La máscara acaricia mis mejillas despacio. Con cuidado me miro en el espejo. La lana que cubre mi cara me da esa fortaleza que necesitaba hace un año.
Observo con cautela a mis compañeras, protegidas y fuertes. A través de la máscara me sonríen y entre nosotras nos damos ese empujón que necesitamos.
Las calles, unidas al grito de "ni una más". Todos, hombres y mujeres, unidos por una sola causa, manifestarnos por la igualdad. Con un nudo en la garganta salgo a la calle junto a mis compañeras, mujeres maltratadas.
Entre todo el gentío me siento fuerte y segura. Libre y sin cadenas. Me siento como quiero sentirme todos los días de mi vida. El evento hincha de orgullo mi corazón. Ver esa muchedumbre de gente apoyando la causa en un día tan señalado como lo es el ocho de marzo.
Madrid rebosa de unión. Sin ninguna barrera y deslumbrando esta preciosa ciudad.
En el final del recorrido mis compañeras me observan orgullosas. Subo las pequeñas escaleras hasta exponerme delante de más de trescientos cincuenta mil ojos. La Plaza de España en estos momentos está más preciosa que nunca. Llena de lemas y cánticos preciosos. Allí, delante de todo el mundo siento como la energía recorre mi cuerpo. Me acerco al micrófono y el silencio se adueña de Madrid.
-Hoy nos hemos unido. Sin mirar sexo o raza. Hoy, hemos derribado una barrera más. Estamos cada vez más cerca para alcanzar nuestro objetivo, la igualdad.-Siento como fluyen con absoluta calma, brindándome la tranquilidad que necesitaba.-No quiero más miedos. Quiero ser libre. Quiero ser mía. Pero sobretodo, quiero sentir como juntos conseguimos que este mundo sea mejor. Nuestras voces se alzarán y unidos lucharemos por todas aquellas que hoy no pueden. Aún existen hombres que matan. Todavía, a pesar de que el mundo avanza. Todavía tengo que esperar el mensaje de mi amiga: ya he llegado. Todavía tengo que escuchar cómo nos echan la culpa. ¿Cómo iba vestida? ¿A qué hora volvía? Todavía tengo miedo.-Noto como el nudo de la garganta tira de mí, pero esta vez no me impedirá hablar, esta vez no.-Tenemos que educar en igualdad, porque necesitamos romper con los estereotipos de género impuestos por la sociedad patriarcal, que nos maltrata, nos mata, y nos hace responsables. Alcemos la voz, como sociedad unida y justa, y luchemos por acabar con la lacra de la violencia machista. Porqué existe, porqué es real. Pero hombres y mujeres, de la mano, podemos acabar con ella. Condenad y visibilizad. Entre todos y todas, lo vamos a conseguir.
PARA LAS QUE YA NO ESTÁN. PARA SUS FAMILIAS. PARA TODOS LOS QUE LAS QUERÍAN.
VOLAD ALTO. NI UNA MÁS.
Muchas gracias a todas esas personas que han seguido la historia de Lía. Gracias por hacer posible todo esto. Gracias por alzar la voz con ella. Por luchar contra la violencia de género y ser parte del cambio.
Pero sobretodo por haberme apoyado desde el minuto uno, nos leemos muy pronto en mis nuevos proyectos.
Sois geniales.
Blackbirdz.
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El silencio de Lía (CORRIGIENDO)
RomancePodía calificar mi vida como perfecta. Un buen trabajo, amigos y el mejor novio del mundo. Samuel era cariñoso, atento y detallista. Pero todo cambió. Llegaron los golpes, los gritos y los abusos. Las cadenas que me ataban a él cada día apretaban má...