Capitulo 15

151 16 4
                                        




Querer mantener la calma, sin expresar lo que siento.

porque el corazón se enamora

incluso antes de yo saberlo...

porque he de mantenerme impasible, sin saber expresar...

sentimiento alguno,

porque ha de ser cruel mi destino, si injustamente te trate

que en tu corazón ya no existo.

* * * * *

La espera se hacia interminable y que su amigo Jonh lo molestara no hacia que esta se hiciera más amena.

- Lain, estas muy serio... deberías dejar de arrugar el ceño te hace ver mas temerario - se burlo Jonh.

La falta de formalismo entre ellos hacia sentir incómodos a todos los presentes. Se notaba su cercanía y amistad, dejando de lado a los demás... algo muy descortés para Eleonora.

- Señor Jonh, dígame ¿hace cuanto conoce usted a Lord Campbell? - pregunto Elenora incluyéndose a su conversación.

- Desde hace unos 20 años ¿no? - pregunto en dirección a Lord Campbell - podría decir desde que tengo memoria.

- Bastante tiempo - agrego Lord Campbell.

- Así parece - señalo Eleonora -  Lord Campbell ahora que su amigo ha llegado, espero considere la opción de alargar su visita a nuestro hogar. - Eleonora era inteligente sabia que el ganarse su favor haría que su padre tuviera mejor consideración de ella. por lo que aun temiendo ofender a su prometido agrego - su visita es de gran agrado y veo que ha traído algo de diversión a nuestro hogar - dijo sonriendole de forma cariñosa.

- Mi lady me temo que mi estancia esta condicionada por factores externos, debo volver a mi hogar para conocer a mi prometida.

- Prometida? -añadió sorprendida - Quien iba a pensar que Lord Campbell estuviese buscando esposa, habían rumores de que esto era imposible para usted.

* * * * *

¡y si después de tántas palabras,
no sobrevive la palabra!

- Megara, ahora me dirás todo... - dijo, dejando todo rastro de amabilidad de su rostro.

- No se... por donde empezar - dijo Megara, no era que no quisiera contarle de echo era inútil decir alguna mentira, pero no sabia como relatar los tormentos de aquella época y ademas expresarse de forma creíble porque no quería ser tratada como una niña mimada que escapo de casa.

- Por el comienzo - dijo tajante.

Megara comenzó a relatar su historia, desde la muerte de sus padres en aquel sospechoso accidente, el porque había escapado y el temor de que si decía su identidad real la devolvieran junto a su tía y primo.

- Hace algunos meses... mis padres murieron en un accidente, yo quede al cuidado de una tía por padre paterna y mi primo - A medida que contaba la historia Megara no pudo evitar llorar - Escuche a personal del hogar de mi primo decir que todo había sido planeado para quedarse con el dinero, porque había ocurrido justo en momentos en que mi primo había perdido todo por las apuestas - sorpresa se reflejaba en Lord MacLea, sin embargo Megara solo podía sentir impotencia, por sus padres quienes nunca habían echo algún mal a persona alguna - No había pasado mucho tiempo, aun ni siquiera había terminado mi luto, cuando me obligaron a asistir a fiestas casamenteras, se burlaban y me trataban como una moneda de cambio, me obligaban a casarme para deshacerse de mi lo antes posible... En una fiesta, me mantuve alejada de todos los hombres casamenteros, siempre pensé que los rumores sobre la muerte de mis padres eran infundados ya que tanto mi tía como primo no habían mostrado indicios de ser malas personas.

Las lagrimas de Megara brotaban a mares.

Injusticia y miedo habia sentido esa noche...

- Esa noche durante lo que quedaba de baile... y de vuelta en el carruaje... solo podía escuchar sus amenazas sobre deshacerse de mi a como de lugar, dijeron que si no podían casarme me harían desaparecer... Me asuste, recordé los rumores entre el personal y yo... solo pensé en mi vida... huí al día siguiente, traje conmigo unas pocas joyas de mi madre que sirvieron para pagar el barco... y el resto es historia que usted ya conoce.

Durante todo lo que duro el discurso, Lord MacLea se mantuvo en silencio, en ocaciones miraba con recelo y en otras con enojo. Si bien no se podía afirmar que el enojo fuera para con ella, Megara se sentía completamente culpable de haber abusado de la hospitalidad y pese a que estuvo como una sirvienta entendía que todos habían confiado en la veracidad de ella.

Los minutos del relato se hacían eternos, tanto para aquellos que eran parte de la conversación así como para aquellos que aguardaban.

- Entiendo - Dijo Lord MacLea luego de unos minutos en completo silencio.

- Mi Lord...- dijo Megara con miedo.

- Cuando llegaste a esta casa, te hice una simple pregunta.. recuerdas?

- Si mi Lord.

- Que si debia desconfiar o temer de ti... y dijiste que no...

-Lo se, yo...

- Y me contestaste con sinceridad - La interrumpió Lord MacLea - esto no es motivo para temer o desconfiar con respecto a ti, sin embargo me temo que ante los presentes esta noche ha pasado algo grabe.

- A que se refiere mi Lord?- Pregunto confusa Megara.

- Esta noche cuando has pasado por la cocina con lagrimas, se ha puesto en duda tu honor.

Es cosa de tiempo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora