Intentando no enamorarnos.

Capítulo 20: En paz...

NARRA MARÍA

-¿Piolín?- dije más feliz que nunca.

-Sí, así es- dijo creída.

-Dios mío, cuanto tiempo ¿3 años? Bueno, ven aquí- dije abrazándola.

-Sí, tres años y medio. Os extrañaba- dijo abrazándome fuertemente.

-Y Laura trabajando, ella ya estaría gritando- dije riendo.

-Sí, y ¿¡Lola!?- dijo gritando arriba.

-Aquí arriba, que sepas que yo no bajo...- dijo Lola.

-Vale, ya subo yo...- dijo Piolín corriendo.

Cuando llegó al cuarto, cogió a Lola y la alzó al aire:

-Suéltame bicho raro- dijo Lola, nunca le tuvo cariño desde el día en el que le quitó los caramelos.

-Eyy, relaja- dijo Piolín ofendida.

-Bueno, vamos al cuarto de Laura- dije tirándole del brazo.

-Bueno, ¿y ese Willy?- dije con cara pervertida.

-No es mi novio, somos amigos con...- me interrumpió.

-¿Ya ha habido roce?- dijo ella gritando.

-Shh, calla fiera... bueno ¿y tú con Frank?- dije, se me hacía raro decir eso.

-Bien, supongo...- dijo agachando la cabeza.

-¿Supongo?- dije sorprendida.

-Todavía no lo he visto- dijo riendo.

-Eso lo arreglo yo en cuestión de segundos- dije cogiendo el móvil.

-Escucha, no quiero verle todavía. ¿Gastamos bromas?- dijo feliz.

-Nunca pierdes tu alma malvada ¿no? Venga, hagámosle una broma a Laura- dije riendo.

-Que tenga una cita con Rubén en un sitio....- la interrumpí.

-Diciéndole a los dos que tienen que recoger un premio en un lugar a una hora exacta- dije chocándole la mano.

-Venga vamos- dije cogiendo el móvil y planeándolo todo:

-¿Sí?- dijo Rubén desde el teléfono.-Buenos días señor Rubén Doblas ¿cierto?- dijo Piolín con la nariz tapada.

-Sí- dijo él.

-Le quería comunicar que usted ha ganado un premio- dijo Piolín.

-¿De qué?- dijo sospechando.

-De... de ser el décimo mejor youtuber del mundo- dijo ella sin saber que decir.

-Sí... ¿sí? ¡Qué guay!- dijo él.

-Bueno, no se me emocione, a las tres de la tarde en el parque de las flores- dijo ella.

-¿De las qué?- dijo él confuso.

-De las torres- le dije a Piolín susurrando.

-¡Ahhh! De las torres, disculpe- dijo ella nerviosa.

-...- no contestó nada.

-.....- estábamos nerviosas.

- ¡Vale! ¡Hasta luego!- dijo él colgando.

-Ufff....menos mal- dijo Piolín.

-Ahora Laura...-dije marcándo.

Hicimos lo mismo pero, esta vez, sin fallos, al terminar, salimos corriendo hacia el parque. Después de treinta minutos, llegamos al parque: