Juice

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¿De verdad lo estaba haciendo? Sí, sí lo estaba. Quería ver a Cole más que nada, y quería que él me viera, así. Me miré en el espejo y ajusté las tiras en mis hombros. Esto era una locura. Papá me mataría si supiera lo que estaba haciendo. Barb me aplaudiría. Tomaría las opiniones de Barb en lo que se refiere a lo sexual. En mi opinión, lucía bien. Sospechaba que Cole estaría complacido.

Tomé mi computadora y me conecté a Skype, enviándole una invitación a Skeletor17. Quería contactar con él. Menos de tres días. Podía lograrlo, especialmente ahora que lo vería y lo escucharía al mismo tiempo.

Di un paso atrás de la computadora cuando escuché el timbre que me había aceptado. Quería darle el máximo impacto y tomarme mi tiempo para revelarle mi sorpresa. Esperaba que lo amara.

"¿Bebé?" Sonaba como si estuviera a punto de explotar. Era tan lindo. Amaba lo mucho que me deseaba. Me hacía sentir poderosa.

Me reí mientras movía mi pierna hacia la pantalla de la computadora; apoyándolo lentamente contra el colchón y dándole un primer plano de mi pie. Sabía que lo enloquecería.

"Lils, me estás provocando." Se quejó. Me reí ante su ansiedad.

"¿Nunca escuchaste hablar de la anticipación?" Le pregunté.

"He estado ansioso anticipándote desde que me fui ayer por la mañana." Me dijo. "Han sido treinta y seis horas, bebé. Eso es mucho tiempo." Demasiado, demasiado tiempo. Tenía razón. Además, me estaba privando de ver su hermoso cuerpo y rostro. Esto estaba mal.

Me agaché frente a la computadora y ahí estaba, demasiado sexy en una remera y boxers. Lo hacía sin esfuerzo, pero no podía guardarle rencor ya que él era mío. "Sí, ha sido demasiado tiempo." Le dije, sentándome en la cama y dejándolo que me vea en toda mi gloria. ¿Era gloria? No lo sabía, pero la mirada en su rostro no tenía precio. Sus ojos se agrandaron, su boca se abrió y parecía que se estaba babeando. Sí, diría que este atuendo causó furor.

"Lils." Logró decir, mientras me miraba. Dios, ¿hacía calor aquí adentro? Tenía el mismo efecto en mí cuando estaba en mi cama y estando a kilómetro de distancia. Esos ojos verdes parecían que me estaban devorando. "Joder, bebé, luces increíble."

"Creí que te gustaría." Le dije. Todavía seguía impactada del efecto que tenía en él, el mismo efecto que él tenía en mí. ¿Cómo era posible que tuviera tanta suerte? Tal vez toda la mierda que pasó con mi mamá y con Thomas me ganó unos puntos en el karma, ¿pero tantos? No lo iba a cuestionar. Tenía más de lo justo y estaba bien con eso.

"Gustar es la palabra incorrecta, sexy. Me encanta. ¿Lo usarás para mí este fin de semana?" Lucía tan entusiasmado, como un cachorrito. Era la cosa más adorable.

Me reí y lo estudié. "Todo el tiempo que tú quieras." Sospechaba que no duraría mucho.

"Será un gran placer quitártelo, bebé." Dios, sí. Placer para mí y para ti, Cole.

"Estoy segura que tendré algo de placer en eso, también."

"Nunca lo dudes, hermosa. Me aseguraré que lo disfrutes." No tenía preocupaciones. Mi cuerpo estaba un poco sensible pero ya respondía a su rostro, su voz y sus promesas.

Estaba demasiado lejos. Me agaché y tomé la computadora de la cama para colocarla en mi falda. Se sentía un poquito más cerca. "Estabas demasiado lejos."

Frunció el ceño. "Estoy demasiado lejos. Te extraño tanto, Lils."

Me mataba, de verdad. Mordí mi labio e intenté contener las lágrimas que amenazaban con salir ante esas dulces y simples palabras. "Yo también te extraño, Cole. Es raro porque hemos tenido poco tiempo juntos pero se siente como si una parte de mí se ha ido."

Cole asintió. "No es raro, Lils. Somos nosotros. Encajamos así que es cierto que falta una pieza cuando no estamos juntos. Has estado en mi mente desde el momento en que me fui, y obviamente estuviste en ella cuando estuve contigo." Eso esperaba. Eso me hizo reír y mi mente se fue a otras cosas que pasaron cuando él estuvo aquí.

"Obviamente yo estaba en algo cuando tú estuviste aquí."

Sonrió. "Y te quiero así de nuevo, bebé. Especialmente vestida así."

Le sonreí. "Entonces más vale que traigas tu lindo culo cuanto antes."

"Sesenta y cinco horas y contando, bebé. Falta menos." Es cierto. De mientras, pasaríamos un poco el tiempo.

"Ir de compras con Barb y Cami mató un poco el tiempo. Las clases no ayudan porque me aburro y pienso en ti." Y esos pensamientos me metían en problemas.

"¿Y en qué piensas, Srita. Reinhart?" Se acercó y parecía muy interesado en saber mi respuesta. Era tan lindo cuando quería algo.

"¿Te gustaría saber?"

"Creo que lo pregunté, así que sí, me gustaría saber." Había un tono en su voz que lo hacía demasiado sexy.

"Un poco demandante, ¿verdad?" Su ceño fruncido se transformó en una sonrisa. Le diría todo lo que quisiera saber con esa mirada. "Bueno, hoy estaba pensando en las cosas que iba a comprar y en tu rostro cuando las veas."

Su sonrisa se tornó más felina. "¿De verdad? ¿Estabas pensando en mi reacción cuando debías estar prestando atención a tus profesores? Señorita Swan, eres una traviesa."

Eso me recordó el conjunto de colegiala que había comprado. De todas las cosas que había comprado, sospechaba que ese conjunto lo enloquecería.

Sus ojos verdes me penetraron a través de la computadora. "¿Qué te inquietó tanto, bebé?"

"¡Ya verás!" Chico, ya verás. Las imágenes de él agachándome sobre un escritorio hicieron que me mojara.

"Oh, Lils, eres una gran provocadora. Tendré que sentarte en mi falda y darte un par de nalgadas cuando estemos solos." Oh, sí, esa es una de las cosas que tengo en mente, pero no la primera, bebé. La primera cosa que necesito son tus manos, tus labios y tu hermosa verga.

"Mmm, tengo mejores usos para tus manos cuando estemos en la cabaña."

Sentí un gruñido y fue directamente hacia mis partes. ¿Por qué no estaba aquí y ahora? Lo deseaba tanto que no creía que pudiera soportarlo.

"¿Sí? ¿Qué quieres que hagan estas manos, Lils?" Me mostró sus perfectas manos, como si no las conociera de memoria. Las quería sobre mí, en mí y por todo mi cuerpo. Lamí mis labios y recordé como se sentían cuando se movían por mi cuerpo. Iba a hacerlo. Iba a mostrarle qué haría si estuviera aquí conmigo.

"Podría mostrarte." Le dije mientras movía mis manos por la sedosa tela, tomando mis senos y apretándolos. Cerré mis ojos e imaginé que eran sus manos, pero no podía ver su rostro. Dios, deseaba poder tocarlo. Mis manos eran buenas, pero eran una pobre imitación de las suyas. "¿Qué quisieras que mis manos te estuvieran haciendo, si las tuyas me estuvieran tocando aquí?" Apreté mi otro seno y toqué mi pezón con el pulgar. Se endurecieron y miré sus ojos agrandarse y su lengua salir. Oh, sí, hermoso chico, desearía que tus labios estuvieran en mí.

Cole se movió y dejó su computadora a su lado, dejándome ver más de su cuerpo sexy. Puso su mano en su verga. "Quisiera que tus manos estuvieran aquí, bebé."

Dios, sí. "Allí estarían, Cole." Tenía que mostrarle más, así que alejé la computadora, para que pudiera ver lo que estaba por hacer. No podía creer lo que estaba por hacer, pero era él. Él hacía que quisiera tocarme para él. Llevé mi mano hacia mi estómago y hacia abajo, donde más lo quería. Me toqué por encima de la tela y vi que Cole tragó en seco. Sentí que su mirada me quemaba. Era una quemadura buena y quería más. "No estoy usando nada debajo de esto, sabes." Le informé, deseando que estuviera aquí para que pudiera verlo por él mismo.

"No lo sabía. ¿Te tocarías, Lils?" Su voz ronca de deseo me hizo calentar más.
Lo haría si él devolviera el favor. Lamí mis labios para hacérselo saber. "Lo haré si tú lo haces, Cole. ¿Tienes mi loción?"

No me contestó verbalmente. Se inclinó y mi botella estaba en sus manos al instante. Me hizo reír lo cual lo hizo sonreír. ¿Cuán tierno era, con mi loción al lado de su cama? ¿Ya la habría usado? Era tierno y caliente. Tenía lo mejor de los dos mundos con Cole. "Al lado de mi cama, Lils. ¿Tienes alguna duda?"

En realidad, no. Conocía a mi hombre. "¿La has usado?"

"No, por lo menos no para masturbarme. La he olido una o dos veces." Sonrió. "Quería sugerirla usarla antes, pero llegó mi madre." Bloqueado por su propia madre. Me hizo reír. "¿Disfrutaste que tuviera mi tercer título?"

"En parte, pero no cuando nuestro potencial tiempo de juego es interrumpido." Eso era inaceptable. Aunque desde luego, había estado en público, así que de todas formas no era posible. "Por supuesto, yo estaba con Barb así que de todas maneras no hubiéramos podido haber jugado."

Él rio y arqueó una ceja. "Oh, no lo sé, bebé, podrías haber intentado estar en silencio en un probador mientras te decía lo que quería hacer contigo." Oh, diablos. Probablemente me hubieran echado de la tienda en tiempo récord. Aunque no me hubiera importado. "¿Me hubieras dejado entrar al probador contigo Lil? ¿Para ayudarte a encontrar algo de tu talla?"

Diablos. ¿Cole conmigo en un probador mientras yo me probaba cosas sexys? Eso era… diablos. Iba a hacer combustión próximamente. "Cole." Susurré mientras deslizaba mi mano debajo de mi braga y comenzaba a tocarme. Estaba tan mojada. Cole respondió al quitarse los boxers y ponerse loción en su mano.

"Imagínate si te hubieras probado eso conmigo sentado allí mirándote, Lil. ¿Todavía tienen espejos en esos probadores?"

Oh, Dios. Un montón de espejos. Mirar a Cole mirarme. "Sí, uno grande que va desde el piso hasta la puerta y otro mediano en la pared."

Cole comenzó a tocar su verga con su mano derecha. Lo miré por un ratito pero me di cuenta de que yo podía mirarlo a él pero él a mí no. Levanté el conjunto para que pudiera verme tocarme. Cole hizo un gemido sexy y comenzó a tocarse más fuerte.

"Entonces cuando te lo pones, tengo que tocarlo, para sentirlo suave en tu piel. ¿Te gustaría eso, Lil?"

Um, diablos, sí. Logré decir un "sí" mientras pasaba mis dedos por mi clítoris. Podía sentirme calentarme más.

"Mmm, pasaría mis manos por tus costados, sintiendo como se amoldan a tu cuerpo perfecto. ¿Tienen sillas allí?" Sillas. Sí, tenían. Él podía estar sentado allí conmigo, tocándome como yo me estaba tocando ahora. "Estaría sentado ahí, tocándote; a tus senos, a tu estómago, a tus piernas. Te tocaría la vagina mientras tú estás allí parada, modelando para mí, mordiendo tu labio como lo estás haciendo ahora, bebé."

¿Estaba mordiendo mi labio? No lo sabía. Él era tan sexy. Cuando me hablaba así, era mucho más caliente. Sus palabras me mataban. Sus fuertes dedos se tocaban como un experto. Nunca antes había estado tan celosa de sus manos, las adoraba, pero ahora quería tomar su lugar con las mías. O mis labios. Con ambos.

"Sacaría mi verga, Lil. No podría sólo tocarte, luciendo así. Necesitaría cogerte."

Sí, me hubieras cogido allí mismo, con Barb y quién sabe quien cerca. No te detendría. Deslicé dos dedos en mi interior. Eran pobres sustitutos de su verga, pero era lo que tenía de momento.

"¿Me dejarías cogerte en el probador, Lil?" ¿No lo estabas haciendo ya? Sí, tendrías que cogerme en el probador, Cole. Lo necesito.

"Dios, sí." Metí y saqué mis dedos y moví mi pulgar sobre mi clítoris como él lo haría. Extrañaba sus toques.

"Siéntate en mí, Lil, tómame contigo." Tan caliente. Gemí fuertemente mientras me imaginaba deslizándome en su verga dura, llenándome mientras la gente pasaba a pocos metros de nosotros. "¿Puedes vernos en el espejo, bebé? ¿Puedes verte montándome?" Oh, sí. Espejos. Espejos en cada lado, mirándome montar a este hermoso hombre. "¿Cuán sexy es eso, hermosa? Sabiendo que hay gente alrededor. Tienes que estar callada, pero no quieres estarlo, ¿verdad? No con mi verga en ti."

"Tan duro." Logré decir. Sería tan difícil estar callada, pero lo haría porque lo deseaba. No emitiría sonido si me cogiera en el probador.

Los ojos de Cole miraron mi cuerpo mientras se masturbaba más fuerte. "Mira lo hermosa que eres, bebé. Montando mi verga mientras usas ese conjunto sexy, mis manos en tu culo, apretándolo mientras te penetro."

Oh mierda. Estaba cerca. Sus palabras me estaban matando, como la imagen de nosotros dos en ese cuartito, intentando estar en silencio mientras cogíamos. "Sí, Cole." Logré decir.

"Alguien golpea nuestra puerta, preguntando si necesitas algo. ¿Necesitas algo, Lil?"

Que se jodan. Tenía todo lo que quería. Cole era todo lo que quería. "Sólo tú. Sólo tú, Cole."

Él gruñó. Tan sexy. "Es cierto, Lil. Me tienes. Todo de mí, duro y grueso dentro de ti. ¿Puedes sentirme?" Sí, podía. No había pasado tanto tiempo. Todavía podía sentirlo dentro de mí si quería. Y lo hacía. "¿Te gusta saber que hay una mujer, a sólo unos pocos metros, que no tiene idea de lo que está sucediendo en el cuarto?"

Sí, sí eso era tan caliente. No me importaba si nos escuchaban. Que escuchara lo que me estaba haciendo. Logré asentir mientras sentía que algo comenzaba a encenderse en mí. "Eres una chica traviesa, bebé. Aprieto ese culito más fuerte mientras tú rebotas en mí, tus hermosas tetas en mi rostro. ¿Quieres que las chupe, amor?"

"Dios, sí." Sus labios… los necesitaba en mí.

Él rio. "Deslizo las tiras por tus brazos, liberando tus perfectos senos, chupando fuertemente el pezón izquierdo. Sabes increíble, Lils."

Eso fue todo. Mi vagina apretó mis dedos y tiré mi cabeza hacia atrás mientras el orgasmo me consumía. Cole acabó luego de mí, su semen golpeando su pecho. Quitó su remera mientras se calmaba, dándome una sonrisa satisfecha. Era tan hermoso. Me quitaba el aliento, de verdad.

"Mierda, Lils. Eres tan hermosa."

¿Estaba bromeando? Él era el que me quitaba las palabras. "Tú eres el hermoso. El sexy e increíblemente hermoso. Cole… Dios."

Él rio. "¿Qué puedo decir, bebé? Tú sacas mi lado exhibicionista."

Y él en mí. De verdad no me importaba si nos atrapaban. Valdría la pena totalmente. "Puedo ver los titulares. Cole Sprouse arrestado por indecencia pública, enloquece en un probador."

Cole sonrió. "Por lo menos eso sería algo por lo que a Dylan nunca lo agarrarían." ¡Ha! Dylan estaría tan enojado.

Sacudí mi cabeza. "Eres tan malo."

"Tú eres la mala, bebé. Mira tu vestuario. ¿Cómo se supone que sea bueno cuando estás usando eso?"

Sabía que le gustaría. "Se supone que tienes que ser muy bueno cuando lo use. Demasiado bueno."

Su sonrisa me mataba. "Puedo hacer eso, bebé."

"Sé que puedes. Dios, lo que me haces con tus palabras. Creo que nada podría mejorarlo si no lo vivo en persona."

"Va a suceder eso y mucho más Lils." Él prometió.

Gracias a Dios por eso. "Cuento con eso.

Cole se recostó contra el cabecero y me miró. "Yo también, cariño." Ese era un apodo tan tierno. "Así que, ¿fue tan malo lo que pasó con tu papá?"

Hice una mueca. "No fue horrible. No gritó mucho, salvo la primera vez, cuando le dije que te había dado información personal a través de la computadora." Me mataría si supiera lo que acabo de hacer, aunque, moriría de la vergüenza si mi padre se enterara. "Creo que si vienes para la graduación mejoraría las cosas y evitaría que fuera a la cabaña a vigilarnos." Él sabía que no me podía prohibir ver a Cole, pero sabía que se sentiría mucho mejor si lo conociera y quería que él estuviera feliz por mí.

"Si me conoce y no me odia…" Cole lucía nervioso. "¿Irás a Berlín conmigo?"

¿Estaba hablando en serio? Reí. "¿De verdad acabas de preguntar eso? Quiero pasar todo el tiempo que pueda contigo antes de comenzar de nuevo las clases. Esperaba volar contigo si vienes a la graduación." Más tiempo juntos. Y en un avión. Tal vez podríamos… contrólate, Lili.

"Absolutamente, bebé. Sólo dame las fechas y me aseguraré de que esté hecho."

Él era increíble. "Siempre dispuesto a complacer. Se lo mencioné a Cami y a Barb…" ¿Cómo era posible que le pidiera más?

"Lil, ¿quieres que vayan con nosotros?"

Por supuesto que sabía lo que iba a decir. "En parte. Quiero decir, creo que mi papá estará más feliz y creo que eso le demostrará a Cami que aunque esté contigo no la estoy dejando atrás ni nada. Ella ha estado mucho mejor desde que tú viniste, y sé que está triste, viéndonos a Barb y a mí tan en sintonía con ustedes. Me gustaría incluirla si pudiera."

Cole sonrió. "Dulce chica, por supuesto que puedes. Dylan estaría en la luna si Barb fuera y me encantaría que tengas compañía." Frunció el ceño. "Es egoísta de mi parte querer tenerte sólo para mí. Estaré trabajando durante interminables horas y tú estarás sola todo el día. Tengo que tenerte allí, bebé."

¿Cómo podía pensar que era egoísta? ¿Este hermoso hombre que estaba dispuesto a llevarnos a mis amigas y a mí a Europa? "Cole, ¡no es egoísta!" Le dije. "Quiero estar contigo, aunque sólo te tenga por las noches y durante los fines de semana. Tomaré lo que pueda. Por favor, no digas de nuevo que eres egoísta. Eres la persona más generosa que he conocido."

Se encendió ante mis palabras. "Te daré lo que sea, Lil. Y prometo tener tiempo libre cuando estemos allí. Le diré a Dylan que haga mal las tomas si tengo que hacerlo, para demorar las tomas."

¿Cuán lindo era? Tiré mi cabeza hacia atrás y reí. "No lo harás, Cole Sprouse. Harás tu trabajo y lo harás bien y yo te estaré esperando cuando termines."

"Okey, bebé, ese será mi soporte durante días."

Me reí. Pobre chico. "Creo que sobrevivirás."

Él sonrió. "Sé que estoy siendo tonto, pero quiero tener lo más que pueda de ti antes de que comiences las clases en septiembre."

"En realidad, es a fines de agosto." Maldita universidad por comenzar tan temprano y alejarme de mi novio sexy.
"Quieren que haga una película en Londres en septiembre."

Mierda. ¿Estaríamos tan alejados? ¿Por cuánto tiempo? Intenté no mostrar mi decepción. "¿Qué película?"

Cole se encogió de hombros. "Todavía no tiene título, una pieza inglesa de época con un montón de actores geniales. Colin Firth, Helen Mirren, Kate Winslet." Eso era increíble. Estaba emocionada por él. Por su carrera. "Roberto cree que es material de Oscar. Todavía no lo he leído."

"Eso es genial, bebé." Además, luciría caliente con ese vestuario. "No puedo esperar a verte con ropa de época. ¿Tendrás acento?"

Él rio, ¿pero qué podía decir? Los acentos eran calientes. "Creo que sí. Llevaré el guion a la cabaña. Creí que te gustaría leerlo conmigo."

¿Quería compartir su guion conmigo? ¿De verdad? Eso sería increíble. "¡Me encantaría! Suena divertido."

La sonrisa de Cole era contagiosa. "Leeré mi parte con acento para ti." Oh, Dios. Probablemente lo atacaría antes de llegar a la página dos. De alguna manera, creo que no le importaría. "¿Te gusta, verdad?"

"Los acentos son sexys."

"Y tú también, señorita Reinhart." Mierda, sonaba como Colin Firth. Me enrollaría y moriría de placer. "¿Necesito preocuparme de perderte por algún europeo este verano? Tal vez deberías quedarte en casa."

Como si tuviera algo que temer. "Es la combinación del acento y tú, Cole. Tu voz…" Me dio un escalofrío de lo sexy que era. "Probablemente podrías hablar como el hombre de las cavernas y aun así me excitaría."

Él rio ante mi ridiculez. No me importaba. Era caliente sin importar el porqué. "Eres tan malditamente linda. Trabajaré en mi acento del hombre de las cavernas para ti." Tirando de mi cabello, tirándome sobre su hombro, ¿llevándome y poseyéndome? Mierda, sí.

"Me malcrías." Le dije.

"Recién he comenzado, bebé."

Él era increíble. "Me encanta como suena eso."

"A mi también." No pude contener el bostezo. Apestaba que lo extrañaban tanto que no había podido dormir bien el lunes por la noche. "Necesitas dormir, cariño."

"Lo sé, pero no quiero." Sentí que hacía un puchero pero no pude evitarlo. Quería más de él.

"Lo sé bebé. Yo tampoco quiero, pero hablaremos mañana, y estaremos a un día de volver a estar juntos."

Sí, un día más cerca. Esa era la mejor parte de dormir. Gastaba tiempo y lo acercaba más a mí. "Es cierto. Tal vez debería dormir todo el día hasta que se llegue la fecha."

Él rio. "Si hicieras eso, no podríamos hacer esto."

Tenía razón. "Tienes razón. ¿Mañana a la noche?"

"¿Me mostrarás algo más que hayas comprado?" Preguntó entusiasmado.

¿Cuán lindo era? Como un niño pequeño en navidad. Me reí. "No puedes verlo todo antes del fin de semana, avaricioso." Su puchero casi hizo que cediera. Tal vez podría comprometerme. "¿Qué te parece si uso esto de nuevo?"

S

u sonrisa se agrandó. "Okey, si insistes en que te vea usando lo mismo dos veces."

Ha, le encantaba. "Sufre por mí, Cole."

Me dio un gran y falso suspiro. "Es cierto. Lo soporto porque eres tú."

"Eso es algo grande de tu parte."

"Soy un chico grande."

Como si no lo supiera. Reí de nuevo. "Ve a limpiarte, chico grande. Hablaremos en la mañana."

Me dio esa sonrisa especial de nuevo. "Okey, buenas noches, bebé."

"Buenas noches, hermoso."

Apagué mi computadora y me quité el conjunto, cambiándolo por la remera de noche. Amaba que le encantara la remera tanto como el conjunto sexy. Amaba todo en mí. Él me amaba, lo sabía. O eso esperaba. Cerré mis ojos e intenté imaginar como sonaría si él lo dijera. Cuando se lo dijera a él. En la cabaña. Tenía que suceder allí.

Xoxoxoxox

Mi alarma sonó muy temprano pero no me importaba porque estaba ocho horas más cerca de Cole. Le envié un mensaje de texto antes de salir de la cama y prepararme para ir a clases.

Buenos días, cariño. Desperté con una gran sonrisa en mi rostro. Sólo faltan dos días. No puedo esperar.

Abrí Words para ver que tenía para mí. ¿GAINS? Eh, no era sexy, pero estaba a dos puntos de superarme, lo cual ahora entendía porque lo había jugado. Pobre tipo, queriéndome ganar. Reí cuando vi mis letras. Gana esto, bebé. Jugué JUICE por doble puntaje de la E en SEMEN. Mis palabras eran tan malas pero me daban risa. Abrí el mensaje para ver su respuesta.

Traviesa Lil, provocándome con todo lo que hayas comprado. El rojo es mi color favorito en ti. Ese sujetador rojo con esas bragas lucían deliciosas en tu piel. También tu lindo culo cuando le di una nalgada, lo cual tengo que hacerlo de nuevo por todas las provocaciones que me haces.

Más nalgadas. Dios, me mataba.

Puedo tomarte en cada superficie de la cabaña, ¿verdad? Veamos, cuatro habitaciones lo cual equivale a cuatro camas, cuatro baños con duchas y tinas, una cocina, una sala, una oficina, un jacuzzi… eso es demasiado, bebé. ¿Estás seguro que puedes aguantar todo?

Tal vez no, pero estoy demasiado segura de que lo intentaré. Dudo que te quejes.

Yo también te extraño, aunque supongo que necesito estos cuatro días para recuperarme y así poder poseerte apropiadamente. Nos vemos pronto, sexy.

Dos días ahora, Cole. Muy pronto. Ahora es mi turno.

Creí que era una buena palabra ya que tú haces que mis jugos fluyan con tan sólo una palabra. Bueno, tal vez se necesita más de una palabra, pero no demasiadas. Especialmente cuando haces referencias a las nalgadas. ¿Quién dijo que era una loca entre las sábanas? Tú sacas ese lado de mí, Cole.

¿Qué? Amaba esa canción de Usher. A lady in the streest but a freak in the bed. Las sábanas eran mejor, rimaban más.

Puedo aguantar todo lo que tú me des, hermoso. Cualquier hora en cualquier lugar, ¿recuerdas? Incluso en el probador. Por ahora, supongo que tendremos que conformarnos con esos diez lugares en la cabaña. Supongo que eso nos mantendrá ocupado una buena parte del tiempo.

Para el tiempo que leas esto, faltarán sólo dos días. Estoy lista y esperándote.

Eso serviría. Me levanté de la cama, me duché y me preparé para ir a clases. Cuando salí, tenía un mensaje de texto de Cole.

Buenos días, princesa. Desearía ver por mí mismo esa sonrisa, pero me conformaré con le hecho de que en tan sólo dos días, esa sonrisa, con todo tu cuerpo, serán míos. Respóndeme cuando puedas.

Lo haría cuando no tuviera que salir corriendo para ir a clases. Nuestros mundos continuarían hasta que pudiéramos vernos de nuevo.

Xoxoxox

Lo hicimos. Lo logramos. Nuestras sesiones de Skype se mantuvieron calientes, nuestras llamadas se mantuvieron dulces y nuestros mensajes de texto y en Words continuaron sugestivos y eso funcionaba para nosotros. Por supuesto, estaba mirando el reloj y la ventana cada dos minutos esperándolo. Estaría aquí en cualquier momento.

Vi una SUV negra aparcar y mi respiración se detuvo. Cole dijo que eso era lo que conducirían. La puerta del auto se abrió y vi un revoltijo de cabello  e ignoré la risa de Barb mientras corría hacia la puerta. Cole pisó el último escalón y le salté encima. Me atrapó y envolví mis brazos y piernas a su alrededor, besándolo. Finalmente estábamos juntos y se sentía bien.



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Gain: Conseguir, obtener, ganarse.
A lady in the streets but a freak in the bed: Una dama en las calles pero una loca en la cama. La canción se llama Yeah! y como dijo Lili es de Usher xd

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Espero que les gustara el cap chicxs en un rato subiré otro



A través de un juego Donde viven las historias. Descúbrelo ahora