Young and Beautiful Criminal © / Editando #Wattys2022

Capítulo 14

Carlos

El día estaba hermoso. El otoño es una de mis dos estaciones favoritas, la otra es el invierno. Me gusta caminar y pisar las hojas que caen de los árboles, y ese crujir que hacen cuando son quebradas por mis zapatos.

Rara vez caminábamos con Ramón. Siempre nos la pasábamos con el auto de su papá de acá para allá. Jorge es el padre más permisivo que conozco.
Cuando le dije a Ramón que quería caminar acepto pero a regañadientes. Lo que pasa es que a él le encanta hacerse el lindo. Siempre anda con una mano en el volante y y otra por fuera de la ventana. Y obviamente con un cigarrillo entre sus dedos mientras le guiña el ojo a las chicas que pasan.

- Tengo una buena noticia - Ya hablaba sonriendo.

- ¿Qué cosa? - Le pregunte sin sacar la vista del suelo.

- Encontré una buena joyería para robar. No parece muy difícil forjar la puerta - Rodé los ojos pero Ramón pareció no verme ya que siguió hablando entusiasmado. - Mañana cierra a las ocho de la noche. Y me enteré que el dueño se va a de vacaciones así que no vamos a tener problema en apurarnos y eso - Sacó un paquete de cigarrillos. Me ofreció pero me negué. - Además te podés quedar tranquilo porque pregunté y no tiene perros - Reímos.

- ¿Hay seguridad? - No respondió. Lo miré y asintió en silencio. Suspiré molesto.

- Ya vemos que hacemos con el tipo. Ahora nos tenemos que concentrar que vamos a hacer y eso -

Armamos un plan. Con respecto al tipo de seguridad, decidimos improvisar.

- Che, rubio. Me tengo que ir ¿Vos te quedas por acá? -

Negué con la cabeza. Ya había planeado mi día desde ayer.

- Paso por mi casa para buscar la moto y de ahí la voy a ver a Julia -

- Estás emocionado ¿eh? - Sonreí a medias.
Estaba más que emocionado. Tenía organizado a donde la iba a llevar y todo. - Sabes que lo estuve pensando y no se si está bueno que andes de novio ahora - Fruncí el ceño. - Me refiero a que si bien la mina te tira onda o lo que sea, puede ser que este fingiendo y nos mande en cana cuando menos lo esperemos - Me detuve y lo miré.

- ¿Que decís Ramón? Nada que ver. La piba está encantada conmigo- Y yo con ella. - No va a decir nada, te lo aseguro -

Ramón agachó la cabeza, asintió levemente y después me miró.

- Eso espero, Carlitos. Bueno, me voy. Chau -

No llegué a saludarlo que él ya se había ido. Me pareció rara su reacción. Primero estaba contento y apoyándome con Julia y después cree que no es lo mejor.
De todas formas me fui a mi casa en busca de la moto. La hora de salida de Julia ya estaba cerca.

Julia

- Y por favor cuando traigan sus afiches que no sean puro textos porque se ponen a leerlos y así cualquiera. Así que quiero imágenes, quiero ver qué se divirtieron estudiando mi materia, aunque sea mentira - Reímos. - Hasta el viernes -

La profe nos venía preparando hace rato para la lección de biología. Con Ana ya habíamos arreglado para juntarnos a estudiar, y como era viernes me iba a quedar a dormir en su casa. En mi mochila tenía ropa cómoda y mi cepillo de dientes.

Biología era la última clase ese día así que en cuanto terminamos los fuimos a la salida. Una vez afuera, Ana se colgó a mi brazo.

- Sabes que te quiero ¿no? - Dios mío...

- ¿Que pasó? - La conozco.

- Me olvidé de avisarte pero hoy no vas poder venir a casa. Mi mamá me avisó a último momento que hay visitas. Pero venite mañana -

Suspiré. Ya me había hecho ilusión con pasar la noche con ella. También quería contarle sobre Carlos. Hasta ahora no le había dicho nada sobre los últimos sucesos.

- No pasa nada. Mañana voy - Nos despedimos y pegué la caminata a casa.

Llegando a la esquina vi una moto estacionarse frente a mi en la calle. Carlos.

- ¿Esta moto es tuya? - Pregunté pero segura de que la repuesta iba a ser "no". 

- Hola ¿No? Para ir a un colegio tan caro sos bastante maleducada - Puse los ojos en blanco. - Te podés quedar tranquila que sí, es mía - Enarqué una ceja. - Dale, subite -

Mi cuerpo se tensó. ¿Yo...en una moto? ¿Con él? Era más arriesgado de lo que ya venía siendo.

- No sé, Carlos...-

Se inclinó hacia mi, interrumpiendo mis palabras.

- Te prometo que te voy a cuidar, en serio -

¿Qué más da? Me subí detrás de él resignada. Estás cosas no pasan todos los días.

- Más te vale que me cuides o te pego una piña y ya no vas a tener una cara tan linda - Rió.

- Uff. Que agresiva. Me muero por verte intentándolo - Solté una pequeña risa.

Estoy demasiado loca, definitivamente. Me agarré a su cuerpo sin tocarlo demasiado. Todavía me sentía nerviosa con su presencia y ¿poner mis manos por su cuerpo? Funciona como fantasía pero hacerlo realmente me da vergüenza.

- ¡Julia! -

En ese momento miré hacia donde creí que provenía el grito. Mi sonrisa se borró. Carlos arrancó la moto. Inconscientemente me agarré a él con más fuerza.

Agustín

Por suerte las clase terminó sin mucha tarea. Teníamos una lección pero tengo que decir que biología se me daba bastante bien, así que no había problema con eso.
Miguel me invitó a su casa. Me habló sobre jugar un partido de fútbol. La verdad es que me había invitado porque sabía que necesitaba distraerme de todo lo que pasó con Julia.

- Tranquilo, Agus - Miguel intentaba consolarme. - Capaz la separación era algo pasajero y ella vuelva -

- No creo. La conozco. Estaba decidida. Además me dijo que hace rato quería terminar conmigo -

Quería llorar. Julia tenía razón, la descuidé. No sé cómo pude ser tan estúpido. Pero estaba seguro de una cosa: nunca amé a nadie como amé a Julia y creo que nunca lo voy a hacer. Tenía que intentar recuperarla.

- ¡Eu! - Alguien me jaló de la mochila. Al darme la vuelta recibí un abrazo por parte e Luciano. Siempre me cago de risa con él. - ¿Viste que siempre me entero de todo tarde? Bueno, me acabo de enterar lo que pasó con Julia. Te doy mi pésame - Y una vez más no pude evitar reír.

Entonces sentí que el cuerpo me pesaba. La sangre comenzaba a hervirme. Solté a Luciano para poder ver claramente lo que estaba frente a mí. Quise creer que no era verdad. Me congelé por unos segundos. Julia estaba subiendo a una moto con otro. ¡Con otro!

- ¡Julia! - La llamé inconsciente de que lo hacía. No se por qué. Es lo que salió de mi en ese momento. Como si en ese llamado ella se detuviera y corriera a mis brazos.

- Ah pero que hija de puta - Miguel me miró preocupado.

- No importa, vamos - Me giré y comencé ni caminata.

Ni siquiera me fijé si Migue me seguía. No veía ni por dónde caminaba. Lo único que se pasaba por mi cabeza era Julia subiendo a una moto con otro.

Que pelotudo que soy.

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Jejeje ojalá lo hayan disfrutado. ★