- Tu siempre deseas volver a casa - dijo a modo broma Cailean.
- Esta deseoso de volver a las piernas de su mujer - añadió Morogh.
- Burlaos, pero cuando ustedes estén en mi posición serán peores... - dijo Ronald a la defensiva.
- si es que llegan a estarlo - dijo burlándose Daniel.
La complicidad que había entre esos cuatro era maravillosa, sin dudas eran un grupo que se amaba, pese a que no habían querido mencionar esas palabras.
Continuaron su camino, cada vez mas cerca de casa se podía sentir la tensión de Lain a su espalda, como si algo le estuviera inquietando.
La herida de Cailean no presento mayores complicaciones durante el trayecto y aunque este no había mostrado plenamente su gratitud, ahora la miraba con otros ojos.
El resto del camino trascurrió en silencio, sin embargo pese a que el animo entre los hombres de Lain era jovial, se notaba la ansiedad por la pronta llegada
* * * * *
La tan ansiada fortaleza no tardó en aparecer ante sus ojos, aquel enorme lugar, que había sido el hogar de Lain y ahora también suyo, demostraba ser una fortaleza impenetrable a simple vista, era hermoso a los ojos de Megara.
- Hemos llegado - dijo Daniel.
- El Castillo de Gloom - anuncio Lain, luego acercándose al oído de Megara dijo- bienvenida a tu nuevo hogar.
- Mi nuevo hogar - dijo Megara en un susurro, no había sentido que pertenecía a un lugar desde la muerte de sus padres.
Para Megara Lain, su ahora esposo era un mundo por descubrir, en ocasiones gentil y en otras hostil, sin embargo asumía que se su manera de actuar venía de experiencias y de lo que conlleva ser un Lord y ganarse el respeto de sus hombres.
- En la fortaleza podrán descansar y abastecerse de provisiones, para que puedan continuar su viaje - dijo Lain dirigiéndose al hombre que se había integrado en el camino a ellos, Kilcoy Castle.
- Gracias, mis hijas y yo estamos agradecidos con vuestra hospitalidad - respondió el hombre con semblante serio.
- Bien, continuemos- dijo Lain con un asentimiento de cabeza, estar con esa familia le hacía sentir extrañamente incómodo.
Cuando ya se acercaban a los pies de la fortaleza, lograron divisar a los sirvientes reunidos por la tan esperada llegada de su amo.
- Al fin has llegado hijo - dijo un hombre, que no aparentaba demasiada edad, era alto, fornido, imponente, con solo verlo Megara se sintió intranquila, en aquel hombre nada indicaba que era entrado en años salvo el pelo blanco de su cabellera - Justo a tiempo, Elaine esta aquí - dijo con una sonrisa en su rostro.
- Padre - respondió serio Lain hacia su padre, se podría decir que la tensión del momento se notaba latente - Esta es mi esposa - añadió volteándose y tendiendo su mano hacia mi - Megara - concluyo.
- Así que esta es la chica por la cual has desobedecido mis ordenes - dijo su padre con gesto serio, para luego mirar a Megara de pies a cabeza - no parece nada fuera del otro mundo - dijo con desagrado - hasta se podría considerar algo vulgar - dijo ofendiendo a Megara.
- Padre - dijo furioso Lain - no te permito que ofendas a mi esposa - dijo intentando calmar su visible enojo ante los comentarios mordaces de su padre.
Era de esperarse sin embargo, que su padre fuera desagradable con Megara ya que esta había arruinado los planes de una gran unión entre su hijo y lady Elaine Mackay quien además de belleza poseía una gran herencia, y que Megara no fuera mas que una niña promedio y sin fortuna que ofrecer, no resultaba una buena elección para el.
- No me permites? - dijo furioso - no me permites - grito - te has casado con esta insulsa, arruinando el futuro que tenia planeado para ti... todo por esta mocosa que ni siquiera tiene el coraje o valor suficiente para pertenecer a esta familia.
- Coraje? valor ?... acaso le has dado la oportunidad.... planes para mi?? solo te interesa volverte mas acaudalado de lo que ya eres - bramo furioso Lain - veo al parecer que mi esposa y yo no somos bienvenidos aquí - dijo finalmente Lain.
- Insolente... así es como le hablas a tu padre.
- Debo recordarte que eres quien me ha faltado primero el respeto - dijo Lain queriendo irse.
- Después de todo lo que te he dado, solo eres un desagradecido.
- Basta - dijo de pronto Megara, quien se había encontrado al margen durante toda la discusión - puedo aceptar que me denigre a mi, puesto que no soy poseedora de las grandes riquezas que usted deseaba, sin embargo aun no me conoce. Por otro lado debe recordar que no estamos solos - dijo poniendo al padre de su esposo en su lugar, haciendo que todos recordaran la presencia de la familia que los acompañaba.
- Insolente - dijo mirando a Megara sorprendido y a la vez enojado por la astucia e insolencia que esta mostraba - Disculpen el momento, siéntanse bienvenidos, sofia se atenderá de sus necesidades - dijo señalando a la sirvienta. Para Megara no paso desapercibido que tal era el enojo de el que ni siquiera se molesto en preguntar los nombres de las visitas - Adelante.
Entonces ellos para evitar seguir presenciando aquel momento incomodo decidieron entrar - gracias, vamos - dijo dirigiéndose a sus hijas, quienes al mismo tiempo en que estaban ingresando se toparon con una mujer salía de la casa.
Megara se sorprendió al ver a aquella dama, era hermosa de cabello rubio y alta. Todo lo contrario de lo que ella era, incluso sus ojos de color verde eran hermosos.
- Lady Elaine - dijo Lain observándola, parecía tan encantado ahora, que nadie pensaría que hace solo unos minutos se encontraba peleando con su padre, por la misma dama en cuestión.
![](https://img.wattpad.com/cover/59975233-288-k906730.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Es cosa de tiempo.
أدب تاريخيCuando sientes que no encajas ni siquiera en tu cuerpo, pasas constantemente mirando hacia el suelo, escapando de todos incluso de ti misma, Megara estaba decidida a no intentar más o a intentar con todas sus fuerzas... pero seguir la corriente y so...