"¡Este ha sido un día de mierda!" Cami se tiró en el banco donde estaba yo sentada, esperándola. Estaba 15 minutos atrasada y no parecía contenta con ello.
"¿Qué pasó?"
"Ugh, el profesor Clapp es un imbécil, ¡eso es lo que pasó! No le gustó el progreso de mi equipo en el laboratorio este semestre y nos va a obligar a hacerlo de nuevo. Voy a pasar toda mi vida en la maldita librería."
Ella estaba de muy mal humor. "Eso apesta. ¿Por qué tienes que hacerlo de nuevo?"
Cami lanzó una mirada al campus. "Porque Heidi es una idiota que arruinó todo. Mi parte estaba bien, ¿pero a él le importa? No, por supuesto que no."
Me reí. "Bueno, ¿tú pensarías que a la familia del paciente le importaría si hiciste todo bien en OR pero Heidi lo arruinó y su ser querido fallece?"
Ella me hizo una cara. "Tu deberías estar de mi lado. ¿Por qué estás siendo tan lógica?"
Le sonreí. "Porque es requerido. ¿Entonces te vas a encontrar con tu grupo esta noche?"
Ella arrugó su nariz y sacudió su cabeza. "Diablos, no. Necesito un día alejada de toda esa gente. Ellos requieren demasiado de mi tiempo. Anoche llegué a casa recién a medianoche. Apenas pude hablar con Cole. Gracias a Dios pude mandarle algunos mensajes en secreto mientas Paul hablaba sin parar anoche."
Me reí. Me alegraba no tener ningún proyecto en grupo este semestre. "Así que, ¿eso sigue yendo bien?" Tomé un sorbo de té helado que había comprado en la máquina de refrescos.
Ella me dio una brillante sonrisa. "¡Sí! ¡Y tú estarás orgullosa de mí! Le envié un mensaje de texto luego que terminé de discutir con el imbécil de mi profesor y demandé que me dijera su nombre. Le dije que no íbamos a andar con vueltas por mucho más tiempo. Quiero saber el nombre que estaré gritando cuando acabe."
Escupí mi té. Buscando aire. Me di vuelta hacia ella mientras me daba unos golpecitos en la espalda. "Eso es desagradable, Lili. ¿Qué te pasa?"
"¡Dime que no le enviaste ese mensaje!" Le dije con voz ronca. Por Dios, Chris Hansen y una horda del FBI probablemente estarían descendiendo en nuestro apartamento mientras hablábamos. Tal vez debería llamar a Barb y decirle que nos venga a buscar. Podríamos esconder a Camila y luego explicar que ella era una simple, dulce e ilusionada chica quien pensaba que estaba hablando con Cole Sprouse, no con el niño con quien de verdad estaba hablando.
Cami terminó de golpearme y asintió. "Por supuesto que lo hice. ¿Qué crees que los dos sólo hemos estado hablando de poesía todo el tiempo?"
Oh, diablos. "Cami, ¿le estás enviando mensajes de texto sobre sexo? ¿Qué pasa si tiene doce años?"
Ella me miró. "Son tú y Barb quienes dicen que tiene doce años. Te he repetido incansables veces que no los tiene y creo que lo deberías saber. He pasado horas y horas hablando con él. ¿Por qué ustedes dos no pueden aceptar que sé lo que estoy haciendo?"
Levanté mis manos en un gesto de rendición. "¡Yo puedo! ¡Lo hago! Sólo que no me había dado cuenta de que había llegado tan lejos y quiero que tengas cuidado." Y no quiero que estés en un show de televisión con un montón de pervertidos. ¿Es demasiado pedir?
Ella suspiró y descansó su cabeza entre sus manos. "Lo soy, Lili. Sé lo que estoy haciendo. Él es el indicado, mi alma gemela. Sé que él no es Cole, ¿okey? Me llevó un tiempo darme cuenta y dejarlo ir pero lo hice. No me importa quién es, mientras sea mío."
Asentí. "Está bien. Siempre y cuando tú estés segura. Espero que él sea todo lo que tú quieres que sea."
Sus ojos brillaron y ella sonrió. "Oh, él lo es, Lil. ¡Estoy segura de eso! ¡Le conté sobre Jared y casi se muere! Él quiere patearle el culo por no saber cómo tratar a una dama. Me dijo que si yo fuera de él, él me cuidaría. Quiere bailar conmigo bajo las estrellas. ¿Cuán perfecto es eso?"
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A través de un juego
FanfictionLili Reinhart estudiante de literatura enamorada de Cole Sprouse un actor un día empiezan a jugar Words With Friends donde comienza esta linda historia.....