Carta número cuarenta y uno.

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Mañana es el baile de bienvenida y yo aquí sentada junto a Aria viéndote pasar desapercibido de un grupo de chicas.

Se que sonará exageradamente loco pero estos días te he sentido de forma muy diferente en si, pero descuida, no de mala manera sino que todo lo contrario. Aunque bueno, tus cambios de humor han variado demasiado estos días, ya que, hace dos te vi demasiado feliz, incluso ayer pero hoy tu estado de ánimo a sido todo lo contrario.

Para mi distracción, Hudson me a recordado nuestros pequeños planes de mañana; una cubeta enorme de nieve junto a un kit de chocolates (distintos sabores y tamaños) con palomitas acarameladas, mis favoritas y una serie de películas de acción.

Haz de pensar que es demasiado extraño llevar a una persona que recién acabo de conocer a mi casa pero Hudson me a infundido demasiada confianza, tanta que me he dado cuenta de la grandiosa persona que es. A pesar de él ser hombre, considero que es una versión mia masculina, un poco loco lo se.

A veces me pregunto cuales serán tus gustos de música, qué haces en tus tiempos libres, cual es tu comida favorita o cuál es tu forma de distracción cuando te encuentras estresado. Me gustaría de verdad saberlo o por lo menos tener una idea de ello.

Hoy haz pasado varias veces frente a mi con una cara de disgusto, haz sido respetuoso y me haz saludado de lejos pero noto algo distinto en ti. Espero que esté todo bien.

Atte: Peyton Collins, tu admiradora y vecina.

Las Cosas Que No Te He Dicho. [#1] (EDITANDO)©️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora