«Rumores y cliché»

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Uno diría que criar a un pequeño niño dentro de una organización criminal era mala idea e incluso podía llegar a ser peligroso pero, John creció como un niño normal.

En lo que tu te recuperabas en el hospital —siendo constantemente visitada por Giorno— Mista y Trish cuidaban del pequeño recién nacido.

—Parece un mono—Comento Mista ganándose una mirada de desaprobación por parte de la pelirrosa que cargaba al pequeño recién nacido.

—Tu pareces un mono —Contrataco la mujer meciendo al pequeño en sus brazos. —También hueles como uno.

—¿Y a qué huele el mocoso? —Cuestiono Mista bastante ofendido a lo que se cruzaba de brazos.

Trish le observo fijamente como dudando unos segundos antes de extenderle al pequeño niño que movía su naricita.

—Cárgalo —Le dijo la joven al de ojos oscuros quien se sobresalto en lo que veía como poner sus brazos para sostener al menor.

—Es... adorable de algún modo—Dijo Mista viendo como el pequeño en sus brazos abría poco a poco los ojos y le miraba silenciosamente como examinándole. —Oye, Trish.

—¿Qué? —Replico la joven mujer cargando en un hombro las cosas de bebé que habían traído para Mustang junto con ropa para ella misma.

—Sé que parece imposible pero ¿crees que este niño sea de Giorno? —Pregunto Mista al ver aquella estrella marcada en el cuello del infante quien bostezaba tranquilamente.

Trish observo al pistolero acercándose al mismo tiempo que observaba los ojos casi verdes del niño que adormilados les observaban.

—De ser así, creo que Giorno sería un buen padre. —Dijo Trish acariciando con gentileza la pequeña cabecita del menor.

—Aunque sea un mocoso de seguro lo cuidara con su vida, como cuida a T/N quedándose con ella todos los días—Dijo Mista esta vez mirando al niño que ciertamente tenía un parecido con Giorno pero era casi minúsculo, por esa razón no vio las señas que Trish le hacía.

—¿Qué estas diciendo, Mista? —La voz del rubio le tomo desprevenido a lo que el joven de gorra se volteaba topándose con el Don de Passione usando su traje oscuro sobre el cual en sus hombros reposaba una capa blanca dándole un aire de solemnidad, tomando delicadamente al menor de los brazos de Mista, Giorno lo acurruco contra si cubriéndole en parte con su capa para evitar que la luz le encegueciera.

De algún modo el bebé soltó una risa por sus acciones mostrándose bastante animado al reconocer a alguien de su familia cargándole, el rubio observaba con una minúscula sonrisa al pequeño en brazos sin percatarse de los otros dos mirándole en silencio como sacando conclusiones.

—T/N nos esta esperando, vamos —Dijo Giorno a lo que los otros dos no estaban seguros si les hablaba a ellos o al pequeño bulto rosa que reía ante cada palabra que decía por lo que el rubio se les adelantaba. —Yo te protegeré a ti y a tu madre, si tu padre no se interesa por ti yo seré como uno ¿Qué te parece?

El bebé elevo sus brazos hasta el más alto y soltó una risueña risa a lo que con su mano libre el rubio transformaba algunos papeles de su bolsillo en mariposas.

[...]

18 meses más tarde.

El grupo entero observaba al pequeño balbucear mientras traía su sonaja en la mano.

—Venga, di Mista, Mista —Dijo el joven de tez ligeramente morena mirando al bebé.

—No le hagas caso, di Trish ¿sí? —Pidió la pelirrosa en lo que tu y Giorno hablaban sobre una mafia en Venecia que planeaba hacer alianza con Passione.

Porque sí, tras lo sucedido con Diavolo se expandieron rápidamente los rumores sobre el imparable jefe de Passione y su guardaespaldas capaz de rebanarte a la mitad sin que lo notaras, algunas organizaciones preferían formar una alianza en lugar de ser bruscamente derrotadas por los miembros más fuertes de toda Italia, tanto Giorno como tu observaban a Trish y Mista intentar hacer que John dijese algo mientras Polnareff les observaba junto al infante.

—O...o...—Balbuceo el bebé.

—¿O? ¿Oso? —Pregunto Mista ladeando la cabeza.

El pequeño soltó una risa en lo que alzaba los brazos.

—¡Ora!

El silencio reino en la habitación mientras los más jóvenes no entendían las palabras del pequeño, Polnareff comenzó a reírse con una fuerza tal que de tener su cuerpo le estaría doliendo la garganta.

—¡Ora! ¡Ora! —Seguía exclamando el pequeño a lo que ahora tu comenzaste a reírte tras no poder reprimir más aquella carcajada que nació cuando oíste la primera palabra.

—No puedo creerlo —Dijiste acercándote al pequeño que sostenía a la tortuga, la cual fue tomada por Mista y dejada cerca de la ventana. —En serio lo dijo.

—Ora Ora —Imito Polnareff antes de volver a reírse junto al bebé que seguía repitiendo la frase.

—¿Qué significa "Ora"? —Pregunto Trish observando al pequeño abrazarte.

—Nada en especial —Dijiste limpiando las lagrimas de risa que se habían acumulado en tus ojos.

—Solo una frase cliché de un amigo nuestro —Respondió Polnareff mirando al pequeño en tus brazos.

Nadie pensaría en ese momento que eso sería más que una frase graciosa, sino que también estaría repartiendo golpes a diestra y siniestra gritando esa misma palabra.

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Quiero pensar que John le dio de golpes a Ascension Dio por haber secuestrado, torturado y abusado de su madre en otra linea temporal con este soundtrack (que se que es el de Jotaro pero ñie):

Nos leemos otro día, muchas gracias ^^

Las circunstancias de la familia Kujo →「Jotaro Kujo」Donde viven las historias. Descúbrelo ahora