- Esta muerta - Afirmo entonces James al comprender lo que insinuaba -Gracias al cielo tu estas bien... lamento no haber estado ahí para ti pequeña, debió ser un momento difícil.
James volvió a vestirse al ver a Megara incomoda, ya que esta mantenía la vista fija en el suelo. Aquel detalle lo hizo reír al ver la ternura de sus actos, pese a la conversación un tanto seria que mantenía con su hermana.
- Si, eso es algo de lo que no deberíamos hablar en un momento tan alegre...- dijo intentando cambiar de tema - Ahora que haz venido, podremos celebrar mi boda.
- Estas en lo correcto hermana... te ha gustado tu futuro esposo?
- Estoy contenta... y de todas formas no es como si hubiese podido negarme.
- Andrew sera un buen esposo - señalo riéndose James por el comentario de su hermana, pocas como ella se atrevían a decir lo que realmente pensaban... esperaba que esto no jugara en su contra una vez que estuviese casada.
- Ahora que estas aquí, padre querrá realizar la boda esta semana - dijo Eleonora cambiando tema nuevamente, para no decir lo que realmente pensaba de su compromiso.
Eleonora no quería casarse con Andrew, ella siempre había estado enamorada de John Carpenbell, pero su unión con este jamas seria aprobada por ser John el hijo bastardo del Lord Carpenbell, ademas de ser el menor de tres hermanos.
Su amor estaba condenado a no ser y lo había sabido desde siempre.
-Será mejor que bajemos, padre te estará esperando.
- Tienes razón, bajemos.
Mientras conversaban, Megara se encontraba a un costado ajena a toda la conversación que los hermanos mantenían, comprendía que en un reencuentro familiar lo mejor era no incomodar a los hermanos. Cuando Eleonora se dirigió hacia la puerta la siguió, y durante el resto de la tarde Megara se dedicó únicamente a realizar su labor de mantenerse junto a ella.
James por su parte no había dejado de incomodarla, la seguía con la vista a donde quiera que fuera y eso a Megara no le había gustado en lo más mínimo. Aquel joven solo la miraba como a un nuevo juguete y ella no permitiría que jugara con ella.
Durante el transcurso de esta tarde se llevaron a cabo los preparativos finales de la boda, la cual había sido fijada para dentro de dos días, todo estaba en caos, todos los sirvientes estaban concentrados en ordenar todo antes de la llegada de los Lores, así como también Lord MacLea había mandado a varias cuadrillas de sus hombres a repartir las invitaciones para la pronta boda.
Los invitados más cercanos hicieron llegar sus respuestas durante el transcurso de el día, todos afirmando su asistencia pues estaban deseosos de la futura unión de los clanes MacLea y MacNeil.
Esta unión sin duda sería fructífera y beneficiosa para ambos clanes en todos los ámbitos.
El día paso con premura, Mejara se dedico a ayudar tanto a la joven Eleonora como a alguna que otra sirvienta debido a que no daban abasto para una ceremonia de tal magnitud con la servidumbre que se encontraba, en varias ocasiones Megara debió pedir ayuda de los hombres del Lord para mover los muebles de la estancia principal y así tener mas espacio.
A cierta hora de la noche Eleonore decidió que era hora de ir a dormir, así que pidió a Megara que le preparara su baño y luego de este se fue a dormir. Sin embargo para megara el día no terminaba ahí, estaba bastante cansada pero no podía darse el lujo de ir a dormir. Ella aun debia ayudar con la organización del lugar.
Para cuando finalizo el día se sentía satisfecha con sigo misma, había logrado acercarse a gran parte de la servidumbre y guerreros del lugar, también había simpatizado con ellos y sus historias logrando hacer algunos buenos amigos.
Todos estaban exhaustos por el día ajetreado, muchos de los trabajadores apenas podían sentir el cuerpo debido a los dolores producidos por tanto esfuerzo, por lo que para cuando terminaron las labores a altas horas de la noche instintivamente todos se dirigieron en silencio hacia sus habitaciones.
Megara sentía a su cuerpo protestar, por lo que en cuanto llego a su habitación se desvistió y se lavo la cara en una fuente con agua, desenredo su cabello y se dirigió hacia su cama para dormir.
El día la había dejado tan cansada físicamente que apenas podía recordar todo lo que había dejado atrás, y por primera vez en mucho tiempo logro dormir plácidamente.
* * * * *
El sol entraba por la ventana y calentaba su mejilla.
Paz... así se sentía despertar ante maravillosa vista, los arboles y el sol en una perfecta combinación... reflejaban armonía.
Megara se vistió contemplando la vista de ves en cuando, se tomo gran tiempo para salir finalmente de la habitación y comenzar nuevamente el día con sus labores.
Comenzó su día encargándose del baño de Elonora y de que sus vestimentas estuvieran preparadas y a diferencia del día anterior, la joven desayunaría con su prometido y familia, por lo cual no debía preparar su bandeja de desayuno, sino mas bien debía acompañarla durante el desayuno.
Megara mantenía la compostura propia de una dama en la mesa, la conversación era escasa para las mujeres ya que los hombres estaban centrado en negocios y planes de inversión, el desayuno estaba siendo bastante incomodo para Megara porque no se podía dar el beneficio de opinar, por lo que estaba deseando que terminara pronto.
- Mi señor - entro apresurado uno de los hombres de Lord MacLea - Traigo un mensaje de Lord Campbell.
- Tráelo aquí - dijo tendiéndole la mano.
Lord MacLea se apresuro a leer el mensaje, mientras lo leía su cara demostraba asombro y contento declaro - Lord Lain Campbell se hospedara en nuestro hogar durante dos semanas, esta a unas horas de llegar por lo cual estará presente para la boda - era un honor tener a los Campbell en su casa.
- Tendrán que organizar y preparar todo para que la visita se encuentre cómoda durante su estancia - Agrego James dirigiéndose a una de las sirvientas - lo mejor seria asignarle la habitación junto a la mía, es una de las mejores.
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Es cosa de tiempo.
Historical FictionCuando sientes que no encajas ni siquiera en tu cuerpo, pasas constantemente mirando hacia el suelo, escapando de todos incluso de ti misma, Megara estaba decidida a no intentar más o a intentar con todas sus fuerzas... pero seguir la corriente y so...