Megara pensó en hacer lo que le dijo...
Lo pensó, porque ella aun sentía miedo...
Pero verlo así...
No sabia el motivo de su enojo hacía ella, pero algo le decía que no era precisamente por ella aquel enojo.
Megara se acerco desnuda hasta el, estaba dudosa por sobre como actuar.
Lain de espaldas a Megara sintió como esta se movía por la habitación, pensó que hacia lo que el pedía, por lo que cuando sintió como esta le tomaba la muñeca se giro extrañado.
Aun estaba desnuda frente a el.
- Que haces ? - pregunto extrañado.
Megara que aun sostenía su muñeca pregunto - ¿Porque estas molesto?.
Lain no supo que decir a lo que ella preguntaba, no admitiría que actuó mal frente a ella - No estoy molesto - dijo bajando la cabeza. El no se avergonzaba, por dios, tendría que tener ojo con esa mujer, no quería que ella leyera su enojo consigo mismo en su cara.
- Ven - dijo esta vez Megara, armándose de valor lo guió hasta la cama, dejándolo de espaldas a ella - Recuéstate - le dijo.
Megara jamás había echo lo que estaba a punto de hacer, pero en cierta forma le sentó mal ver como el la rechazaba de un momento a otro, tal vez fue porque no se mostró dispuesta ante él. Sin embargo este matrimonio debía ser bien consumado, así el podría protegerla y ayudarla a vengar a sus padres.
Lain, que no se esperaba aquello hizo lo que Megara le pidió, si antes había estado excitado ahora lo estaba aun más, jamás mujer alguna había osado tomar las riendas en el ámbito sexual con él.
- Levanta la cadera - dijo Megara y a lo que el obedeció ella bajo sus pantalones. - Haz dicho que no serias gentil, por lo que esta vez lo haré yo - dijo Megara reuniendo todo su coraje y aunque dudosa, no sabia que más hacer a partir de este punto.
Lain al ver sus evidentes dudas dijo - Móntame - ¿como a un caballo? pensó Megara.
Aunque le parecía raro tener que montarlo como aun caballo, Megara se subió sobre el pasando una pierna por sobre su cuerpo para colocarla al otro lado y así quedar sobre el. Podía sentir la excitación de el bajo ella.
Lain la sujeto por las caderas aumentando la fricción entre sus cuerpos, aquel rose hizo temblar a Megara aunque esta vez no fue de miedo.
- Besame - pidió en un gemido Lain, aquel roce lo estaba excitando demasiado.
Megara acerco su boca a la de Lain para besarlo y este se dejo hacer, atrás había quedado el miedo en este momento ambos eran solo deseo.
- ¿Quieres intentarlo de nuevo? - dijo esta vez Megara terminando el beso, el roce que Lain había ejercido había logrado que ella se soltara.
- ¿Estas segura? - respondió Lain.
- Si - dijo Megara volviendo a besarlo.
Lain con maestría la levanto lo suficiente como para poder acomodarse en su entrada, la miro a los ojos, el rubor que cubría las mejillas de Megara fue lo que necesitaba para ver que esta vez había actuado bien. La dejo caer sobre si, hundiéndose en ella lentamente esta vez, llenándola de él - Marca el ritmo - Le dijo a Megara.
- ¿Como? - pregunto confundida esta.
Lain sujetándola de las caderas la volvió a subir y bajar lentamente sin salir completamente de ella - Asi... - dijo con voz ronca.
Megara hizo lo que le pedía Lain, comenzó a subir y bajar sobre el a un ritmo constante, pasado un rato el dolor ya había menguado, aunque la posición le permitía marcar el ritmo y determinar la profundidad que ella quisiera, la posición se le hizo cansadora, por su parte Lain se estaba volviendo loco con aquel ritmo constante.
- Por favor - dijo de pronto Megara rogando por algo que no sabia que necesitaba.
Lain conocedor de lo que pedía giro sobre la cama con ella encima y sin salir de ella, la dejo bajo él.
Volvió a besarla, mientras ahora era el quien marcaba el ritmo. Había urgencia en sus besos, ambos deseosos de alcanzar el clima.
Megara nunca hubiera imaginado que esto era lo que se sentía al entregarse a un hombre, había sido doloroso en un comienzo, pero ahora sentía una inexplicable sensación crecer desde su interior.
Lain acelero el ritmo al ver como megara comenzaba a tensarse, quería llenarla de placer y verla temblar de éxtasis frente a un orgasmo, quería ser el el causante de todos ellos. El sentimiento de posición que Lain sintió en ese momento fue abrumador.
- Déjate ir... - dijo Lain con voz ronca, empezando a sentir el clímax formándose en él por lo que aumentando la profundidad volvió a decir - dámelo Meg.
Megara sentía emociones formarse en ella, que jamás antes había sentido - Lain - grito contrayéndose, el acumulo de emociones, el éxtasis del momento vencieron a Megara quien aferrándose fuertemente al cuerpo de Lain se dejo ir.
- Así... -dijo Lain con voz ronca, disfrutando de las contracciones del orgasmo de Megara.
Megara sentía su cuerpo temblar, la explosión de sensaciones aun seguía junto con las penetraciones de Lain.
Lain por su parte sentía que su orgasmo estaba por llegar, por lo que acelerando el ritmo se dejo llevar gritando el nombre de Megara, se sintió a gusto estando dentro de ella, el sentimiento de posesión lo shockeo, el no era un hombre enamorado y no seria un hombre castrado por su mujer, por lo que dejo pasar un rato hasta calmar sus respiraciones - Dios.. - dijo saliendo del cuerpo de megara y acomodándose a su lado.
- A dormir - dijo Lain de pronto, colocandolos a ambos bajo las mantas para luego darle la espalda, dando por terminada la noche.
ESTÁS LEYENDO
Es cosa de tiempo.
Historical FictionCuando sientes que no encajas ni siquiera en tu cuerpo, pasas constantemente mirando hacia el suelo, escapando de todos incluso de ti misma, Megara estaba decidida a no intentar más o a intentar con todas sus fuerzas... pero seguir la corriente y so...