Capítulo 33

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Julia

Ya estaba todo listo, todo ordenado y en su lugar. Las luces, los globos. Después de varias discusiones llegaron a acordar un color y una temática. Estábamos todos emocionados por nuestro último día en la escuela. Las familias estaban llegando y los micrófonos se estaban probando.

Ana estaba casi corriendo hacia mí con dos helados en la mano.

- Me dejaron comprarlos, tomá - Agradecí mientras saboreaba el chocolate. - Che ¿va a venir tú papá? - Levanté los hombros sin saber.

- Él sabe que hoy es el acto de fin de año, mamá le dijo varias veces. Ahora que vaya a aparecer es otra cosa - Reí.

Un rato después nos llamaron a prepararnos, por suerte ya habíamos terminado los helados.
A pesar de lo que había sucedido con Carlos, estaba feliz, sentía que ni él ni nadie podía arruinarme ese día.

- ¿Estás lista? - Sentí unas manos sobre mis hombros. Eran las manos de Agustín. - Por tu speech, digo - Negué.

- Estoy nerviosa -

Sonrió amablemente.

- Tranquila que estas cosas siempre te salieron bien. Naciste para dar discursos. Te veo siendo presidente, la verdad -

Reí.

- Ya empezás a exagerar, pero gracias Agus - Nos quedamos viendonos cómo unos tontos mientras sonreiamos.

Había escuchado que después de la secundaria es muy raro que te veas con todos tus antiguos compañeros de manera constante. "¿Eso significaba que no iba a ver más a Agustín ni a Ana?" Pensé. No podía apartar la mirada de él, no comprendía que comenzaba a sentir, pero estaba segura de que no lo sentía con Carlos.

- Te amo - Dije sin pensar y caí en lo que había dicho cuando los ojos de Agustín se abrieron como platos.

- Vamos chicos que ya llegaron las familias -

El director nos nombró y pasamos uno por uno. Muchas madres lloraban de alegría. Julieta y mi mamá me saludaron de manera efusiva. No vi a mi papá pero sinceramente a ese punto ya no me importaba.
Luego de unas pequeñas formalidades el director me nombró para subir al escenario y dar mi discurso. No había preparado nada  ya que pretendía que sea un speech libre.

- Buenos días, padres, directores, profesores, preceptores y alumnos -
"Buenos días" dijeron todos. - El último día de escuela llegó para nosotros. No fue fácil, al menos no lo fue para mí pero puedo decir que tuve compañeros excelentes, con los que tuve cruzadas heavys como la mayoría - Rieron. - Pero al final nos dimos cuenta de que esas peleas eran inútiles y solamente necesitábamos tiempo para crecer y madurar - Miré a todos como intentado capturar una imagen mental del momento, varios amigos lloraban. - La escuela influyó en eso, al crearnos responsabilidades, ayudándonos a comprender las cosas que importan y las que no, a formar nuestros valores, nuestras creencias y nuestras ideologías - Me la jugaba un poco diciendo esas últimas palabras pero todos sabían lo directa que era. - Personalmente quiero agradecerles a los profesores por dejarnos ser, por estar con nosotros y acompañarnos en este camino hacia la independencia y la sabiduría - En ese momento me distraje porque desde el escenario pude ver a alguien moviéndose entre la gente hasta llegar a una silla. Era Carlos. Me vio y sonrió levemente. - Eh, perdón - Reí de manera nerviosa. - Tengo que admitir que para armar este discurso fui bien aconsejada por nuestro profesor de Literatura, alguien a quien yo admiro mucho - Los chicos silbaron y aplaudieron halagando al profesor, quién me miraba al borde de las lágrimas. - Él me demostró que el discurso libre existe y que no siempre es necesario un guión. También me aconsejó que relate algo personal ya que me puede servir para poder conectar con todos. Igual voy bien ¿no? - Pregunté en modo de chiste y todos rieron mientras me alentaban. - En esta escuela conocí la felicidad, la tristeza, el amor y el desamor - Dirigí mi vista a Agustín. - Conocí a la persona que hoy considero no solo mi amiga si no que también mi alma gemela - Sonreí hacia Ana. - Realmente deseo que ustedes también hayan conocido a alguien así. Pero también descubrí algo importante. La mayoría de mis compañeros saben que soy muy de estar en mi casa estudiando todo el día - Rodé los ojos mordiéndome los labios. Varios asintieron como si recordarán esas veces que me negué a las invitaciones de fiestas. - Siéndoles sincera, conocí a alguien este tiempo que me demostró que la vida no es solo lo que uno cree que tiene al alcance de la vista. Me mostró que en la vida hay de todo, desde lo mejor hasta lo peor. Me ayudó a saber quién quiero ser y qué quiero. Logró que ponga en duda todo lo que daba por sabido - Miré a Carlos, él fruncía el ceño y parecía estar estático en el lugar, como sorprendido de lo que decía. - Las cosas se tornaron muy difíciles entre nosotros, más que nada últimamente, pero no puedo evitar llevarme lo bueno de la situación. Y eso mismo me llevo de la escuela, lo bueno, lo que aprendí, lo que ustedes, mis propios compañeros, me enseñaron. Por eso y por más les estoy muy agradecida, siempre van a tener un lugar en mi corazón. Los quiero bolutontos - Rieron y se levantaron para aplaudir.

Young and Beautiful Criminal © / Editando #Wattys2022Donde viven las historias. Descúbrelo ahora