdo que podria matarte en un abrir y cerrar de ojos--dije seria. Ella se tensó aun mas--Era broma.--puse mis ojos en blanco.

--Para ti todo parece una broma algunas veces--dijó refunfuñando.

--¿Y a ti que te pasa?

Me estaba desesperando y ella no ayudaba.

--Me besaste.

Vaya.

--Yo...--no sabia que decir.

--Exacto--se levantó, estaba algo enfadada--tú. Siempre tú siendo tú.

Se fué por el pasillo y escuché un portazo. Se habia encerrado en su habitación.

Mierda.

--Rose--dije llamando a su puerta. No respondió--Rose porfavor, no era mi intención. No se porque lo hice.

Abrió la puerta de un golpe. Su cara estaba roja y se veia enfadada.

--¿Y porque cojones lo hiciste?--me gritó--Te odio.

Dijo sin mas y volvió a cerrar la puerta. Escuché el pestillo correrse del otro lado de esta.

--Rose abreme--grité--Abreme la puta puerta o la echo abajo.

--Lárgate Aria--gritó con furia.

Mierda.

--¿Rose es enserio?--no contestaba. Me senté apoyando mi espalda sobre la puerta.--Vale, tu ganas, soy gilipollas. ¿Sabes porque?--mas silencio--porque no se porque lo hice. Igualmente no me arrepiento.--escuché pasos acercandose a la puerta--tengo muchas cosas encima en estos momentos y ni siquiera he tenido tiempo para ordenar mis pensamientos. ¿Todo esto nuevo sabes?.

Pensé que abriria la puerta. Pero no lo hizo.

--Te dejo tranquila si eso quieres--me levanté y antes de irme añadí:--ahora lo pienso y fue un error hacerlo. La situación no fue la mejor, y parece que nunca lo será.

Me giré sobre mi misma y comenzé a andar por el pasillo; hasta que escuche como quitaba el pestillo de la puerta.

--Diciendo eso no  pareces la Aria que conozco--la miré algo extrañada, su cara se veia mas relajada y algo melancólica--la Aria que yo conozco deja atrás todas las malas situaciones y es ella misma. Si tan mala situación era, no estabas siendo tú.

No se que me pasó en ese momento, pero a paso rapido me acerqué a ella y volví a besarla. Ella tenía razon. No entendia porque queria hacer esto, pero queria hacerlo, y yo cuando quiero algo simplemente lo hago.

A R I ADonde viven las historias. Descúbrelo ahora