'LUNAS OPUESTAS' ─JAEDO

𝐄𝐬𝐩𝐞𝐜𝐢𝐚𝐥

[TaeYong]

Estoy cansado y no se exactamente de qué. Podría ser de la soledad o tal vez solo estoy cansado de mi vida en general, trato a menudo de ser optimista y de convencerme a mí mismo que algún día seré feliz. El problema es que la felicidad no llega solo porque sí; mi abuela solía decir que la felicidad solo es de aquellos que la buscan y no se rinden hasta encontrarla. Supongo que quedarme aquí en este pueblo toda la vida no me ayudará a encontrarla, tampoco es como que la felicidad aparezca porque así lo deseo.

Extraño a mi abuela, ella era la única persona que me aceptaba tal y como soy, nunca me dio la espalda. No sé alejó de mí ni siquiera cuando se enteró de que me gustaban los chicos, es más, me defendió de mis propios padres quienes me odiaron por no ser lo que se supone que debería. Han pasado dos años desde que ella murió y cada día la extraño más. Es como si me hubieran quitado una parte importante de mí mismo.

Sacudo la cabeza, no tiene sentido seguir pensando en cosas tristes y menos en el trabajo... además desde hace poco tiempo ya no estoy tan solo. Desde que conocí a DoYoung las cosas se sienten menos vacías. Ese chico es todo un caso y tal vez pueda parecer que me estoy tomando demasiado a la ligera su sobrenaturalidad, pero es que ¿quién podría temerle a alguien tan inocente y dulce?

Siempre he estado interesado en cosas sobrenaturales, cualquier criatura que sea de fantasía, pero jamás imaginé que conocería a una y muchos menos a dos... aunque JaeHyun es intimidante y no sé porque pero creo que no le agrado. Creo que se pone celoso de mi amistad con DoYoung. ¡¿Un hombre lobo y un vampiro juntos?! Eso es genial, si ya de por sí para la sociedad humana las relaciones gay son algo anormal no quiero ni imaginar lo difícil y aterrador que ha de ser para ellos.

"—JaeHyun dice que soy su alma gemela" Eso fue lo que dijo DoYoung cuando me contó de su encuentro con JaeHyun y la verdad me sentí muy feliz por él. Si he de ser sincero también me dio un poco de envidia y me llevó a preguntarme ¿Qué se sentirá encontrar a alguien que esté destinado a quererte? ¿Qué se sentirá estar completo? Es probable que nunca llegue a saberlo.

—¡Tierra llamando a TaeYong! —Esa voz me hace volver a la realidad y recordar que estoy trabajando y no es momento de pensar en mi triste vida.

—Lo siento —digo y le doy mi mejor sonrisa.— ¿Qué me decías?

Ella es SeulGi mi compañera de trabajo, podría decir que somos amigos pero lo cierto es que fuera del trabajo no nos vemos. Me observa desde detrás del mostrador y sonríe. Es hermosa, con un largo cabello negro y piel blanca.

—Te decía que estas muy distraído.

—Lo sé, lo siento.

—TaeYong siempre estás en las nubes. —Ten aparece a mi lado. Él es muy reservado y no sonríe casi nunca pero es un buen compañero de trabajo. Además es muy guapo, tiene el cabello rubio y sus ojos son muy lindos. ¿Lo malo? Pues tiene novia.— Me da curiosidad saber en qué tanto piensas.

—¿Eh? En n-nada... son tonterías pero ya me concentro.

—¡Jum! —SeulGi infla las mejillas y entrecierra los ojos.— Sospecho que tu distracción es a causa de un chico.

¡Claro! El chico invisible. Se me escapa una carcajada y los dos me observan con confusión.

—No hay ningún chico. —trato de evitar la tristeza en mi voz, pero es imposible.

—Por ahora, ya verás que conocerás a alguien. —Ten me da una palmadita en el hombro y una pequeñísima sonrisa y, después se va a atender a una pareja que acaba de entrar. Ese gesto fue lindo, si tan solo Ten fuera gay.