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Pov Inuyasha:

Dormía plácidamente en mi cama hasta que la maldita luz choca en mi cara, como odio ser despertado así, nada más abro los ojos siento como mi cabeza quiere explotar, no recuerdo haberme dado ningún golpe en la cabeza para que me duela tanto.

Observé mi entorno y está no es ni mi habitación ni la de Sesshomaru, parece más la habitación de un hotel. Me senté en la cama pero el dolor en la cabeza empeoró un poco y en las caderas sentí una pequeña punzada. Moví mi mano derecha para acomodarme mejor pero chocó con algo y al mirar veo a Sesshomaru dormido a mi lado, se ve tan lindo.

- Sesshomaru... Sesshomaru- lo moví un poco para ver si estaba despierto pero no.

Me levanté a tomar una ducha ya que me sentía un poco viscoso y al caminar sentía como si me estuvieran  clavando unas agujas en las caderas, aunque el dolor es soportable; llegue al baño, y abrí la ducha relajandome al instante pero siento un líquido distinto al agua bajar por mi pierna izquierda, tocó y veo que es blanco y viscoso; recuerdo haberlo visto en alguna parte pero no me acuerdo dónde.

Mi cabeza hace click y recuerda haber visto este líquido en Sesshomaru cuando lo moví...pero no puede ser posible o si...veamos; me levanté con dolor en las caderas, ambos estábamos desnudos y cubiertos por esta cosa blanca...no, no, no, no, ¡es imposible!, si de verdad paso ¿porque no recuerdo nada?, ¡¿que diablos sucedió ayer?!

- ¿Inuyasha estás bien?- preguntó la voz de Sesshomaru sacándome de mis pensamientos.

- Sesshomaru...- dije en un susurro un poco lastimero, el se acercó y me abrazó, de verdad lo necesitaba- ¿Que pasó ayer?

A partir de aquí narro yo...

Una semana había pasado desde el cumpleaños de Inuyasha y todos habían quedado en una salida grupal al parque acuático.

- ¿Todos tienen lo necesario?- preguntó Aome al grupo de personas frente a ella antes de partir.

Todos anunciaron a coro que si y tomaron un bus que los llevaría a su destino. Después de unos hermosos 45 minutos de viaje llegaron y las chicas fueron a los vestidores a cambiarse.

Los chicos mientras tanto conseguían lugares y dejaban las bolsas en el lugar escogido.

- Ya se están tardando ¿no crees?- le preguntó Naraku a Miroku.

- No te preocupes, lo más seguro que están conversando sobre cosas de chicas que nos involucran- dijo recostándose en una banca y poniéndose unos lentes de sol; Inuyasha, Sesshomaru y Naraku lo imitaron y se recostaron a esperar a que las muchachas salieran de los vestidores.

Al poco rato salieron y llamaron la atención de los chicos quienes estaban de espaldas y se impresionaron al verlas; Aome y Sango traían puesto un bikini de dos piezas, la primera azul oscuro con estampado de nubes y la segunda negro, ambas con el pelo amarrado en una coleta, Kikyo traía un cuerpo entero blanco con el pelo en trenza, Kagura un bikini de dos piezas unidas por una banda de tela que le tapaba el estómago de color verde pasto y su típica cebolla con plumas, Rin traía un cuerpo completo con vuelos lila con adornos de flores y dos coletas.

La reacción de los presentes no se hicieron esperar y los chicos se quedaron mudos; Naraku y Miroku por la belleza de sus novias y las otras chicas y Sesshomaru e Inuyasha miraban con orgullo como unos padres a la pequeña Rin que se veía adorable... o eso pensaba Inuyasha ya que su compañero pensaba en aniquilar a todo el que se atreviera a hablar, acercarse, mirar o respirar el mismo aire que su pequeña prima.

Mi vecino, mi amor secretoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora