Cartas a papá.

01

Jane llegó a su casa después de clases y como de costumbre en la última semana, encontró a su madre vomitando.

A pesar de tener ya los dieciséis años y ser lo suficientemente madura para algunas cosas para el tema de sexo y embarazos era bastante ingenua, por no decir que casi no sabía nada sobre el tema, a excepción de la charla que había tenido con Joyce hace un par de años.

— ¿Mamá? — Preguntó entrando a la casa, y lo que la recibió fue el sonido de su madre en el baño. — ¿Mamá estás bien? — Dijo subiendo las escaleras lo más rápido que sus piernas le permitían.

— Sí hija, estoy bien. — Dijo saliendo del baño. Jane solo la miró con una de sus cejas levantadas.

— No puedes estar bien cuando llevas prácticamente toda la semana vomitando. — Dijo acusatoriamente. — ¿Ya le dijiste a papá?

— Si cariñp, él sabe, todo está bien. — Le dedicó una sonrisa.— ¿Tienes hambre?

— No, con Will almorzamos en el colegio, tengo que hacer mucha tarea, así que me voy a mi cuarto. — Dijo sonriente.

— Bien, en la cocina hay pollo y puré de papa, por si te da hambre.

— Okay. — Dijo entrando a su habitación.

(...)

— Y ¿tú que le dijiste?

— Que ya sabías, pero que no era nada grave.. — Le comentó Joyce a Hopper. — ¿Cuándo les diremos? Ya cumplí los tres meses, y bueno, no podremos ocultarlo por mucho tiempo más. — Dijo acariciando su no tan abultado vientre.

— No lo sé. — Dijo Jim pensativo. — Tengo miedo de como lo puedan tomar los chicos, en especial ella, ya sabes que es la más sensible.

— Lo sé, pero es alguien con quien va a aprender a convivir. — Dijo dedicándole una sonrisa delicada.

— Será mejor que se lo diga yo primero, a solas. — Dijo dudoso. — Ya sabes... Por aquello que sus poderes se salgan de control.

— Bien. — Suspiró. — Buenas noches amor. — Dijo depositando un beso en los labios de su esposo.

— Buenas noches.

Y así ambos se quedaron dormidos, sin saber lo que les esperaba el día de mañana cuando le dieran la noticia a Jane y al resto de la familia.