Esta vez no dejo de correr hasta que estoy fuera del territorio de nuestra manada. Necesito estar lo más lejos posible porque de lo contrario soy capaz de armar una buena.
Me detengo al llegar cerca de un manantial, es un lugar que descubrí un día que exploraba la zona. Me acerco a un árbol y clavo las uñas en la corteza, arrastrándola hacia abajo y dejando unos surcos profundos.
Odio sentirme de esta manera, como si estuviera apunto de perder el control pero es lo que pasa cada que me encuentro con mi padre. Cierro los ojos y respiro profundo. Mi lobo gruñe, exigiendo salir y correr libre pero no quiero darle el control, no quiero que mi parte animal salga en este momento, seria algo demasiado salvaje.
—¿JaeHyun?
Esa voz... ahora no, ahora no por favor.
—¡No creí que fuera a verte tan pronto!
Esta vez no puedo evitar que mi lobo reaccione. Me giro abruptamente dejando que mis ojos cambien de color. Mis garras y colmillos hacen acto de aparición.
Frente a mi esta el asqueroso vampiro con esos enormes ojos ambarinos bien abiertos por la sorpresa. Esta vez no trae puesta la sudadera roja, lo que explica porque no pude sentirlo acercarse. Su aroma es un tanto dulce, como a bayas y manzanas.
—¿Q-qué sucede? —retrocede un paso más al ver que no vuelvo a mi forma completamente humana.
—¿Qué haces aquí? —mi voz suena gutural y un tanto distorsionada, a lo que él se encoge aún más.— ¡Respóndeme!
—Esto, y-yo solo... —se pega contra un árbol y ladea la cabeza para mostrar su blanquecino cuello, dudo que lo haga intencionalmente, pero este gesto para nosotros significa sumisión. Mi lobo se relaja automáticamente.— ¿E-estoy en tu territorio?
Me alejo y respiro hondo sintiendo como mis colmillos se retraen y mis ojos vuelven a su color normal.
—No, y ya deja de encogerte, no voy a lastimarte.
Se endereza lentamente observándome con miedo. Si no fuera un asqueroso vampiro hasta me parecería adorable.
—¿Estas enojado?
—Si, pero no contigo. —una enorme sonrisa tira de sus labios.
Entonces me doy cuenta de lo extremadamente pálido que está, también tiene ojeras bajo los ojos y sus labios tienen un color azulado, como cuando un humano pasa demasiado tiempo expuesto al frío.
—¿Son ideas mías o pareces más muerto?
—Es que no he comido. —susurra con los ojos cerrados.
—¿No has comido desde que nos topamos el otro día? —Asiente. Tiene que estar bromeando, hace tres días que nos conocimos.
Siempre he sabido que los vampiros son tontos, pero este se lleva el premio, por mucho.
—Estas en un bosque —me recuesto en uno de los árboles tras de mí— y aquí hay muchos animales de los que puedes alimentarte.
—Ya sé, es sólo que me da lástima perseguirlos.
Es inevitable, se me escapa una carcajada y es impresionante la forma en la que logró que mi mal humor se esfumara. ¡Puf! Ya no está.
—Eres todo un caso ¿sabías?
—Lo siento.
Vuelve a bajar la cabeza y por una extraña y estúpida razón siento la necesidad de revolver su cabello. ¡Controlate JaeHyun! No se que mierda esta pasando conmigo, pero sea lo que sea es culpa de esa pequeña sanguijuela.
No es que sepa mucho de vampiros, porque no me interesa saber en lo más mínimo de ellos, pero según tengo entendido necesitan comer para tener todos sus reflejos al cien... es obvio que Do... que el asqueroso vampiro está empezando a desnutrirse. ¿Por qué simplemente no caza alga y ya?
—¿De verdad no sabes cazar? —Me observa por un momento y luego niega con la cabeza.
Quizá vaya a arrepentirme de esto, pero... ¡Maldita sea! No puedo simplemente ignorarlo, no cuando luce así de indefenso y desvalido. Estoy a punto de romper una regla de "oro" para los licántropos: NO AYUDES AL ENEMIGO. Aunque de igual, nunca he sido de los que siguen las reglas.
—¿Quieres que te ayude a buscar algo de comer? —Supongo que esa enorme sonrisa significa que si.— pero debes poner mucha atención porque no lo volveré a repetir.
—De acuerdo.
Esta vez soy capaz de leer sus movimientos, cuando sus brazos se estiran en mi dirección logro esquivarlos. Se me queda viendo con esos enormes ojos ambarinos y hace un puchero. Mi lobo se remueve inquieto... este vampiro nos hace sentir extraños.
—Te recomiendo que no hagas eso... —carraspeo, esto es tan incómodo— soy un hombre lobo, que no se te olvide.
—Puedes confiar en mí... no quiero hacerte daño.
Me cuesta mucho no reírme. ¿Enserio se piensa que pueda hacerme daño? Es tan... Ni siquiera tengo palabras para describirlo.
—Sólo no lo hagas ¿Entiendes?
—Si. —luce enfurruñado, como un gatito. Y de nuevo siento esa necesidad de hundir mi mano en su cabello.
—Sígueme.
No espero a que responda, simplemente sigo caminando hacia el frente, pensando en algún animal que sea fácil de atrapar y entonces... siento sus fríos y delgados brazos rodear mi cintura. El contacto es breve ya que me suelta casi al instante, pero es suficiente para dejarme paralizado.
Y como si fuera poco, lo escucho soltar una risita.
—¿Qué parte de no hagas eso no entendiste? —me giro y cruzo los brazos para tratar de lucir molesto.
—Es que no lo pude evitar.
¡Maldito vampiro! ¡Y maldita sonrisa inocente y adorable! Si no fuera porque mi lobo aún está en shock, le saltaría encima y le desgarraría la garganta. No se porque tengo el presentimiento de que este chupasangre es malo para mi salud mental.
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'LUNAS OPUESTAS' ─JAEDO
FanfictionJung JaeHyun es un tipo arrogante que sabe muy bien quien es. Es fuerte, habil, poderoso y la mayoría del tiempo es un cabrón. Pero eso es de familia, después de todo lo trae en la sangre porque está a poco tiempo de convertirse en el próximo alfa d...