A través de un juego

Words With Acquaintances

Luego de llorar en los brazos de Barb, fui al baño y lave mi rostro. Lucía como la mierda pero me estaba reponiendo de unas vacaciones inolvidables. Probablemente no iba a ser la única que se vería mal. Sólo sería la única que no luciera con resaca. Oh, y quien estaba saliendo con el hombre más sexy de la tierra y a quien tuvo que decirle adiós durante cinco semanas. No, nada de adiós. Nos veremos pronto. Eso sonaba mucho mejor, incluso si las cinco semanas no fueran tan pronto. Pronto era en unas pocas horas, tal vez un día. Tal vez unos días. No unas semanas y semanas. Estúpida universidad.

"¿Ya terminaste de lamentarte?"

Me giré hacia la puerta y vi a Cami, quien lucía perfecta con su vestido amarillo. "¿No está un poquito frío para eso?" Le pregunte. Ella me hacía lucir como, como una estudiante universitaria. Eso era lo que era, durante estas semanas. Ella no lucía así, aunque lo fuera.

"Usaré un sweater. Y no puedo evitarlo. Me siento feliz y tengo ganas de usar esto." Giró un poquito y sonreí. "Ahí está."

"¿Qué?"

"Puedes sonreír sin él." Y la sonrisa se fue. "Okey, puedes sonreír accidentalmente sin él"

Rodé mis ojos y arreglé mi coleta. "Discúlpame por no sentirme bien ya que no veré a mi novio durante semanas."

Camila se acercó a mí y deslizó su brazo por mi cintura. "Lo sé. Pero él llamara y te enviará mails y todas esas cosas. Sé que no es lo mismo, pero es como se conocieron en primer lugar, ¿verdad?"

Eso era cierto. "Es verdad. Pero ahora que he estado con él, es tan diferente. Siento que falta una parte de mí."

Cami sonrió. "Bueno, no sabes lo afortunada que eres al sentirte así. Deseo alguna vez sentirme así por alguien. Algún día lo haré."

Cierto. Es mejor no lamentarse frente a la persona quien no tiene a nadie ahora y no era feliz hace dos semanas atrás. Piensa, Lili. "Lo siento Cami, tienes razón. Sé lo afortunada que soy"

Ella tiró de mi coleta. "Bien. Ahora vamos a clases. Sólo tenemos unas semanas para esta mierda de llegar en hora. Vamos"

XOXOXOXOXOXOXOX

"¿Qué haces, perra? ¿Por qué luces como si hubieran atropellado a tu gato? ¿Estuviste de fiesta durante toda la semana o qué?"

Miré a Vanessa quien me encontró luego de clases. Ella lucía como si hubiera pasado toda la semana en Hawái, en una playa, o en una cama solar. En serio, ¿era posible volverse de ese color? Hacía que pareciera un fantasma. "O que. No estoy lista para volver a clases." Le respondí, intentando no quedar ciega por su bronceado dorado/naranja que parecía brillar en su piel.

"Mierda. Dímelo a mí. Cabo estuvo increileeeeee. Deberías haber ido. ¡Me acosté con este tipo que un jugador de béisbol! ¡Se llama Michael y estoy enamorada!

Cierto Vanessa siempre se enamora de alguien nuevo. Duraba hasta que aparecía otro nuevo. ¿Jugador de béisbol? "Eso es genial, ¿lo verás de nuevo?"

Vanessa se encogió de hombros. "Tal vez, Intercambiamos números de teléfono pero él tenia que volver con su equipo a jugar a algún lugar que no recuerdo, así que no lo sé"

Sí, eso era amor. Apenas, apenas no rodé mis ojos. "Suena increíble."

"¿Has hablado con Mad? Ella se comprometió supongo que tenía razón sobre Travis pidiéndole matrimonio"

Ella sonaba como si estuviera discutiendo una cita con el odontólogo o algo así. "¡No! Eso es increíble. Tendré que llamarla. Todavía no he revisado mis mensajes." Había evitado a todo el mundo mientras estuve con Cole y ahora quería hacerlo de nuevo. Vanessa ya estaba molestándome y no habían pasado ni dos minutos.