Capítulo 11

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Carlos

-¿Viste lo buena que está María?-

Miré de reojo a Ramón y después la vi a María. Estaba enfrente de nosotros saliendo de la escuela, con su pollera corta.

-Puede ser- Respondí sin ganas.

-La quiero, Carlitos. La quiero para mi- Fruncí el ceño.

-Y decile, pajero- Él chistó con la lengua.

-¿Te pensás que nunca le dije nada? Me cansé de declararme. Y siempre me rechaza. Hasta me dijo que no le gustaba. Hija de puta-

-Y si sos re feo, ¿Que esperabas?- Él me miró mal. Me reí.

-Discúlpame por no ser rubio y de ojos claros como vos, forro- Hubo un tiempo de silencio mientras la seguíamos mirando. -Se va sola a la casa-

No había más que agregar, ya me estaba imaginando lo que tenía planeado.

-No, pará. Es un re quilombo todo lo que querés hacer. Seguirla con el auto. Ir a un lugar donde no haya nadie. Después me vas a pedir que la mate, seguro y además capaz ni te la vas a poder cojer. Como la modelo de la última vez ¿Te acordás?- Dije eso último riéndome.

-Shh, callate-

Ramón seguía observándola hasta que desapareció de nuestra vista. Prendió el motor.

-Es al pedooo- Dije en forma de cántico.

Lo apagó bruscamente.

-Al menos yo intento hacer algo, vos venís espiando a una piba hace como no sé cuánto, te haces el chico malo y sos re cagón-

Lo miré sorprendido.

-¿Yo soy el cagón? ¿Yo? Te recuerdo que la hora de apretar el gatillo, yo estuve ahí. Y vos te diste la vuelta porque "no querías ver". Y no te metas con mis cosas-

-¡Entonces vos no te metas con las mías!- Exclamó ya bastante enojado.

Bajé rápido del auto y cerré la puerta lo más fuerte que pude.

-¡Anda mamerto!-

Ni me di la vuelta. Hice como que no lo escuché y seguí caminando.

#

Julia

A mi me va bastante bien en la escuela pero ya estoy en el último año y como que estoy cansada todo el tiempo y no quiero hacer nada. Sinceramente no creo que extrañe mucho la secundaria. Admito que voy a extrañar compartir tantas horas con Ana. Ella siempre está conmigo en todo. Es la única que sabe lo de Carlos.

Carlos.

Casi me besa. Casi nos besamos. Yo quería que pasara. Quería que me bese y que me abrace fuerte mientras lo hacía. Necesitaba verlo. Puede ser enfermo o puede simplemente estar mal. Pero ya era tarde para dar marcha atrás.

-Eu-

Me salí rápidamente de mis pensamientos.

-Sí, Ana. Decime-

Me miró sería.

-No se en qué andarás pensando pero supongo que en Agustín. Ayer me contó que se peleó con vos y me pidió persuadirte para que le hables. Porque viste como es, cagón-

Rodé los ojos.

-Ya no me gusta Agustín, hace rato me pasa. Y la verdad es que en un principio él no me dijo nada malo pero yo provoqué la pelea. De alguna forma quise que nos pelearamos. Como para tener una excusa de... bueno, separarnos-

-Decile, Ju. Si querés te acompaño a que termines con él. Pero te recomiendo que le avises-

Ana tenía razón.
En el recreo hablé con Agustín. Terminé con él lo más rápido que pude. No dijo nada más que "Está bien". Pero se le veía de acá a tres cuadras que quería llorar.

Más tarde terminó la clase y ya por fin me podía ir.

Caminé hasta mi casa con la intención de cruzarmelo.
No lo veía por ningún lado. Me sentí un poco tonta. Capaz me creí que él realmente quería algo conmigo. Ay dios, ¿por qué siquiera debería querer algo yo con él?
Es un delincuente. No quiero decir que es diferente, al contrario. Hay algo más oscuro en él y quiero saber qué. Aunque se lo peligroso que puede llegar a ser.
Tomé el camino más largo a casa.
Me metí en las calles vacías.
Nada.
Entonces sentí que estaba olvidándome de algo. Pero... ¿Qué?
Cierto, dejé mi campera en la escuela. Que estúpida. Me di la vuelta para volver.

-¿Pensando en mi?-

-¡Carlos!-

Young and Beautiful Criminal © / Editando #Wattys2022Donde viven las historias. Descúbrelo ahora