Capítulo 39:¡La nariz!

33 3 0
                                    

NARRA RUBIUS

Noté mucha tensión en Laura desde que nos despedimos de Paula, escuché como varias veces maldecía cosas o hacía como si matara a alguien con sus manos.

-Oye ¿estás bien?- dije riendo.

-¿Qué? Ummm...no...osea sí, muy bien- dijo sin mirarme.

-Oye mírame- le obligué a que me mirase- no va a ocurrir nada malo entre Paula y yo, solo te amo a tí- la besé con ternura.

-Que cosas más bonitas me dices- se llevó la mano al corazón.

-¿No me merezco uno?- dije cerrando los ojos y poniendo morritos.

-Claro, espera, ahí perfecto, toma tu foto- dijo riendo y enseñándome la foto que me había sacado.

-Creo que me he enamorado, la pondré de fondo de pantalla- dije encendiendo el móvil.

-¿Te la paso?- dijo riendo.

-Sí, pero solo a mí- dije riendo.

-La he pasado por el grupo de todo arreglado, espero que no te importe- dijo corriendo.

-Ven aquí- dije corriendo detrás suya.

Empezamos a correr por la calle, la gente me miraba raro, aunque me suelen mirar peor cuando hablo con el móvil por la calle.

Llegamos hasta casa de Laura corriendo, se apoyó en la puerta y empezó a respirar.

-Rubius, vas a entrar y a saludar a mi madre- dijo sentándose.

-Claro, ¿pero no vamos muy rápido?- dije nervioso.

-Es buena moza- dijo riendo.

-Pues venga muyaya, levanta- dije llamando a la casa.

-Tengo llaves- dijo dándome un golpe.

-Y yo sentimientos- dije fingiendo llorar.

-Y son todos por mí, ¿verdad?- dijo amenazante.

-Sí- dije asustado.

-Bueno, bienvenido a mi tranquilo hogar- dijo abriendo la puerta.

Bueno, de tranquilo tiene poco. Nada más abrir la puerta escuché golpes, gritos e insultos.

-¿Qué ocurre aquí?- dijo Laura en el salón.

Se quedó petrificada delante de esa imagen, fui a su lado e inmediatamente corrí a ayudar.

Os explico, Lola estaba en un sillón sentada con las manos en la cara, María tenía la cara blanca por haber perdido mucha sangre de su nariz y la madre de Laura la tenía agarrada por el pelo.

-¿Mamá, qué haces?- dijo Laura agonizando.

-Mamá, la ha tirado al suelo por haberte dejado salir con un chico- dijo Lola llorando.

-¡Tiene 25 años señora!- grité agarrando a María.

-He dicho que no salgas con nadie, no quiero que sufras como yo- dijo la madre llorando.

-Tengo frío, n-no...no hospital- dijo María.

-¡Claro que sí! Necesitas ayuda- dije cargándola.

-So-solo...llama a mi her...mano- dijo tiritando.

-Voy- dijo Laura cogiendo el móvil.

Llevamos a María a la habitación de Laura, me quedé con ella junto a Lola la cual estaba aterrorizada.

-Lola, voy a estar bien, es solo la nariz- dijo riendo.

-¿Cómo puede salir tanta sangre de ahí?- dijo Lola riendo y secándose las lágrimas.

Intentando no enamorarnos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora